VIDA MODERNA

"Margarita Rosa mostró lo buena que era, pero llegó mi momento"

Después de 14 años, Catalina Aristizábal tomó la conducción del programa 'El Desafío' del canal Caracol. Habla de cómo tener una vida saludable y de su nuevo trabajo, que la lleva de la risa al llanto.

20 de mayo de 2017
| Foto: Caracol Televisión

Semana.com: ¿Cómo fue ese paso de presentar informativos al mundo del entretenimiento?

Catalina Aristizábal: Es un reto profesional nuevo para mí. Venía de un formato mucho más serio. Siete años presentando noticias casi que políticas y llegar acá a destapar fibras, meterme en el sentimiento de las personas, abrir ese espacio de emociones es lindo. Exploto un montón de cosas desde adentro, pregunto, me involucro, me dejo contagiar de alegría.

Semana.com: Margarita Rosa dejó una vara muy alta…

C.A.: Y voy a mantenerla, me parece espectacular, la he admirado toda mi vida, me ha inspirado a mí también. Saber que la vara la dejó así de alta, que dejó todo un legado, hace que sea todo un desafío que asumiré con mi estilo y con mi personalidad. Margarita mostró lo buena que era, pero llegó el momento de mostrar que yo también soy buena; esta ha sido mi profesión durante muchos años. 

Semana.com: ¿En qué cambia el programa, además de la nueva presentadora?

C.A.: Es un programa que le va a exigir a la gente a dar cada vez más. Se van a dar cuenta que las pruebas son difíciles. Que los que estamos en el cuento fitness nos damos cuenta que nos falta cancha y recorrido. A veces pienso que esto es para deportistas de alto rendimiento que han tenido que hacer deporte toda la vida. No es para alguien que aparece de la noche a la mañana. Entonces los que quieran llegar al Desafío se van a tener que preparar mucho porque las pruebas son cada vez más difíciles. Va a entrar un personaje fuerte que va a marcar la diferencia de lo que han sido los Desafíos de los últimos 14 años. Para mí eso va a ser un hit. Y lo van a disfrutar, estará lleno de sorpresas y cosas positivas.

Semana.com: ¿Cómo ser fit?

C.A. Yo no soy fit. Más que eso trato de motivar a la gente a que lleve un estilo de vida saludable. Soy de las que digo que hay que aprender a alimentarse de una manera inteligente, buscando el equilibrio entre una buena alimentación y una actividad física en lo que les apasione y les guste. Pero más que un cuerpo fit, que tiene un costo y un tiempo, es un cuerpo saludable. Si de verdad miras cuáles son tus hábitos alimenticios y reinventas es mucho más duradero que un cuerpo fit.

Semana.com: ¿Cuál es el primer paso para transformar ese estilo de vida?

C.A.: Primero, que abran la mente hacia los alimentos que no conocen o que no saben qué hacer con ellos. Ver cómo se van a combinar, involucrarse en la cocina te vuelve más consciente a la hora de preparar tus alimentos. Segundo, adquirir buenos hábitos, volverte activa, dejar el sedentarismo. Enamorarte, apasionarte por una actividad física, la bicicleta, trotar, hacer deporte al aire libre. Yo era la más perezosa de todos y adquirí un hábito que me costó. No era tan apasionada desde chiquita al deporte y no es tan fácil que te entre después de muchos años.

Encontré en mi estilo lo que me gusta, me da resultado y eso es lo que comparto. Entrenamientos muy caseros, con cositas muy sencillas que se pueden hacer en casa con elementos básicos como las bandas, lo que llaman un entrenamiento personal. No con tanto peso para no perder la morfología del cuerpo, eso para mí es súper importante. Respetar la forma de mi cuerpo.

Semana.com: ¿Cuántas horas y qué tipo de ejercicio?

C.A.: No es de horas. Es de hábito. Si tienes el hábito te levantas con gusto a hacer ejercicio, no tiene que ser una obligación ni un castigo. Los hábitos no son dietas, yo odio hablar de dietas. Si tienes buenos hábitos, sabes comer y aprendes a comer bien no necesitas hacer dieta. No creo que con buenos hábitos se sufra de sobre peso o delgadez extrema. El ejercicio es descubrir algo que te guste y crearlo como un hábito en tu vida, que te levantes y lo hagas porque ya no puedes vivir sin eso porque es parte de tu vida. Eso cuesta y toma tiempo, y los resultados no se ven de la noche a la mañana, entonces hay que ganarle a la pereza, hay que ganarle al ‘yo no puedo‘, al ‘no soy capaz‘. Cuando tú haces clic es automático y la vida se te transforma. Hoy me siento horrible cuando no hago ejercicio, antes eso no pasaba.



Semana.com: ¿Ahora cómo logras tener tiempo para la familia?

C.A.: Desde que decidí ser mamá es porque sabía que tenía el tiempo para serlo y para estar presente. Y las oportunidades que se me han presentado en la vida en los últimos siete años han sido trabajos que me han permitido estar mucho tiempo con mi familia. Lo que más me he alejado han sido estos dos meses, nunca me había alejado tanto, a duras penas ocho días. Esa era la decisión más difícil al aceptar venir acá, pero no son oportunidades que se presenten todos los días en la vida. Es un proyecto que llega a mi vida en el que no podía decir que no. Fue una decisión en familia y un apoyo incondicional para poder cumplir este sueño de hacer parte del proyecto que para mí fue como un regalo que llegó en el momento en que tenía que llegar y aprovechar al máximo.

Semana.com: ¿Qué dicen tus hijos ahora que estás República Dominicana?

C.A.: Ellos estuvieron acá una semana. Ellos han entendido bien y soy para ellos la heroína en este momento de la vida, les parece increíble mi trabajo. Mi hija mayor me dice: ‘pero eso no es trabajar, eso es pasar bueno, también juegas y todo‘. Le respondo: ‘es trabajar pero es trabajar en algo que me gusta, que me hace feliz, siempre me ve con una gran sonrisa‘. Llego cansada pero feliz, contenta, satisfecha.

Semana.com: ¿Qué consejos les da a las madres que quieren tener una figura tan saludable?

C.A.: Siempre les he dicho a través de mis libros y mis redes sociales que adquirir buenos hábitos no es tan difícil. Pero las mamás que podemos darles a nuestros hijos un buen ejemplo en ese sentido. Los mejores hábitos que podemos darles son los alimenticios, porque eso es salud. Los hijos siempre van a querer ser y hacer lo que ven de sus papás. Entonces una mamá que se ame y que le proyecte eso a su hija va a hacer más fácil que su hijo o hija crezca con más seguridad y no que se pare todos los días en el espejo, que se la pase en un quirófano y que esté todo el tiempo peleando con la comida. Generalmente, todos esos patrones se repiten, entonces si hay mamás sanas hay hijos sanos. También les aconsejo que todo lo que preparen lo hagan pensando en la salud y el bienestar de la familia, no en por tener un cuerpo fit ¿a qué costo y para qué?, ¿para una foto?, ¿un cuerpo piscinero de vacaciones? 

Semana.com: ¿Cómo es la relación con los participantes?

C.A.: Estoy cada vez más involucrada, es cada vez es más difícil para mí mostrarme como neutra. Cómo voy a ser neutra, me conmueven cada vez que los mandan a muerte y siguen ganando y siguen en el juego y siguen celebrando. Celebro con ellos. Me conmueven las situaciones en las que tengo que tocar esas fibras emocionales, como hablar de ellos, sus hijos, su familia, a quién le quieren dedicar el triunfo. Se van sacando cayo con el tiempo, pero emocionalmente sí me dejo afectar mucho porque estoy muy involucrada desde el comienzo. Sé el esfuerzo y lo que les ha costado llegar a donde han llegado.

Semana.com: ¿Tienes favoritos?

C.A.: No puedo decirlo, les hago fuerza no tanto a equipos sino a ciertas personas de ciertos equipos que para mí son competidores integrales. A esas personas les hago fuerza, hay otros que me parecen unos cobardes, en algún momento se las voy a cantar. Siempre mandan a uno mismo a muerte a muerte, a juicio a juicio. ¿Por qué no se mandan ellos? ¿Tan poquito confían en ellos? Lo he querido decir pero tengo que ser neutra. Todavía no es el momento. Acá hay gente que se escuda todo el tiempo en otros y cuando menos piensa, gana. Eso para mí es un jugador integral, eso sí es un súper humano.

Semana.com: ¿Quiénes son los participantes?

C.A.: Van a encontrar al campeón de artes marciales, está el triatlonista, está el boxeador, la patinadora, la que es ágil con el balón, el que es un doble, el duro de pesos pensados. Cada equipo está muy bien conformado porque el que no es fuerte es ágil, porque el que es rápido no es tan fuerte. Entonces todos los equipos se complementan muy bien porque tienen de todo un poco.