Lucha contra las drogas
Estos son los posibles escenarios de una descertificación de Colombia según Control Risk
Además del aumento de actividades ilícitas en el país, la pérdida de la certificación se vería favorecida por la decisión de Trump de ser más agresivo contra el narcotráfico.

Se acerca la fecha en la que se espera que el gobierno de Donald Trump tome una decisión con respecto a si piensa que Colombia está haciendo suficientes esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico. En caso de que considere que no es así, el país volvería a quedar descertificado después de casi 30 años que no vivir esa situación.
En 1996 el argumento fue una insuficiente cooperación del gobierno de Ernesto Samper, esta vez se han generado dudas por la estrategia de la administración de Gustavo Petro de negociar acuerdos de paz con grupos armados y criminales, la cual no solo ha fracasado en gran medida, sino que ha permitido que esas organizaciones expandan su control territorial y actividades ilícitas.
Un informe de la consultora Control Risk señala que entre las estadísticas que elevan los temores de una descertificación están las que evidencian una mayor producción de coca y cocaína. Según la ONU en 2023, el potencial de producción de cocaína aumentó 53 %. Además, los principales grupos de narcotráfico —incluyendo el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Clan del Golfo— han crecido en número de integrantes, alcance geográfico y portafolio criminal.
Theodore Kahn, director del equipo de Análisis de riesgos globales de Control Risks, con sede en Bogotá, señala que en las últimas décadas los estrechos vínculos políticos binacionales han protegido al país de una descertificación, pero las relaciones entre ambos países se han deteriorado bajo Trump y Petro.
Además del empeoramiento de las actividades ilícitas en Colombia, otro factor que jugaría a favor de la descertificación es la decisión de la administración Trump de emplear tácticas financieras, legales y ahora militares más agresivas para perseguir al narcotráfico, así como a las personas y empresas que las apoyan. Prueba de ello es el reciente despliegue de nueve buques de guerra en el Mar Caribe.
En caso de que se hiciera efectiva la descertificación, esta tendría impactos económicos, comerciales, de cumplimiento y de seguridad. “El impacto más inmediato se sentiría en la asistencia estadounidense, que a pesar de los recortes recientes aún asciende a cientos de millones de dólares y es crítica para la recopilación de inteligencia, operaciones aéreas y respuesta humanitaria. Además, EE. UU. podría retener el apoyo a préstamos para Colombia de instituciones multilaterales como el Banco Mundial y el BID”, indican desde Control Risk.
Igualmente, Colombia estaría en riesgo de enfrentar nuevos aranceles y restricciones de acceso al mercado estadounidense si la administración Trump decide aumentar la presión sobre Bogotá.
No obstante, Kahn no cree que el escenario más catastrófico sea el más probable, en su remplazo se podría dar una exención por motivos de seguridad nacional, que permitiría continuar la ayuda y la cooperación a pesar del incumplimiento de Bogotá. En ese caso, el impacto empresarial sería mínimo.

Incluso si no se da el escenario de la exención, la administración Trump podría emitir excepciones específicas para permitir que ciertos programas de cooperación continúen, como lo ha hecho desde que suspendió inicialmente la ayuda en seguridad y aplicación de la ley en enero. “Los programas que se recorten, además, pueden reactivarse si la administración considera que Colombia vuelve a cumplir con sus compromisos. Del mismo modo, acciones más agresivas como aranceles o sanciones financieras contra individuos o empresas colombianas no se activan automáticamente con la descertificación”, explican en la consultora.
Lo anterior, no implica que no vaya a haber descertificación, pues por la postura agresiva e intransigente contra el narcotráfico de Trump, es probable que adopte otras medidas como la suspensión de nuevas líneas de ayuda y cooperación en seguridad, así como una retórica severa acusando al gobierno Petro de apoyar el narcotráfico. “Para subrayar el punto, la administración podría retirar las visas de funcionarios colombianos vinculados a la estrategia de Paz Total”, puntualiza Kahn.
Paralelamente, el Gobierno Petro también tomaría medidas que evidencien su voluntad de cooperación en la lucha antidrogas. Desde la Casa de Nariño ya se habla de interdicción, a medida que fracasan las negociaciones de paz e incluso este lunes 8 de septiembre el presidente abrió la posibilidad de volver a las fumigaciones aéreas de cultivos ilícitos.
“Aun así, la descertificación dejará huella en el entorno empresarial, pues afectará la percepción de riesgo para el sector privado y atraerá el escrutinio de reguladores y autoridades que investigan el narcotráfico, el lavado de dinero y la corrupción”, reiteran en Control Risk.