Inmigrante ilegal colombiano es acusado de violar a una mujer mientras entregaba un domicilio con un perfil falso

Un joven de 21 años, de origen colombiano, compareció ante un tribunal por primera vez después de que fuera acusado de violar a una de sus clientes dentro de su propia casa.

Se trata de Roiber Andrés Rodríguez Meléndez, quien se declaró inocente del cargo al ser detenido a principios del mes de febrero y permanecer privado de su libertad sin derecho a fianza.

Rodríguez habría cometido el crimen el pasado 9 de febrero en Springfield, Massachusetts, después de haber entregado un pedido de comida que fue ordenado por la mujer en la plataforma de Uber Eats.

Según los primeros informes de los fiscales encargados del caso, el colombiano no estaba en Estados Unidos de forma legal y estaba entregando comida en la plataforma, con un nombre femenino y usando la foto de su propia madre para evitar ser detenido y cuestionado en un retén policial.

Los informes indican que cuando el hombre llegó al domicilio de la clienta, esta se sorprendió pues creía que se trataba de una mujer la que le entregaría su pedido; sin embargo, le permitió entrar un momento a su casa porque “hacía frío” y “no hablaba inglés”.

Después, la mujer dijo a los oficiales que el conductor le pidió un código de cuatro dígitos para completar la entrega y llamó a un amigo que hablaba español para que actuara como traductor.

Mientras estaba en una llamada a tres bandas con el soporte técnico de Uber, Meléndez supuestamente agarró el teléfono de la víctima y colgó antes de obligarla a ir al baño.

El presunto ataque sólo terminó cuando la amiga llamó a la víctima “incesantemente” y ella finalmente contestó, y Meléndez huyó de la casa cuando la amiga volvió a estar en la línea, según reporta el Daily Mail.

El colombiano huyó de la escena y fue identificado por la cámara para mascotas que la víctima tenía en su casa y otro dispositivo de grabación fuera del domicilio. La policía usó este material para iniciar la búsqueda exhaustiva del presunto violador.

Más tarde, la amiga fue a la casa de la víctima y le dijo a la Policía que había estado en línea con el soporte técnico de Uber, que dijo que no se había requerido ningún código para el pedido.

Según informes, Meléndez dijo a la policía que no tuvo contacto con la mujer cuando fue arrestado y aceptó dar una muestra de ADN a las autoridades, según Boston Globe.

“Él declaró que la mujer que ordenó la comida estaba ‘borracha’, ‘fuera de sí’, cuando hizo la entrega y no pudo proporcionar un código que necesitaba para completar el pedido”, afirmaron los registros judiciales.

Según el diario, Meléndez modificó su versión de los hechos al ser interrogado por la Policía. En un principio, supuestamente, afirmó que nunca había ingresado a la vivienda de la mujer y que solo permaneció en la puerta durante unos diez minutos antes de marcharse.

Sin embargo, al presentarle la evidencia de la cámara de seguridad interior, su relato cambió y sostuvo que únicamente había cruzado la puerta, según indicó la policía.

Cuando se le preguntó acerca de los 30 minutos que capturó la grabación, insistió en que solo intentaba obtener el código necesario para completar el pedido y que la mujer dentro de la casa estaba “borracha” o “bajo los efectos de alguna sustancia”, según los registros judiciales.