Innovación
“Innovar es mirar todo con ojos nuevos”: María Iglesias
Esta ingeniera química, con un MBA de Los Andes, es un referente regional para la industria de los gases industriales y medicinales, a la que aporta una visión de avanzada.

Ha demostrado que los grandes cambios no siempre nacen en laboratorios de alta tecnología, sino en la capacidad de mirar con ojos nuevos, incluso procesos ya consolidados.
Para esta ingeniera química, que lidera la presencia en el continente de la compañía alemana Messer —una de las más grandes del mundo en el campo de la producción y el suministro de gases industriales y medicinales—, innovar es preguntarse sin miedo ni egocentrismo por qué hacemos lo que hacemos y cómo podríamos hacerlo mejor.
Durante la pandemia del Covid-19 enfrentó uno de sus mayores retos: garantizar el suministro de oxígeno a lo largo y ancho del país, en medio de una demanda triplicada y los bloqueos viales derivados del estallido social.
Lo que otros verían como una catástrofe logística, ella lo convirtió en una cadena de soluciones urgentes, ingeniosas y colaborativas. “Movilizamos flotas alternas con acompañamiento militar, establecimos centros de distribución móviles en zonas estratégicas y trabajamos mano a mano con autoridades y comunidades”.
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Su equipo sostuvo así el funcionamiento de los hospitales y salvó vidas. Y lo hizo sin aumentar los precios, comprometido con la idea de que el acceso al oxígeno es un derecho. “No podíamos hacer las cosas como siempre. Era cuestión de vida o muerte”, sentencia emocionada.
Su visión innovadora ha marcado la industria de gases en Colombia. Ella ha liderado la introducción del hidrógeno verde, ha establecido alianzas como la que tiene con el Ingenio Providencia para recibir CO₂ y convertirlo en insumo para gaseosas, y ha impulsado tecnologías como la oxicombustión, que mejora la eficiencia de los hornos industriales. También ha promovido programas de telesalud, atención domiciliaria a pacientes crónicos y acceso inclusivo en zonas rurales.
Defiende que innovar no es un acto de genialidad solitaria, sino uno al que se llega con el equipo adecuado. En sus más de 30 años de trayectoria profesional ha aprendido que todo es un proceso y que, si hay talento, humildad y disposición al cambio, ese proceso se puede perfeccionar.
Cree en el poder de la diversidad, en la riqueza de las nuevas generaciones, en el conocimiento compartido. Y promueve entornos en los que el error no es sinónimo de castigo, sino una oportunidad para aprender.
Su meta es formar nuevos líderes que asuman su legado y continúen la expansión de la compañía en Suramérica, que sean capaces de atreverse a imaginar maneras diferentes de hacer las cosas y de lograr así una verdadera transformación.