Cuatro pintorescos pueblos de Colombia para visitar al menos una vez en la vida; son tesoros turísticos imperdibles

Colombia se caracteriza por su gran diversidad, que lo hace uno de los países más lindos del mundo, pero también por la belleza de sus pueblos, que con construcciones coloniales parecen únicos y como sacados de un cuento.

La lista de poblaciones con estas características es larga y todas vale la pena conocerlas, pero aquí se reseñan cuatro que deberían contemplarse para las próximas vacaciones. Se trata de Guatapé, en Antioquia; Salento, en Quindío; Salamina, en Caldas y Ráquira, en Boyacá. Estos son los encantos de estos lindos destinos.

Guatapé

Este es un pueblo considerado de realismo mágico, pues se encuentra en una montaña, con un pedazo de mar en el corazón, como lo describe el portal Turismo Antioquia Travel.

Ubicado en el oriente de Antioquia, este municipio llama la atención debido a su riqueza histórica y a que ofrece una estética tradicional de la cultura antioqueña, con colores vivos y muy llamativos.

Se dice que sus casas están vestidas con obras de arte llamadas zócalos, en los que es posible apreciar figuras geométricas, siluetas, momentos y formas que hablan de la idiosincrasia antioqueña. Las viviendas son una paleta de colores vivos, que van desde azules brillantes hasta rojos intensos, naranjas y verdes, entre muchos otros.

Salamina

En medio de montañas y cafetales se encuentra esta linda población caldense. Sus casas fueron construidas con el tradicional bahareque, pintadas de colores vistosos, con majestuosos portones de madera y balcones repletos de flores que adornan sus calles estrechas.

Salamina hace parte del Paisaje Cultural Cafetero (PCC), declarado Patrimonio Mundial por la Unesco, en el año 2011. Es un lugar que destaca por su herencia cultural y patrimonio arquitectónico, su gastronomía, artesanías autóctonas y sus paisajes.

Quien llega hasta este lugar puede disfrutar de su rico aroma a café y la calidez y amabilidad de sus pobladores, que hacen que los turistas se sientan como en casa.

Salento

Este es considerado uno de los pueblos más encantadores y llamativos no solo del Eje Cafetero, sino de Colombia. Este pequeño rincón, enclavado en el corazón del Quindío, se caracteriza por sus casas coloridas, su cultura y la belleza natural del Valle del Cocora.

Es el pueblo más antiguo de esta región y está adornado con la palma de cera, reconocida como el árbol nacional. El portal Colombia Travel indica que Salento se destaca por el colorido de su arquitectura basada en casas hechas de bahareque, una mezcla de cañas, madera y tierra que recuerda la forma en la que construían los antepasados.

Una de sus particularidades son las casas coloniales, que llaman la atención por la combinación de colores y sus balcones repletos de macetas que desbordan de flores y helechos.

Ráquira

En Boyacá está Ráquira, destino que también llama la atención por la cantidad de colores en sus casas y porque es una población muy tradicional, en donde la elaboración de ollas y otros objetos de barro es uno de sus principales símbolos de identidad.

Información del Ministerio de Cultura, en su página web, indica que esta población es referente obligado en el tema artesanal y por eso en un viaje por este lugar los visitantes tienen la posibilidad de vivir experiencias especiales al recorrer sus talleres, con el fin de aprender sobre el proceso de alfarería, la cual se basa en técnicas ancestrales, que por años han sido el sustento de este municipio boyacense.

A esto se suman varios atractivos naturales que los turistas pueden conocer en la zona rural del municipio, mientras se deleitan con su rica y variada gastronomía.