POLÍTICA
El ministro de Justicia, Eduardo Montealegre, se está quedando solo con su proyecto de ley que busca un marco jurídico para la paz total de Petro
El Congreso votará y decidirá la suerte del proyecto, la iniciativa llega a la Comisión Primera de la Cámara con mucho ruido.
El proyecto de ley que establece el marco jurídico para la paz total del presidente Gustavo Petro no lleva ni una semana de radicado en el Congreso y ya genera todo tipo de reacciones. Pocos entienden cómo se plantea la rebaja de penas y la reclusión en sitios especiales —que no son cárceles— para temidos capos del narcotráfico en Colombia.
El ministro de Justicia, Eduardo Montealegre, insiste en justificarlo, pese a que es consciente de los obstáculos que enfrentará la iniciativa en la Cámara y el Senado a menos de año de las elecciones legislativas.
Aunque también se ha encontrado a varios detractores, incluso, al interior del propio Gobierno.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, no se ha referido oficialmente al tema. Es político y tiene claro que en el cierre de una legislatura el trámite de los proyectos se dificulta porque los parlamentarios se vuelven más exigentes, su único interés es revalidar su curul en el 2026 y la mayoría están en campaña por las regiones.
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El alto comisionado para la paz, Otty Patiño, fue uno de los primeros funcionarios del Gobierno Petro en sacarle el cuerpo a la iniciativa. En el diario El Tiempo habló de improvisación en la iniciativa. El problema es que a ambos funcionarios los une una sola cosa: el desmantelamiento de los grupos armados y la paz total. Patiño aseguró que no fue consultado por el hoy ministro antes de radicar la iniciativa. ¿Por qué no se hablaron si son compañeros? ¿El ministro de justicia se saltó al alto comisionado para la paz?, son algunas de las preguntas que saltan a la vista.

Como si fuera poco, el presidente del Senado, Lidio García, no le bajó el tono a las críticas contra este proyecto.
“Realmente es una propuesta complicada, bastante, bien difícil”, dijo García este martes en conferencia de prensa.
Horas antes habló en una estación radical y la consideró como una “propuesta salida de los cabellos, un proyecto difícil de entender, una iniciativa que tendrá muchos problemas en el Congreso”.

El expresidente Juan Manuel Santos, quien ha tenido cercanía con el ministro Eduardo Montealegre, también destrozó el proyecto de ley.
“Yo le diría dos cosas al ministro Eduardo Montealegre. Primero, que en lugar de citar a filósofos, yo voy a citar a mi mamá. Cuando yo estaba muy chiquito, ella me enseñó que uno primero se pone las medidas y luego los zapatos. Me decía que uno no se pone los zapatos y luego las medias porque eso es imposible. Y eso es lo que ha ocurrido con la paz total”, afirmó el nobel de paz en Caracol Radio.
El exjefe negociador del Gobierno con las Farc, Humberto de la Calle, también se sumó al coro de críticos a la iniciativa.

“Peligroso e inoportuno el proyecto de favorecimiento a grupos armados ilegales. Peligroso porque salen a la calle capos pura sangre. Inoportuno: este es un momento de debilidad del Estado. Una cosa es montar mesas cuando el Estado llega con éxitos militares. Y a 11 meses de elecciones, ¿tiene efectos sobre el resultado?“, preguntó De la Calle.
El proyecto empezará su discusión en la Comisión Primera de la Cámara en medio de una fuerte controversia.