¿Por qué los camiones llevan dos matrículas? La razón técnica y legal detrás de esta norma

En las carreteras se puede ver camiones que circulan con dos matrículas o placas que son visibles: una en la cabina y otra en el remolque o semirremolque.

Aunque para muchos conductores esto puede parecer una simple curiosidad o incluso una redundancia, lo cierto es que esta práctica obedece a una lógica técnica y legal diseñada para garantizar la seguridad en carretera, facilitar la trazabilidad de los vehículos y mejorar los controles de tránsito.

Entender por qué los camiones llevan dos matrículas permite comprender mejor el funcionamiento de los sistemas de transporte de carga y la normativa que los regula.

¿Qué es una matrícula vehicular?

La matrícula o placa vehicular es un identificador único asignado a cada vehículo por la autoridad de tránsito correspondiente.

Está compuesta por una combinación alfanumérica visible en placas metálicas y permite registrar e identificar de manera oficial el automotor, sus características técnicas y su historial legal, incluyendo impuestos, revisiones técnicas, infracciones y traspasos de propiedad.

¿Por qué los camiones necesitan dos matrículas?

Los camiones articulados están compuestos por dos unidades principales: el cabezote o tractocamión, que es el que contiene el motor y el sistema de dirección, y el remolque o semirremolque, que es el encargado de transportar la carga.

Ambos componentes pueden operar de forma independiente en términos legales, razón por la cual deben estar identificados por separado.

Esto significa que el tractocamión y el remolque tienen registros, placas y seguros distintos, aunque trabajen en conjunto. La doble matrícula responde a la necesidad de:

1. Identificación independiente

Cada parte del camión tiene una vida útil distinta y puede pertenecer a diferentes propietarios. Es habitual que una empresa de transporte sea dueña de los tractocamiones, pero arriende los remolques o viceversa. Por ello, contar con una placa para cada unidad permite identificar y rastrear cada componente de forma individual, tanto para fines operativos como legales.

2. Control en estaciones de pesaje y seguridad

En los controles de carretera, la policía y las autoridades de tránsito deben verificar no solo la documentación del conductor y del tractocamión, sino la del remolque.

Esto incluye el seguro obligatorio, el certificado de revisión técnico-mecánica y la carga autorizada. La segunda matrícula facilita este proceso y permite detectar irregularidades como sobrepeso, modificaciones no autorizadas o transporte de mercancía peligrosa sin los permisos correspondientes.

3. Regulación del transporte de carga

El transporte de carga está fuertemente regulado, ya que implica riesgos importantes en caso de accidentes. El remolque, al ser la parte que lleva el mayor peso, debe cumplir normas específicas sobre capacidad, dimensiones y seguridad. La matrícula individual garantiza que estas condiciones sean evaluadas de forma separada y objetiva, independientemente del cabezote que lo esté remolcando.

Casos especiales y normativas locales

En países como Colombia, México, España y Estados Unidos, existen regulaciones específicas sobre la matriculación de remolques y semirremolques. En Colombia, por ejemplo, la normativa exige que cada unidad tenga su Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT) y debe portar su respectiva placa física visible en la parte trasera.

En Estados Unidos, cada estado puede tener requisitos distintos, pero en general se exige una matrícula para el vehículo motriz (el camión) y otra para el remolque, lo que permite mayor control en los cruces interestatales.

¿Qué pasa si una de las matrículas no está visible?

Circular sin una de las dos matrículas visibles puede acarrear sanciones económicas y la inmovilización del vehículo. Las autoridades consideran esta omisión como una falta grave, ya que impide la identificación total del conjunto articulado, lo cual representa un riesgo en términos de seguridad vial, evasión de impuestos o control aduanero.