Vehículos
¿Pasajeros se marean más en carros eléctricos? La ciencia encontró la respuesta y no es nada alentadora
La industria ha recogido estas advertencias y desde hace unos años trabaja para solucionar este problema.


La llegada de los vehículos eléctricos abrió un nuevo universo, desconocido para la mayoría del mundo, pues durante décadas la única opción fueron los autos a combustión.
Y aunque la mayor parte de las ventas en el mundo siguen siendo de autos con motores térmicos, la experiencia y el acercamiento a las nuevas tecnologías dejó de ser un mito para convertirse en una realidad.
En este sentido, cada vez son más las personas que han tenido la oportunidad de conducir o viajar en un vehículo eléctrico, sea un automóvil, un bus o un camión, lo cual también ha dejado en evidencia aspectos que hasta ahora eran desconocidos y que con la masificación de esta tecnología han salido a la luz.

Carros eléctricos, un mundo nuevo y desconocido
Hasta hace unos años, los humanos solo habían interactuado con los vehículos a combustión, razón por la que viajar o manejar uno de estos era totalmente familiar.
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Durante décadas, los sentidos se acoplaron y casi que de forma automática detectaban lo que podría pasar a bordo de un auto a gasolina gracias a las señales que este enviaba: ruido del motor, cambios de marcha, sonido diferente al activar la reversa y vibraciones propias del movimiento del motor.
Ahora, todo esto ha desaparecido con la llegada de los vehículos eléctricos, pues quienes han tenido la oportunidad de disfrutarlos pueden dar fe de que no se siente cuando están prendidos y que no emiten ningún ruido ni vibración que permitan identificarlo.
De la mano con esto, científicos han comenzado a identificar el aumento en el reporte de mareos de pasajeros que viajaron en carros eléctricos, por lo que comenzaron a indagar qué producía esta extraña coincidencia.
Lo primero que hicieron fue identificar que las causas de las náuseas en los autos se da porque el cerebro recibe señales contradictorias de los oídos, los ojos y otras partes del cuerpo, provocando esa desestabilización.
Todas esas señales, procesadas luego de percibir ruidos, vibraciones y movimientos, ya no existen en los carros eléctricos, lo que también está provocando mareos en los pasajeros.
Según un artículo publicado por ABC News, en el que citan al doctor DJ Venret, médico otorrinolaringólogo de Texas, Estados Unidos, estas situaciones se han incrementado por la falta de estímulos que permitan al cerebro anticiparse a los movimientos del vehículo.

“Es algo real. (...) El cerebro crea un modelo de lo que espera en ciertas situaciones. En los autos de combustión, se oye el motor acelerar y se sabe que alguien está pisando el acelerador. El coche avanza. En un vehículo eléctrico, las señales auditivas y visuales no se ajustan al modelo de lo que realmente se está moviendo”, explicó el especialista.
De igual forma, expertos como Ed Kim, presidente y analista jefe de AutoPacific, ha señalado en varia oportunidades que cualquier persona que haga la transición a un vehículo eléctrico debe tener una curva de aprendizaje que le permita a operar el auto sin provocar movimientos bruscos al momento de acelerar o de aprovechar el frenado regenerativo.
La industria no es ajena
Para los fabricantes, esto ha significado una oportunidad bastante amplia, pues los ha llevado a tomar en serio estas molestias y a trabajar para mitigarlas.

Algunas marcas han incorporado sonidos que simulan el ruido propio de un carro a combustión, otros, han tratado de igualar los sonidos propios de un motor trabajando a altas revoluciones, y hasta han incluido en sus modos de conducción la opción ‘Comfort’, con la que buscan disminuir la eficiencia del vehículo para provocar sensaciones que sean mucho más familiares y así evitar las náuseas.