Presidente de Davivienda explica movida con Scotiabank: “Esto no tiene ningún sentido si no somos capaces de entregar mejores cosas para los clientes”

SEMANA: ¿Cuál fue la oportunidad que vio Davivienda para hacer esta movida?

Javier Suárez (J. S.): La verdad es que ni siquiera habíamos pensado en una operación en Colombia. Habíamos pensado en Costa Rica, porque en ese país tenemos una operación que es relativamente pequeña. Y veíamos una oportunidad con la eventual salida de Scotia, que eso lo teníamos como alguna posibilidad futura hace varios años, que podíamos consolidar una operación que nos permitiera prestar un mejor servicio para nuestros clientes. Y efectivamente, hacia finales del año antepasado, en el año 2023, Scotia anunció públicamente su deseo de salir de esas dos operaciones de Panamá y de Costa Rica. Empezamos a tener participación en el proceso y comenzamos también a tener conversaciones sobre lo que podía ser una eventual movida con Colombia. Empezamos a construir un sueño conjunto en el que nosotros vimos una oportunidad muy grande en que Scotia se quedara, porque le aportaba también a Davivienda. Y no fuera simplemente una venta en firme en que ellos salieran, sino que, por el contrario, nuestra intención, era la posibilidad de entregar una mejor oferta a los clientes y para eso creíamos que para Davivienda, contar con un socio como Scotia, tenía un valor importante. Entonces, en ese sentido, empezamos a construir ese escenario conjunto y efectivamente así se dio.

Con el anuncio lo que estamos es materializando esa idea que vimos de robustecer las operaciones en Panamá y Costa Rica, que eran relativamente pequeñas frente al mercado. Y en el caso del mercado colombiano, creemos que donde está el valor más importante es que a Davivienda se le aporta toda esa capacidad que tiene un banco como Scotia de carácter global para atender clientes con productos en los mercados internacionales que Davivienda no tiene. Davivienda es muy fuerte en las operaciones de los mercados, en cada uno de los mercados donde estamos, como es el caso de Colombia, pero aquí creo que al unir esas dos capacidades quedamos mucho mejor posicionados. Vimos la oportunidad. Más que un tema de consolidación de tamaño y demás, lo que vimos fue la oportunidad de generar una mejor institución de cara a los clientes.

SEMANA: ¿Contra quiénes estaban compitiendo? ¿Quiénes eran los rivales?

J. S.: Bueno, esa está difícil. Toca preguntarles a ellos. Nosotros, contra los fantasmas que se le presentan a uno en estas transacciones, que uno se imagina quién más tendrá interés.

Pero la verdad es que yo creo que con el pasar de los meses, en las conversaciones que tuvimos con ellos, creo que estábamos compitiendo contra nosotros mismos, en el sentido de decir, miremos cómo le encontramos a esto la mejor salida posible y la mejor transacción posible. Si esto no se hubiera dado, y se hubiera dado con otro, pues también lo hubiéramos aceptado. Pero creo que la tarea nuestra era construir la mejor alternativa, por supuesto para nosotros, pero también para ellos. Y eso salió bien. Porque lo que es más interesante de todo esto es que la mejor alternativa para Scotia y para Davivienda termina siendo la que sea la mejor para los clientes, que es el caso como lo vemos en la transacción.

SEMANA: ¿Cómo es esa operación?

J. S.: Empiezo por decir lo que no es. No es una transacción en la que nosotros les entreguemos un cheque, un dinero a los canadienses para comprar las operaciones y ellos salgan. Precisamente eso es lo que no es. Porque aquí donde hay valor es en unir esas capacidades. Entonces, ¿qué sí es? Una vez se surta el proceso de aprobaciones de los reguladores en los países en los que se da la operación, lo que viene es un ejercicio en el que Davivienda emite unas acciones nuevas y se las entrega al banco canadiense, a cambio de que ese banco entregue la propiedad que tiene en los bancos en estos tres países. En últimas, Davivienda se queda con esas operaciones para integrarlas y eventualmente habrá que hacer las fusiones respectivas en cada país, y a cambio de eso, los accionistas de Davivienda permiten la entrada de Scotiabank, que se queda con un porcentaje un poco superior al 20 % de participación del banco. Más que entregar un dinero, los accionistas de Davivienda lo que hacen es que invitan a Scotiabank a que sea socio de Davivienda. Es un nuevo socio que fortalece Davivienda, y a cambio de esa participación, los canadienses entregan las operaciones en los tres países.

SEMANA: ¿Qué le aporta ahora Scotiabank a la nueva Davivienda en la operación, al quedarse con un poco más del 20 % de participación y representación en la junta?

J. S.: Además del aporte de los negocios mismos, de las operaciones que se integran, que tienen per se un valor enorme, le aporta un conocimiento y una capacidad global que hoy en día Davivienda no la tiene. Entonces eso nos permite, tanto en Colombia como en Panamá, Costa Rica y en los otros países que no son objeto de esta operación, como Honduras y El Salvador, tener la capacidad de entregarles soluciones globales. No solamente las soluciones en cada uno de los países, sino soluciones de mercados globales, que creo que ese es un valor muy importante. Pero nos entrega también, en el caso de Colombia, en el mundo pyme, clientes que son atendidos por Scotiabank con unos productos que tiene. Nos permite llegar a esos clientes con una mucho mejor oferta.

SEMANA: Por ejemplo…

J. S.: Por ejemplo, en los comercios. Hay clientes que hoy en día tiene Scotiabank a los que vamos a poder llegar con la oferta que tiene Davivienda, que entre otras cosas se fortaleció con una adquisición que hicimos hace un par de meses de ePay, que es una pasarela de pagos. Entonces, a los clientes, a nosotros, Scotiabank nos aporta conocimiento global, capacidades globales, nos aportan una base de clientes a la que podemos llevar la oferta de clientes de Davivienda, y también un talento. Un equipo humano que hemos podido conocer a través de diferentes espacios durante el análisis de la transacción. Su equipo directivo es un equipo que conocemos y que nos genera el entusiasmo de saber que vamos a robustecer el conocimiento y las capacidades del equipo de Davivienda. Entonces, al final del día, hay una afinidad cultural. El respeto por el ser humano es un tema afín en las dos entidades. Culturalmente vamos a poder hacer una integración en la que saquemos lo mejor para los clientes, pero también para nuestra gente.

SEMANA: Con la movida, ¿cómo queda Davivienda y el Grupo Bolívar como conglomerado económico en el país y en la región?

J. S.: Quedamos con operaciones que en el consolidado suman en activos alrededor de 60.000 millones de dólares. Si uno mira los bancos en América Latina, excluyendo los brasileros, pues Brasil es una dimensión distinta por el tamaño mismo del país, Davivienda queda entre los diez bancos más grandes de la región. Eso creo que es muy importante, no solo para Davivienda, sino para el país.

SEMANA: ¿Por qué?

J. S.: Porque contar con una banca fuerte, con presencia local, origen local, pero también con capacidades regionales, es un activo no solamente de los clientes y los accionistas, sino del país mismo. Porque al tener un banco más grande, con un patrimonio más grande, pues es una entidad que puede dar crédito a proyectos de mayor envergadura, a proyectos de infraestructura, a los grandes corporativos colombianos o regionales, porque tenemos una mayor capacidad. Entonces es un banco que, en términos de tamaño en un mercado como el colombiano, en el ranking no cambia, sigue siendo el banco número dos, pero se consolida en términos patrimoniales, que nos permite atender clientes de mejor manera.

SEMANA: ¿Y en los otros países?

J. S.: Es un poco distinto en Panamá y en Costa Rica. En el caso de Panamá, nosotros tenemos una operación que es muy pequeña, la operación local. El grueso de la operación nuestra en Panamá es para atender clientes colombianos, a través de una de las licencias que tenemos allá. Pero Scotia sí tenía una presencia más relevante en lo local. Entonces al sumar los dos, la pequeña que teníamos nosotros con la de ellos, quedamos con una mejor posición en la banca panameña. Y en el caso de Costa Rica, ambos teníamos operaciones de tamaños parecidos, alrededor de un poco más del 5 % de participación del mercado, que sumadas nos acercan al 11 % de participación del mercado y eso nos permite ser un banco más competitivo en Costa Rica.

SEMANA: En términos de tamaño, ¿qué efecto tiene?

J. S.: Tiene unos efectos relevantes. El banco crece en un 40 %, en términos generales, en activos, en cartera, en los diferentes indicadores, en depósitos. Creo que también es una buena noticia para los clientes por las ofertas con las que podemos llegar, pero también para el país y para el mismo sistema financiero, para la robustez del sistema financiero. Y que ese 40 % además venga de la mano de la participación de un jugador de clase mundial como es el Banco Nueva Scotia de Canadá, pues creo que también es una parada de bien.

SEMANA: ¿Qué significa convertirse en una multilatina global?

J. S.: La respuesta proviene de la evolución de Davivienda. Davivienda arranca siendo una corporación de ahorro de vivienda por allá en los años setenta. Finales de los noventa se convierte en un banco hipotecario, pero todavía muy en el mundo de vivienda. Por allá en el 2005, 2006, entra de lleno el mundo de consumo con la adquisición del Banco Superior, y ahí se convierte en un banco de personas. En el 2007, cuando llega la adquisición de Bancafé, entra al mundo pyme, al mundo empresarial, corporativo, de comercio exterior, y se convierte en lo que llamaríamos una banca universal, una banca que tiene los servicios transversales para todos los segmentos.

Por allá en 2012, cuando llega HSBC, se convierte en una banca multilatina, donde ya no solamente tenemos esa oferta de valor en Colombia, sino que la tenemos en varios países de la región. Y con este otro paso, es esa banca multilatina, pero ahora con alcance global, porque podemos llegar a mercados internacionales a través de la presencia que para nosotros va a tener Scotiabank dentro de Davivienda.

SEMANA: ¿Esto qué significa de cara a ser una multilatina global?

J. S.: Es continuar la historia que hemos venido construyendo desde hace 50 años, en que cada cierto tiempo tenemos un hito que nos mejora las capacidades del banco a través de lo que traemos, que es tecnología, conocimiento, pero también nuestra gente.

Una banca multilatina con alcance global es una banca que tiene presencia en múltiples países de la región, pero que no solamente ofrece los servicios financieros que se prestan en cada uno de los países, sino que tiene acceso a capacidades internacionales, de mercados internacionales, para ser ofrecidas también a los clientes en cada uno de los países donde operamos.

SEMANA: Davivienda es la joya de la corona del Grupo Bolívar. ¿Cómo queda el Grupo en ese contexto como conglomerado frente al mercado colombiano e internacional?

J. S.: Es más una pregunta para el Grupo Bolívar, pero lo que termina ocurriendo aquí es que esa presencia que tiene el Grupo Bolívar en el sector financiero la tiene a través de Davivienda. El Grupo también tiene presencia a través de seguros, y cuando uno mira parado ya en la consolidación del Grupo, pues tiene una participación en el negocio financiero en la región, pero también de seguros. Porque aquí parte de lo que llega también con la operación son unas operaciones de seguros en Panamá y en Costa Rica que vienen a fortalecer las que ya tenía Davivienda y que también tiene Seguros Bolívar con algunas participaciones. Entonces, no solamente hay que mirar esto como una opción de consolidación en el negocio puramente financiero, sino también el efecto que tiene para el Grupo Bolívar es la consolidación de algunas operaciones de seguros.

SEMANA: En ese sentido, ¿cómo se van a mover los indicadores de Davivienda con esta operación?

J. S.: Por ejemplo, la solvencia se mantiene, incluso sube un poco, y la razón por la cual se mantiene, a pesar de que incorporamos una gran cantidad de activos, es porque esos activos vienen con el patrimonio que tiene el Banco de Nueva Scotia en estas operaciones. Entonces, al final del día, la solvencia, que es un elemento fundamental en esto, se mantiene, incluso la expectativa es que mejore. En términos de rentabilidad, seguramente en el corto plazo las utilidades que vamos a generar van a ser parecidas a las que Davivienda generaría si no hiciéramos la transacción, porque las utilidades que generan estas nuevas operaciones se van a compensar seguramente con gastos de integración. Pero a la vuelta de un par de años vamos a empezar por una senda en la que deberíamos tener los beneficios de contar con las operaciones integradas y mejores ofertas a los clientes que nos deberían traer los mejores resultados.

SEMANA: En esa línea, ¿cuál es la proyección de crecimiento que tiene?

J. S.: Si no hiciéramos la integración, estaríamos hablando del año entrante, o este año, el año 2025, de expectativas de crecimiento de alrededor de entre un 7 y un 10 %, que es consistente con los crecimientos de las economías de los países en donde estamos. Con la integración, pues esto tiene un crecimiento de alrededor del 40 %, entonces lo que debería pasar es que esos crecimientos de 7 u 8 % y lo que sigamos haciendo hacia adelante se deberían dar sobre la base ampliada. Entonces al final del día vamos a terminar creciendo. Año tras año serán crecimientos parecidos y seguramente habrá un par de años en los que tengamos crecimientos un poco más altos porque deberíamos estar en capacidad de aprovechar la oportunidad de hacer la venta cruzada a los clientes nuevos que llegan a la operación.

Entonces en principio vamos a crecer un poco más, un crecimiento inicial por la integración y hacia adelante unos puntos porcentuales más por encima de lo que crecimos actualmente porque vamos a tener oportunidades de aprovechar la base de clientes conjuntos.

SEMANA: Uno de los temas puntuales es el de las tarjetas de crédito. ¿Qué va a pasar con ese mercado, con esta integración?

J. S.: En ese mercado aumentamos el volumen de tarjetas de manera importante porque ambos somos jugadores en ese mercado, pero es un mercado que se ha vuelto tremendamente dinámico. Creo que si algo ha pasado en el mundo de medios de pago es que la competencia se ha intensificado y afortunadamente el consumidor va a tener, más allá de las ofertas que tiene como Scotia o Davivienda o algunos otros bancos tradicionales, la llegada de nuevos jugadores que están haciendo que los clientes tengan múltiples ofertas. Vamos a tener un volumen de tarjetas importante, pero creo que jugaremos en un entorno en el que la misma regulación y las mismas dinámicas han llevado a que el cliente tenga múltiples ofertas que creemos que es lo importante en este negocio.

SEMANA: Una operación como esta no es ajena a Davivienda. ¿Qué similitudes y diferencias tiene esta movida con anteriores, como HSBC o Bancafé?

J. S.: Tiene algunas diferencias en el sentido que en otras estábamos entrando en terrenos absolutamente inexplorados para nosotros, como cuando hicimos la integración con HSBC, pues estábamos llegando a países donde nosotros no teníamos ninguna presencia. En este caso ya tenemos presencia en los tres países.

Pero creo que son más relevantes las similitudes. Siempre que hemos buscado integrar nuevas operaciones, buscamos también integrar talento y conocimiento, y este caso no es la excepción. Lo que más nos motiva no es el tamaño, no es el volumen de negocios. Lo que más nos motiva es el potencial que representa para nosotros aprender e incorporar prácticas de un banco como Scotiabank Canadá.

El talento humano que hemos visto en las operaciones, con quienes hemos tenido la oportunidad de tener algunas reuniones, nos hace pensar que es afín al talento humano de Davivienda que para nosotros es un motivo de orgullo. Entonces al final del día la suma de esos talentos humanos creo que nos hacen una mejor organización y ahí es donde hay una similitud con las anteriores. Y la otra similitud que es esencial aquí es nuestra vocación para hacer esto mejor para los clientes.

Esto no tiene ningún sentido si no somos capaces de entregar mejores cosas para los clientes. Por eso, al igual que hemos hecho en ocasiones anteriores, ese va a ser nuestro foco. Nuestro foco va a estar en ver cómo los clientes no tienen fricciones con esto.

Ningún cliente va a tener que ir a un banco a cambiar su tarjeta de crédito o cosas de esa naturaleza. A los clientes las cosas les siguen funcionando como están y oportunamente, una vez tengamos las aprobaciones, les llevaremos buenas noticias que no impliquen un esfuerzo de parte de ellos, sino por el contrario la llegada de nuevos servicios o nuevas funcionalidades para beneficio de ellos.

SEMANA: ¿Queda espacio para consolidar aún más el sector financiero en el país y en la región? ¿Qué harán ustedes?

J. S.: Puede que lo haya. Seguramente habrá algunos otros movimientos. De parte nuestra, nosotros cuando hacemos estas operaciones nos dedicamos los años siguientes a llevar lo mejor de esto para los clientes y a sacar el mejor beneficio de estas operaciones. Entonces, muy seguramente por unos tres o cuatro años, por lo menos, nosotros estaremos concentrados en hacer de esto la mejor opción.

Creo que el mercado colombiano es un mercado que ha mostrado un dinamismo importante. Lo ha mencionado el superintendente en otras ocasiones: ha habido un gran interés por nuevas licencias en la banca en Colombia. Así como se dan operaciones como esta en donde Scotiabank permanece en el país, que creo que es una buena noticia, hay también noticias de nuevos mercados. Entonces ese dinamismo, creemos que es muy positivo.

SEMANA: Habrá cambios en el sistema pensional y los trabajadores que ganen más de 2,3 salarios tendrán que escoger la Administradora del Componente Complementario de Ahorro Individual (ACCAI). ¿Tienen interés de entrar a este negocio?

J. S.: Lo estamos explorando, para hacer algún tipo de oferta a estos clientes. Es un ejercicio que tenemos en exploración.

SEMANA: El mercado ha estado pendiente de otro gran anuncio de Davivienda: la llegada a la Bolsa de Nueva York. ¿La operación con Scotiabank es la cuota inicial de esa otra movida?

J. S.: Ya tendremos que ir mirando. Por ahora, estamos concentrados en esta operación, pero creo que esa multilatina con alcance global abre también sus ojos hacia nuevas posibilidades. No tenemos ninguna decisión ni nada que anunciar en este momento, pero ya que lo está planteando, lo vamos a pensar.

SEMANA: ¿Por qué hacer una operación de esta dimensión y alcance, en un momento tan complejo para el sector financiero y tan retador para la economía colombiana?

J. S.: Primero, porque nosotros creemos en el país. Creemos en el país, independiente de que haya momentos de coyuntura difíciles. No aparecimos ayer en este mercado. Como grupo, Bolívar lleva más de 80 años, y como Davivienda llevamos más de 50 años y en todas esas décadas hemos tenido momentos muy difíciles y siempre hemos levantado la mirada para entender que este país tiene oportunidades y que nosotros estamos comprometidos con él en el largo plazo.

Por otro lado, hay una realidad: cuando las cosas se ponen difíciles, lo hemos aprendido en el pasado, es cuando se dan oportunidades. Entonces, le doy un par de ejemplos. El sistema financiero colombiano a finales de los noventa pasó por una crisis muy difícil. Y como consecuencia, después nosotros tuvimos la oportunidad de consolidar las operaciones del Banco Superior y el Bancafé. Esto nos transformó en una entidad mucho mejor que le prestó mucho mejor servicio al país. Después, las operaciones de HCBC en 2011 y 2012 son consecuencia de la crisis del 2009. Entonces, ahí también se da otra oportunidad.

Nosotros vemos que los momentos de crisis también son momentos de oportunidad siempre y cuando uno tenga convicción y una mirada de futuro y compromiso. Y eso a nosotros nos sobra. Aquí se está repitiendo esa historia. A comienzos del año pasado cuando Davivienda emitió acciones para mejorar su capital, dijimos que el banco no lo necesita para operar en este momento, pero nosotros creemos que hay que tener la capacidad para aprovechar las oportunidades que no sabemos cuáles son, pero puede que se presenten. Un año después, felizmente, encontramos que había esa oportunidad y creemos que esto va a hacer a Davivienda una mejor entidad porque nosotros no estamos pensando en 2025, estamos pensando en el futuro, en el mediano y en el largo plazo del país en donde seguimos apostando y comprometidos.

SEMANA: Este año se espera la entrada de Bre-B con el Banco de la República, la Superintendencia Financiera ha anunciado decisiones alrededor del open finance y el Open Data y hay una gran fuerza alrededor de las fintech y de las ofertas en el sector financiero. Un jugador de este tamaño, ¿cómo entra a competir en este nuevo escenario del sector financiero?

J. S.: Para el sector, es un momento muy interesante porque esas tendencias como la de open finance, como la llegada de jugadores como las fintech son muy positivas. Generan un espacio de competencia mucho mayor y es interesante porque no necesariamente es por tamaño que se define el resultado, sino por el que haga las cosas de mejor manera.

El hecho que haya fintech que vienen haciendo una buena tarea y que vienen desarrollando sus modelos de negocio bajo estos modelos y estos cambios regulatorios que son más abiertos, creo que es muy positivo. Y, parado en una entidad como Davivienda, nosotros no basamos nuestra capacidad para competir en tamaño. Nosotros basamos nuestra capacidad para competir en innovación, en una cultura de servicio.

Lo que determina para nosotros el éxito no es el tamaño. Lo que determina para nosotros el éxito es ser el banco preferido por los colombianos, con el mejor servicio y las mejores ofertas, pero al mismo tiempo el banco más querido por los colombianos.

Y eso lo tenemos que hacer, independiente del tamaño. Y nuestro compromiso es competir en un mercado que es mucho más dinámico, es mucho más abierto a la competencia y a eso le damos la bienvenida y siempre lo hemos hecho.

SEMANA: La familia Cortés ha liderado el Grupo Bolívar en su crecimiento y consolidación y por supuesto las decisiones que se han tomado alrededor de Davivienda. ¿Qué representa esta operación en el legado de la familia Cortés, en especial del doctor José Alejandro y de su hijo Miguel?

J. S.: A José Alejandro y a Miguel, siempre los he visto como un referente, no en busca de los mejores resultados financieros de sus empresas y las grandes utilidades, sino en buscar entregarle valor a la sociedad. Para ellos una operación como esta lo que tiene por medio es el que podamos seguir avanzando y construir un mejor país. Desde el punto de vista del legado creo que nuestra tarea en la administración de Davivienda es justamente eso, es ver cómo esta operación tiene como foco fundamental entregarles mejores servicios y mejores capacidades para los colombianos, esa es la forma en la que nosotros honramos ese legado en que seguimos construyendo capacidades para los colombianos y también para las personas en los otros países en donde estamos, pero entendiendo muy especialmente que las entidades financieras estamos para habilitar a las empresas grandes, pequeñas, medianas y también a las personas para que puedan sacar adelante sus proyectos y sus sueños. Eso es lo que nos mueve todo el día. No es tanto las utilidades y el tamaño. Ese legado lo honramos y creemos que una transacción como esta nos da la oportunidad de seguirlo robusteciendo.

SEMANA: Esta movida qué retos y desafíos va a traer en tres aspectos clave hacia el futuro para Davivienda: innovación, servicio y cultura.

J. S.: Esos son pilares fundamentales de nuestra organización, son no negociables. En nuestra organización no acometemos ningún proyecto que en algún momento pueda poner en peligro esos tres pilares: la innovación, el servicio y la cultura. Y todo nace desde la cultura, la cultura de nuestra organización es la base sobre la cual descansa el ser una organización innovadora, enfocada al servicio y eso porque la cultura nuestra se basa en las personas. En el caso de la interacción con Scotiabank, parte de lo que nos llama la atención es que también vemos un respeto muy evidente de Scotiabank por su gente, entonces ese es el tipo de cultura con la que nosotros nos identificamos y con la que también con los brazos abiertos recibimos a todo el equipo de Scotiabank porque eso es un elemento fundamental, esa cultura basada en las personas al interior de las entidades, es la que nos permite después transmitir un servicio cálido, un servicio amable, amigable, sencillo, confiable.

Eso lo podemos hacer fundamentalmente por la cultura. Eso es absolutamente fundamental y por el lado de la innovación, pues está en nuestro ADN. Davivienda está donde está porque ese ADN innovador le ha permitido ir evolucionando y construyendo nuevas cosas. Entonces esos elementos son absolutamente esenciales.

SEMANA: ¿Cuál es el cronograma que sigue?

J. S.: Lo que sigue precisamente es ese proceso de autorizaciones en los diferentes países, en Colombia, Panamá y Costa Rica. Nuestra expectativa es que las aprobaciones se deben dar en algún momento del segundo semestre y en ese instante consolidar las operaciones formalmente. Mientras eso no ocurra, los clientes de cada uno siguen recibiendo los servicios de la misma forma de la que los han ido recibiendo hasta ahora. No hay ningún cambio. Una vez se dé, seguramente, tendremos más detalles para anunciar, que hoy en día no se han definido porque están pendientes de las autorizaciones. Temas como los montos, número de acciones, cosas más en detalle, seguramente las diremos en ese momento.