Vehículos
Quiere cambiarle los rines a su carro: conozca los riesgos y los peligros de esta práctica
Con el ánimo de lucir mucho mejor un vehículo, muchas personas modifican los rines, pero desconocen las consecuencias que tienen sobre la seguridad del auto.


Modificar los rines o cambiar su tamaño es una práctica común entre los entusiastas del tuning y los conductores que buscan mejorar la estética o el rendimiento de su vehículo.
Sin embargo, esta modificación, si no se hace correctamente, puede traer consecuencias negativas tanto para la seguridad como para el rendimiento del automóvil.
Para poder hacerlo y no sufrir en el intento, es necesario analizan los principales riesgos asociados con el cambio de rines, las recomendaciones de los fabricantes y la normatividad que debe tenerse en cuenta en Colombia.

Alteración del rendimiento del vehículo
Uno de los primeros efectos al cambiar el tamaño de los rines es la alteración del comportamiento dinámico del carro. Al instalar rines más grandes, generalmente se utilizan llantas de perfil más bajo.
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Esto puede mejorar la respuesta de la dirección y dar una apariencia más deportiva, pero también reduce la absorción de impactos, haciendo que el vehículo sea más rígido y menos cómodo sobre superficies irregulares.
Según el portal especializado Tire Rack, el aumento de tamaño puede afectar negativamente el rendimiento del frenado y la aceleración. Al aumentar el diámetro y el peso de los rines, se incrementa la masa no suspendida del vehículo, lo que exige mayor esfuerzo a los frenos y al motor. Esto puede traducirse en un mayor desgaste de componentes mecánicos y menor eficiencia de combustible.
Riesgo de incompatibilidad y daños en la suspensión
Cada vehículo está diseñado para operar con ciertos parámetros establecidos por el fabricante. El ancho, el diámetro y el offset (desplazamiento) de los rines son valores cuidadosamente calibrados. Modificar estos elementos sin considerar la compatibilidad puede generar un desgaste anormal en las piezas de la suspensión y la dirección.
Michelin advierte que un rin mal instalado o con medidas incorrectas puede provocar vibraciones, ruidos y un desgaste irregular de las llantas, además de comprometer el alineamiento del vehículo.
A largo plazo, esto puede traducirse en un daño permanente en componentes costosos como amortiguadores, rótulas, brazos de control y rodamientos.
Impacto en los sistemas de seguridad
Los sistemas de asistencia como el ABS (Sistema Antibloqueo de Frenos) y el ESP (Programa Electrónico de Estabilidad) también pueden verse afectados por un cambio inadecuado de rines. Estos sistemas están calibrados para funcionar con las medidas originales de las ruedas.
Al variar el diámetro total del conjunto rin-llanta, los sensores podrían interpretar de forma errónea las señales, generando fallas o respuestas inadecuadas en situaciones de emergencia.

Un estudio de la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA) reveló que los vehículos con rines no originales tienen un 10% más de probabilidades de perder estabilidad en maniobras bruscas, lo cual incrementa el riesgo de accidentes.
Implicaciones legales y de la revisión técnico-mecánica
En Colombia, modificar los rines puede tener repercusiones legales si se alteran las condiciones de homologación del vehículo. La Resolución 3752 de 2015 del Ministerio de Transporte establece que las modificaciones que afecten el sistema de rodamiento deben ser informadas y registradas. De lo contrario, el vehículo podría no aprobar la revisión técnico-mecánica y ser objeto de sanciones.
Además, según expertos muchas aseguradoras no cubren siniestros si se determina que la modificación de los rines influyó en el accidente, por lo que se recomienda verificar las condiciones del seguro antes de realizar cualquier cambio.
Consejos para una modificación segura
Si bien cambiar los rines puede mejorar la apariencia del vehículo, se deben seguir algunas recomendaciones básicas para evitar riesgos:

- Consultar las especificaciones del fabricante (ancho, diámetro y offset).
- Adquirir rines de marcas reconocidas y con certificación de calidad (ISO, JWL, VIA).
- Realizar el montaje en centros especializados que aseguren el balanceo y alineación adecuados.
- Mantener el diámetro total del conjunto rin-llanta lo más cercano posible al original.
- Revisar periódicamente el estado de suspensión y frenos tras la modificación.