“A un sector no lo acaba un gobierno, sino un mercado”: Carlos Cante, presidente de Fenalcarbón

Aunque todos los energéticos tienen retos, de cara a una transición energética, los del carbón son mayúsculos. Este producto es uno de los que han sido ‘tachados’ por ser considerado contaminante en medio de la lucha contra el cambio climático, a la que le apuesta el Gobierno de Gustavo Petro.

De hecho, en medio de la declaratoria de estado de conmoción interior, con la cual se han anunciado impuestos para apalancar las necesidades de financiación en la región del Catatumbo, este sector sería uno de los llamados a aportar. Esto hizo parte del pronunciamiento de Carlos Cante, presidente de Fenalcarbón, gremio que asocia a las empresas que se dedican a la explotación de ese mineral.

“Las exportaciones de petróleo y carbón también serán gravadas con impuestos temporales”, se anunció desde la cartera de Hacienda.

Al respecto, Cante dice que, en el próximo gobierno, lo que hay que hacer es acabar con tantas sobretasas que le restan competitividad al carbón.

Y no se trata de un producto menor para la economía colombiana. De hecho, según las cuentas presentadas por el economista que lidera Fenalcarbón, “en un periodo medio de diez años, del 2012 al 2022, el sector carbón le ha aportado al país más de 40 billones entre regalías e impuestos. 53 % a regalías, 47 % al impuesto de renta”. Es decir, no es un aporte a la bolsa pública de la que se pueda prescindir tan prontamente, como la transición que en corto tiempo busca hacer el gobierno.

“Nos han dicho que somos peor que la cocaína”

Los recursos mencionados por el presidente de Fenalcarbón equivalen a cuatro reformas tributarias, según calculó, al tiempo que afirmó que, “lastimosamente, hay poco conocimiento de lo que significa nuestra industria: que el carbón es cemento, que el carbón es ladrillo, que el carbón es acero, que el carbón es aluminio, que el carbón es generación de energía; confiables. Pero pasamos, de un momento, a otro del anonimato al desprestigio. Ahora somos los responsables de que el mundo se vaya a acabar, somos peor que la cocaína, y eso no solo es injusto al desconocer más de 650.000 empleos que se generan en este sector”.

Por esa razón, Cante puso las estadísticas que evidencian que este sector es determinante, al menos por ahora, para el movimiento de la economía. No en vano, “fueron 8.700 millones de toneladas en tres décadas. Hemos crecido más del doble en el consumo global de carbón y, si Colombia piensa renunciar a eso, pues sería definitivamente salirnos del debate lógico”, advirtió.

En todo caso, el directivo manifestó que el próximo gobierno tendría que tener en cuenta todos esos elementos, pues, a su juicio, “a un sector no lo acaba un gobierno, sino un mercado”, y por el momento, el del carbón sigue dinámico.