Los 7 detalles que pueden delatar a un vendedor de carros fraudulento: así lo puede coger en la mentira y evitar ser engañado

Comprar un vehículo usado puede ser una excelente forma de ahorrar dinero, pero también implica ciertos riesgos.

Uno de los más comunes es que el vendedor o intermediario oculte información importante sobre la antigüedad real del auto. Ya sea por rebajar el kilometraje, modificar documentos o alterar detalles estéticos, algunos autos pueden parecer más nuevos de lo que realmente son.

En este sentido, hay algunos expertos que han compartido varias formas para identificar las señales que indican su un carro es más viejo de lo que se ha declarado.

Incongruencias en el Número de Identificación Vehicular (VIN)

El VIN es la huella digital del vehículo. Es un código único de 17 caracteres que contiene información sobre el país de origen, fabricante, modelo, año y características específicas del carro.

Si el número de serie no coincide entre los diferentes lugares donde debería aparecer (como el tablero, el chasis y la puerta del conductor), es una alerta roja.

Desgaste inusual en componentes clave

Una inspección visual puede revelar señales claras de envejecimiento que contradicen el año declarado. Si un auto supuestamente tiene solo 50,000 km pero muestra algunas de las siguientes señales, es probable que haya recorrido mucho más de lo indicado, o que tenga más años de los que se afirma.

• Pedales de freno y embrague excesivamente gastados
• Volante pelado o con grietas
• Palanca de cambios floja o desgastada
• Asientos hundidos o con tapicería deteriorada

Luces, sistemas eléctricos y tecnología desactualizada

Los avances tecnológicos en los autos son constantes. Si el vehículo dice ser de 2018, pero no tiene funciones básicas como Bluetooth, cámara de reversa, control de estabilidad (ESP) o conexiones USB, es momento de dudar.

También se debe revisar el tipo de focos en faros y luces traseras. Un modelo reciente difícilmente usará bombillas halógenas en lugar de tecnología LED o Xenón.

Estado del motor y compartimiento del motor

El desgaste del motor también revela mucho. Fugas de aceite, correas cuarteadas, oxidación en partes metálicas o conexiones sueltas son signos de un uso prolongado.

Un mecánico experimentado puede identificar fácilmente si el estado del motor corresponde al año y kilometraje declarado. Según Autobild, las mangueras y partes plásticas comienzan a agrietarse notablemente a partir de los 10 años de uso en condiciones normales.

Documentación sospechosa o alterada

Un truco común es la falsificación o modificación del título del vehículo. Si los documentos presentan tachaduras, fechas poco claras, errores ortográficos o sellos difusos, se debe investigar más a fondo.

También es buena práctica verificar la tarjeta de propiedad con la entidad de tránsito correspondiente y cotejar si el historial de inspecciones técnicas (como la revisión técnico-mecánica en algunos países) coincide con el supuesto año.

Neumáticos y rines no originales o de generación anterior

Los neumáticos tienen un código de fabricación que permite conocer la semana y el año en que fueron producidos. Si un auto modelo 2020 tiene neumáticos fabricados en 2016, eso no cuadra.

Lo mismo aplica para rines que no coincidan con el diseño del modelo declarado. Estos detalles son usualmente ignorados por vendedores inescrupulosos, pero pueden delatar la edad real del vehículo.

Revisión profesional con escáner automotriz

Muchos talleres especializados pueden conectar un escáner al sistema del vehículo y obtener datos como la fecha real del primer encendido, número de horas de uso del motor y kilómetros reales registrados en módulos distintos al odómetro.

Esta herramienta es fundamental para descubrir manipulaciones electrónicas que aparentan un menor uso o edad.