En ‘Foreign Policy’, Juan Carlos Pinzón alerta sobre la estrategia de Petro para acercarse a China: “Alejar a Colombia de su aliado más importante, Estados Unidos”

El exministro de Defensa de Colombia, Juan Carlos Pinzón, participó en un análisis publicado en la revista norteamericana Foreign Policy (FP), la cual está especializada en relaciones internacionales, política exterior y geopolítica global.

En el artículo, que fue escrito por el exministro y Ryan C. Berg, director del programa de las Américas del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, los expertos hacen un análisis a nivel global de la estrategia de China y Estados Unidos para posicionarse como líderes en la región.

El también exembajador colombiano en Estados Unidos, aseguró que China continúa consolidando su presencia en América Latina a través de una combinación de ofertas no monetarias, como programas de formación y diplomacia partidista, y compromisos bilaterales con países clave como Brasil y Colombia

Aunque Estados Unidos ha reforzado su enfoque en la región, sobre todo desde la administración Trump, China mantiene su estrategia previa: diplomacia a través de la CELAC (que excluye a EE. UU. y Canadá), según el texto.

Por otro lado, Pinzón hizo hincapié en el segundo gobierno de Trump que inició con una fuerte actividad diplomática en América Latina. Altos funcionarios, incluyendo los secretarios de Estado, Defensa y Seguridad Nacional, han realizado visitas a varios países de la región.

Estas acciones habrían dejado a China en desventaja, temporalmente, pues el gigante asiático no estaba preparado para la considerable atención de la administración Trump al hemisferio occidental.

Pinzón, quien es investigador diplomático visitante del programa de las Américas del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, aseguró que Lula da Silva firmó más de dos docenas de acuerdos e impulsó inversiones multimillonarias, centradas en infraestructura portuaria, la industria aeroespacial y un acuerdo de swap de divisas.

China busca así reducir su dependencia de productos agrícolas estadounidenses, favoreciendo las importaciones brasileñas.

Por su parte, el presidente colombiano Gustavo Petro anunció la adhesión de Colombia a la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI), lo que dio a China una oportunidad para acercarse a un socio tradicionalmente alineado con Estados Unidos.

Según el texto publicado por Foreign Policy (FP), aunque el comercio entre Colombia y EE. UU. sigue siendo mayor que con China, la falta de interés estadounidense en ciertos proyectos —como el metro de Bogotá, adjudicado a una empresa china— ha facilitado la expansión de la influencia china.

Pinzón recalcó que la decisión de Petro parece motivada tanto por pragmatismo como por ideología, en un contexto de creciente inestabilidad interna, debilitamiento fiscal y deterioro de la relación con EE. UU. China está aprovechando este escenario para fortalecer su presencia en la región.

"La caída de Colombia en un estado de caos bajo el gobierno de Petro, cuyas políticas han facilitado la expansión de grupos armados y organizaciones criminales colombianas, han dañado la estabilidad fiscal del país", dicen los autores del artículo.

A pesar de ciertos desafíos internos en China y la creciente competencia estadounidense, Pekín sigue apostando por sus herramientas tradicionales de influencia, con una retórica centrada en la soberanía, el multilateralismo y la multipolaridad, y alertando a los países sobre las consecuencias de alinear sus políticas demasiado con Washington, según el artículo.