Colombianos deportados de Estados Unidos estarían llegando esposados de pies, manos y cintura
A pesar del supuesto acuerdo que había llegado el gobierno Petro con Washington, los colombianos expulsados del país norteamericano siguen bajo las mismas condiciones que había denunciado el mandatario.
Las tensiones entre los Estados Unidos y Colombia parecen muy lejos de terminar, tras la crisis diplomática ocurrida el pasado fin de semana entre el gobierno de Gustavo Petro con el de Donald Trump, esto por cuenta de lo que el mandatario colombiano alertó sobre supuestos maltratos que los inmigrantes nacionales estaban recibiendo por parte de las autoridades estadounidenses.
Según había denunciado el presidente colombiano, los deportados hacia territorio nacional estaban esposados de pies, manos y cintura, lo cual para el presidente Petro es una muestra de maltratos que estaban recibiendo los connacionales a la hora de ser expulsados desde Estados Unidos. Pero tras el acuerdo del pasado domingo con Washington, parecía una realidad que los migrantes no iban a llegar esposados a Colombia.
Sin embargo, ahora parece que la realidad es una distinta, ya que en el cuarto vuelo de deportados que aterrizó en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, en las horas de la tarde del jueves, se demostró que la realidad era una muy distinta, ya que según aseguraron varios de estos a Noticias Caracol, los colombianos que viajaban en la aeronave denuncian que venían esposados de pies, manos y cintura, a pesar de la instrucción presidencial.
De acuerdo con el medio de comunicación, los colombianos llegaron en un vuelo regular en el que habitualmente llegan los deportados, pero a diferencia de los tres anteriores, estas personas venían esposadas de pies, manos y cintura. Y fue tan pronto como aterrizaron en el aeropuerto de El Dorado en Bogotá y fueron a descender, que a estas personas les quitaron las cadenas, según contaron varios de los inmigrantes.
Lo más leído
Además, otra particularidad es que ellos venían con sus pertenencias en una especie de lonas, mientras llevaban aún puesta la sudadera gris de los centros de detención donde estuvieron en los Estados Unidos. Y si bien llevaban zapatos, estos no tenían cordones. Por esto y otros tratos recibidos por las autoridades norteamericanas, aseguran que lo que recibieron en esas tierras fue inhumano.
“Nos sentimos humillados por todo lo que hicieron con nosotros”, contó un colombiano tras llegar al país en diálogo con el mencionado medio. “Hubo una pelea y golpearon a un colombiano, lo estaban ahorcando, lo patearon. Y cuando veníamos en el vuelo había un muchacho que sufría convulsiones y pedí que le dieran las pastillas y se las tiraron al piso y no le dejaron tomarlas. Creían que era mentira”, aseguró otro connacional.
Alrededor de 90 personas fueron las que llegaron en el vuelo del jueves que aterrizó en horas de la tarde en Bogotá. Sin embargo, el gobierno nacional no se ha manifestado hasta el momento sobre la situación de los inmigrantes colombianos que llegaron en las mismas condiciones que el presidente Gustavo Petro había denunciado y que sirvió para la ruptura diplomática que Colombia tuvo con los Estados Unidos.
Por ahora, se espera que durante las próximas semanas sigan llegando más vuelos con colombianos deportados provenientes de los Estados Unidos. Usualmente, tienden a llegar unos cuatro de estos cada semana, aunque no se descarta que aumente el flujo de estos por cuenta de las políticas migratorias del gobierno de Donald Trump, que promete expulsar a millones de migrantes irregulares.