Ecopetrol
Ecopetrol anunció decisión sobre alternativa para importar gas desde el Caribe, ante amenaza de desabastecimiento por déficit
En la baraja está la propuesta de TGI, del GEB, que entraría rápido y con pocos requerimientos, usando la plataforma Ballenas, en La Guajira. Ricardo Roa dijo que dicha opción tendría problemas técnicos.
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Una vez el Grupo Energía Bogotá destapó una propuesta rápida y expedita para solucionar el problema del gas en Colombia a través de TGI, filial de la empresa distrital, Ecopetrol se pellizcó.
Ricardo Roa salió a anunciar que habían tomado una decisión en relación con las alternativas posibles para la regasificación costa afuera, ante la necesidad de importar gas para comercializar y abastecer la demanda en medio de un inminente déficit que ya le está pisando los talones al país.

Roa habló de una opción que sería “un hub energético estratégico para garantizar la seguridad energética en el país”.
Se trataría de utilizar la infraestructura de Coveñas, lo que implicaría una conversión de poliducto a gasoducto, camino que habrían tomado tras establecer que ese punto del departamento de Sucre tendría “ventajas competitivas en tiempos de entrada y viabilidad técnica, frente a otras alternativas de importación en infraestructura del mismo Grupo Empresarial”.
Además, mencionó que la alternativa anunciada tiene un cronograma muy próximo, el cual, implica que el 14 de octubre se estaría abriendo el proceso para ofertas vinculantes para contratar servicios de regasificación, con lo cual, en el primer trimestre de 2027 como máximo, se estaría haciendo realidad la alternativa.
Hay que mencionar que lo que falta por contratar es la unidad flotante, que ya la tenía el GEB y es uno de los temas más difíciles de lograr.

¿Están preparados?
Según explicó Roa, Cenit, filial del Grupo que controla la empresa petrolera estatal, obtuvo autorización de la ANLA, autoridad que expide las licencias, con la cual ya sería posible desarrollar actividades de recibo e internación de Gas Natural Licuado.
Esto se lograría desde la infraestructura offshore existente en el Terminal Marítimo de Coveñas (Sucre).
Otro de los puntos que ya tendría listo Ecopetrol sería el respaldo técnico, tras la culminación y aprobación de los estudios que venían adelantando de tiempo atrás, de la mano con expertos internacionales y que ya habrían evaluado “la profundidad, condiciones metaoceánicas, configuración de los cuerpos de agua, la topografía del área, las condiciones de operación, entre otras variables de alta importancia para un proyecto de esta envergadura”.
Con ello, según afirmó Roa, estrían listos para ofrecer una solución que pondría el faltante de gas previsto para 2027, que serían 110 millones de pies cúbicos- día, los cuales se sumarían a los 60 millones de pies cúbicos-día que entran por la actividad de la regasificadora del Pacífico.
Además, de cara al futuro, Roa dice que, con la alternativa de Coveñas, se podrían ajustar los temas necesarios (la adecuación de poliducto a gasoducto) para que se pase de una disponibilidad de 110, a una de 400 millones de pies cúbicos-día desde 2028 y 2029.
En su intervención, Roa mencionó la alternativa de TGI, pero dijo que tendría algunos problemas técnicos, por ejemplo, del de necesitar una licencia ambiental específica que ellos ya tienen con Cenit. Hay que recordar que la filial del Grupo Energía Bogotá hablaba de hacer uso de la licencia que tiene Hocol, que, en todo caso, es de Ecopetrol, y cuya propuesta fue hecha en el entendido en que la regasificación se haría desde la plataforma de Ballenas, en la Guajira.

Igualmente, habría otra dificultad que Roa llamó “metaoceánica”, para hacer el empalme de las dos infraestructuras.
“Se ha demostrado la ventaja que tendría la alternativa de Coveñas, pues se trata de aprovechar la infraestructura existente; la existencia de la concesión portuaria por más de 30 años a Cenit en ese puerto de Sucre”.
Lo cierto es que, desde la perspectiva de Ecopetrol, “el proyecto permitirá equilibrar la oferta y la demanda a nivel nacional y, al mismo tiempo, garantizar el suministro confiable de gas natural para hogares, industrias y el transporte público, lo que contribuye a consolidar la seguridad energética de Colombia”.