Vehículos
No es solo precio: esta es la diferencia entre gasolina extra y corriente; así puede utilizarlas para mejorar el rendimiento
A la hora de tanquear, es calve atender las recomendaciones del fabricante y las cuales están consignadas en el manual o en la tapa del tanque.


Cuando se trata de escoger el combustible adecuado para un vehículo, muchos conductores en Colombia se preguntan si realmente hay una diferencia significativa entre la gasolina extra y la gasolina corriente.
Aunque ambas cumplen la función de hacer funcionar el motor, sus características químicas, desempeño y efectos a largo plazo en el motor varían considerablemente.
Debido a esto y para evitar daños considerables en el motor, los cuales se ven en el largo plazo, es clave comprende sus diferencias, por qué hay vehículos que requieren cierto tipo de gasolina y cómo impacta esto en la salud del auto.

Composición química y octanaje
La principal diferencia entre la gasolina extra y la gasolina corriente radica en su número de octanos. Este número indica la capacidad del combustible para resistir la detonación prematura dentro del cilindro, un fenómeno que puede afectar el rendimiento del motor.
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En Colombia, según datos de Ecopetrol, la gasolina corriente tiene un octanaje de 87, mientras que la gasolina extra alcanza los 95 octanos. Un mayor octanaje permite una combustión más controlada, especialmente en motores de alta compresión o aquellos diseñados para un desempeño superior.
¿Qué tipo de motor requiere cada gasolina?
Los fabricantes de vehículos diseñan sus motores para funcionar con un tipo específico de combustible. Las máquinas convencionales, como los que se encuentran en la mayoría de los carros particulares y motos de baja cilindrada, están calibrados para funcionar adecuadamente con gasolina corriente.
Por otro lado, los motores de alto rendimiento, como los que equipan vehículos deportivos, de lujo o con tecnologías turboalimentadas, requieren gasolina extra para evitar el golpeteo del motor (knocking), lo que podría reducir su vida útil.

Utilizar gasolina de menor octanaje en un motor que exige uno alto puede causar combustión irregular, pérdida de potencia e incluso daños permanentes en componentes internos. Según la Asociación Colombiana de Petróleo y Gas (ACP), usar gasolina con el octanaje incorrecto es una de las principales causas de deterioro anticipado del motor.
Precio y economía
Otra diferencia notable entre la gasolina corriente y la extra es su precio. Aunque la gasolina extra puede ofrecer un mejor rendimiento en términos de potencia, para vehículos diseñados para gasolina corriente, el uso de la extra no representa una mejora significativa en el consumo ni en el desempeño. En ese sentido, pagar más por gasolina extra en un motor no preparado para ella es un gasto innecesario.
Impacto ambiental
Ambos tipos de gasolina generan emisiones, pero la extra, al permitir una combustión más eficiente en motores de alto rendimiento, puede emitir menos contaminantes si se usa correctamente. No obstante, esto depende en gran medida del estado del vehículo y del mantenimiento que reciba.

El uso del tipo de combustible recomendado por el fabricante también garantiza una mejor eficiencia del sistema de control de emisiones. Esto se alinea con los objetivos del Gobierno colombiano para reducir la huella de carbono en el transporte y fomentar un uso más racional de los recursos energéticos.
¿Cuál elegir?
La elección entre gasolina extra y gasolina corriente debe hacerse en función de las especificaciones del fabricante del vehículo. Estas se encuentran usualmente en el manual del propietario o en la tapa del tanque de gasolina. Ignorar estas recomendaciones puede comprometer el rendimiento, aumentar el consumo de combustible e incluso generar gastos costosos en reparaciones.
Para la mayoría de los conductores colombianos que utilizan carros o motos de uso cotidiano, la gasolina corriente es más que suficiente. Sin embargo, quienes conducen vehículos con exigencias técnicas mayores deben optar por la gasolina extra, no solo para cuidar su inversión, sino también para garantizar el mejor desempeño.