Astronomía

Eclipse lunar de septiembre 2025: por qué se llama ‘luna de sangre’ y cuándo observar este sorprendente fenómeno celeste

El 14 de marzo se observó el primer eclipse lunar total del año, conocido como ‘luna de sangre’ o ‘luna roja’.

15 de agosto de 2025, 6:27 p. m.
Un eclipse lunar se da cuando el Sol, la Tierra y la Luna se alinean total o parcialmente.
Un eclipse lunar se da cuando el Sol, la Tierra y la Luna se alinean total o parcialmente | Foto: Getty Images

Los eclipses lunares figuran entre los fenómenos astronómicos más cautivadores registrados a lo largo de la historia. Según la explicación ofrecida por la NASA, este suceso se produce cuando el Sol, la Tierra y la Luna se alinean de forma que el satélite natural cruza la sombra proyectada por el planeta.

Este tipo de fenómenos despierta el interés de millones de personas en todo el mundo, quienes esperan el momento preciso para observarlos y disfrutar de su belleza. En lo corrido de 2025, uno de los primeros eclipses destacados fue la conocida “luna de sangre” o “luna roja”, un evento que tiene lugar durante un eclipse lunar total, cuando el satélite terrestre adquiere una tonalidad rojiza.

La Luna se tornará roja en el primer eclipse lunar total del año, visible en Colombia el 14 de marzo.
Los eclipses lunares han sido considerados a lo largo de la historia como eventos astronómicos fascinantes y visualmente impactantes. | Foto: Getty Images

El pasado 14 de marzo se registró el primer fenómeno de este tipo en el año. Según el portal National Geographic, tuvo una duración total de 66 minutos, tiempo en el que los espectadores pudieron apreciar la transformación completa de la Luna.

No obstante, el evento astronómico más esperado se producirá entre el 7 y 8 de septiembre, cuando ocurra el segundo eclipse lunar del año, de mayor intensidad y visible en gran parte de Sudamérica, Norteamérica, Europa, África y algunas zonas de Asia.

La NASA también prevé que 2026 será un año con destacada actividad lunar. Se anticipa un eclipse total para el 3 de marzo, visible en Asia, Australia, islas del Pacífico y América; así como un eclipse parcial los días 27 y 28 de agosto, que podrá observarse en América, Europa, África y Asia Occidental.

Durante un eclipse total, la Tierra se interpone directamente entre el Sol y la Luna, bloqueando la luz solar que normalmente ilumina al satélite. Sin embargo, parte de esa luz logra rodear el planeta y atravesar la atmósfera. En ese trayecto, los rayos solares se dispersan, filtrando los colores de longitud de onda más corta —como el azul— y permitiendo el paso de los tonos rojizos, que finalmente tiñen la superficie lunar.

Dependiendo de la posición de los tres cuerpos celestes, el fenómeno ofrece una vista singular, ya sea del Sol o de la Luna.
Dependiendo de la posición de los tres cuerpos celestes, el fenómeno ofrece una vista singular, ya sea del Sol o de la Luna. | Foto: Getty Images

La intensidad del color varía según las condiciones atmosféricas. La entidad detalla que la presencia de polvo, nubes o partículas volcánicas puede intensificar o atenuar el tono. En ocasiones, la Luna adopta un rojo profundo; en otras, presenta un matiz más tenue.

Aunque la Tierra puede experimentar entre dos y cuatro eclipses lunares al año, no todos alcanzan la totalidad necesaria para producir este característico efecto.

De hecho, los eclipses totales, capaces de mostrar la icónica “luna de sangre”, se registran en promedio una vez cada año y medio y pueden ser observados desde cualquier región donde la Luna se encuentre sobre el horizonte.