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Volvió el sarampión: alerta en Estados Unidos por brote del virus. Hay miles de contagiados en varios estados
Las autoridades sanitarias están preocupadas por el aumento de casos ante la llegada del verano.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) emitieron un comunicado el pasado 6 de junio sobre un balance de los casos de sarampión en Estados Unidos, los cuales van en aumento.
Según los números presentados, 34 jurisdicciones (estados como Nueva York, Florida, Texas, Louisiana, California, Virginia, Washington, Nueva Jersey, entre otros) han confirmado 1.186 casos de sarampión.
Durante el presente año, se han presentado 17 brotes y el 89 % está asociado a uno de estos, lo que aumenta la preocupación de los organismos de salud. Respecto a 2024, solo hubo 285 casos reportados. Además, se han presentado tres muertes por la enfermedad durante 2025.
Los CDC mencionan que las jurisdicciones tienen datos más actualizados, por lo tanto, se puede consultar los organismos de salud de cada estado para más información.
¿Cómo detectar los síntomas?
Según la Clínica Mayo, el sarampión causa un tipo de salpullido con manchas rojas que, en la mayoría de casos, aparece en la cara y atrás de la oreja. También puede cubrir el pecho, la espalda y los pies.
Estos son los síntomas más relevantes a tener en cuenta acorde con lo informado por Mayo Clinic:
- Fiebre
- Tos seca
- Goteo de la nariz
- Dolor de garganta
- Ojos inflamados (conjuntivitis)
- Manchas blancas diminutas con centro blanco azulado y fondo rojo dentro de la boca, en la cara interna de la mejilla.
- Sarpullido constituido por manchas grandes y planas que generalmente se funden entre sí.
Dichos síntomas aparecen entre 10 y 14 días después de la exposición al virus.
No hay tratamiento específico para el virus, por lo que se recomienda tratar los síntomas.
Acuda a un centro de salud en caso de ser necesario.
¿Cómo se contagia?
El virus se puede contagiar fácilmente. Se aloja en la mucosa de la nariz y en la garganta. Cuando la persona infectada tose o estornuda, las gotas con el virus quedan en el aire y, por tanto, quien se expone a estas quedan a merced del virus.
El virus es más contagioso durante los cuatro días posteriores y anteriores a la incubación. También es posible que las partículas con el virus queden impregnadas por un tiempo en las superficies.
Así bien, es imprescindible la vacunación con fines preventivos y de autoinmunidad.
