Vida Moderna
Esta es la forma correcta de limpiar los oídos para prevenir infecciones
La salud auditiva es fundamental para el bienestar del cuerpo.
Uno de los sentidos más importantes que componen el organismo es el oído, un órgano que ayuda a percibir los sonidos, el volumen, el tono, el timbre y la dirección del cual provienen. También ayuda a escuchar la voz, la música y, lo más relevante, a interactuar con diferentes personas por medio del habla.
Así las cosas, la audición es la que permite comprender una gran parte del universo físico, biológico y social de las personas, puesto que son los sonidos los que mantienen el cuerpo en estado de alerta.
De acuerdo con Comaudi, el oído lo componen tres partes: el oído externo, que está conformado por el pabellón auricular (oreja) y el canal auditivo externo; el oído medio, el cual está constituido por membrana timpánica, cadena de huesecillos (martillo, yunque y estribo) y trompa de Eustaquio; y el oído interno, principalmente compuesto en su porción auditiva por la cóclea o caracol.
Cabe recordar que el oído acumula cera o cerumen para proteger el canal auditivo, así como también para humectar la zona. Esta secreción producida naturalmente contiene sustancias antibacterianas y antimicóticas para cumplir con su objetivo, el cual es no permitir el ingreso de microorganismos dañinos para la salud.
Tendencias
Sin embargo, en ocasiones la fabrica en cantidades abundantes, por lo que se experimentan algunas molestias por oclusión.
Estos son algunos problemas comunes que se pueden presentar:
- Pérdida de audición parcial y progresiva de uno o ambos oídos al mismo tiempo.
- Ruidos o zumbidos en el oído.
- Dolor, sensación de bloqueo o de taponamiento.
- Molestias, secreción y mal olor.
De esta manera, es importante saber limpiar los oídos para evitar este tipo de problemas. De hecho, la revista Mejor con Salud aconseja el uso de ingredientes naturales como el aceite de parafina o de oliva, el cual favorece no solo la salud auditiva sino también otras partes del cuerpo. Así se puede utilizar:
Ingredientes:
- 3 cucharadas de aceite de parafina o de oliva (48 g).
- 1 vela.
- 1 gotero.
Aplicación:
- En primer lugar, se debe colocar el aceite en un recipiente pequeño y calentar sobre la vela, para que llegue a la temperatura corporal.
- Echar en el gotero y enseguida, acostarse de lado en la cama o sofá.
- Dejar caer algunas gotas (no más de 4 o 5) en el oído.
- Permanecer quieto durante 15 minutos.
- Levantarse con cuidado e inclinar la cabeza sobre el lavabo del baño, colocando un paño o toalla para evitar mancharse.
Los expertos de Mayo Clinic detallan que hay que tener mucho cuidado con estos procedimientos, ya que “pueden ocasionar lesiones, como quemaduras, obstrucciones del conducto auditivo e, incluso, perforaciones”. Del mismo modo, los remedios caseros solo deben utilizarse si el profesional de la salud así lo autoriza y si no existe ningún tipo de lesión en los tímpanos.
También es fundamental ser muy cuidadosos con la periodicidad de la limpieza y con la suavidad con que se introducen elementos en los oídos, puesto que son muy sensibles y un movimiento brusco o una herramienta inadecuada pueden perforar el canal auditivo.
Los expertos de Mejor con Salud también aconsejan que, día a día, no se debe retirar el exceso de cerumen con bastoncillos de algodón, horquillas y mucho menos con los dedos o uñas. “Estos reúnen la cera, la solidifican y la empujan hacia el interior del oído. Esto puede causar tapones que solo se pueden quitar a través de lavados intensivos realizados por un médico”, indican.
Cuidados de la salud auditiva
- Eliminar o reducir el ruido en tu ambiente. No ponga varios aparatos en funcionamiento a la vez.
- No a los reproductores de música con auriculares, es importante usarlos tan solo una hora al día como máximo.
- Cuando vaya a comprar un aparato, siempre pregunte por su nivel de ruido. Lo ideal es comprar aquellos más silenciosos.
- Deje fuera los ruidos fuertes. Se deben evitar al máximo, pues son peligrosos y pueden dañar los oídos de manera repentina.