Un Tesoro Escondido: el encantador pueblito colombiano a 90 minutos de Bucaramanga

El departamento de Santander cuenta con una gran cantidad de pueblos que gozan de unos paisajes impresionantes, pero hay uno en especial que se caracteriza no solo por ese verdor de su paisaje, sino por sus impresionantes cascadas que le dan un toque refrescante al ambiente, y porque desde allí se puede apreciar en todo su esplendor la grandeza del Cañón del Chicamocha.

Si usted es un amante de la naturaleza y le gusta pasar sus vacaciones rodeado de ella, no se pierda la oportunidad de conocer uno de los sitios más encantadores de Santander.

Un lugar para apreciar la majestuosidad de Santander

La Mesa de los Santos es un destino ideal para los amantes de la naturaleza. Además, entre todos sus atractivos, esta población le ofrece la oportunidad de disfrutar de un exquisito café, característico de la región.

Es un lugar en donde se combinan los paisajes naturales espectaculares con la tradición cafetera, lo que lo hace muy atractivo para quienes vienen a visitarlo y a admirar la belleza natural del departamento.

Este pequeño pueblito limita con Zapatoca, San Juan de Girón y Piedecuesta, y forma parte de la provincia Metropolitana. Bajo su jurisdicción se encuentra el centro poblado de Majadal Alto, que contribuye a la diversidad y riqueza cultural de la zona.

A pesar de su tranquilidad, es un destino ideal para quienes buscan aventura. Su meseta alberga impresionantes miradores que revelan la majestuosidad de las montañas, cascadas imponentes, fincas de café reconocidas internacionalmente, un pintoresco mercado de agricultores, emocionantes rutas de escalada en roca y el teleférico más impresionante de Colombia.

Este lugar mágico combina armoniosamente la serenidad con emocionantes experiencias en un entorno natural incomparable.

Las cascadas de este territorio, son uno de los grandes encantos de su paisaje. Los escarpados acantilados que se precipitan hacia profundos valles crean un escenario ideal para estas majestuosas caídas de agua, muchas de las cuales adornan esta meseta, de acuerdo a lo que se relaciona en el portal Traveland Leisure.

Aunque es un verdadero espectáculo admirarlas todas, el Salto del Duende es una de las más reconocidas, ya que se desploma desde una altura de 280 metros por un acantilado de piedra caliza, terminando su recorrido en un frondoso bosque que se extiende a sus pies.

Otra cascada notable es Santa Rita, la cual pese a no ser tan alta como la anterior, se distingue por su anchura. Le sigue el Alto del Mico, que guarda una belleza natural que se pierde entre su exuberante vegetación.

Es importante tener en cuenta que la visibilidad de estas cascadas depende de las lluvias, por lo que pueden no ser visibles durante períodos prolongados de sequía.

¿Cómo llegar desde Bucaramanga a Los Santos?

Un recorrido de una hora y media separa a Bucaramanga de la Mesa de los Santos. En carro, usted recorrerá una distancia de 8,3 kilómetros y la ruta más directa es por Piedecuesta Los Santos, de acuerdo a lo que se informa en el portal de referencia.

En general, usted tiene 3 opciones para visitar esta población, partiendo desde la capital del departamento de Santander:

En vehículo particular:

Desde Bucaramanga, toma la vía hacia Piedecuesta, que forma parte de la carretera nacional que conecta con Bogotá.

Una vez en Piedecuesta, sigue las indicaciones hacia la vía a Los Santos. Este camino te llevará hacia la Meseta de los Santos, una ruta que ofrece vistas increíbles del Cañón del Chicamocha.

En transporte público:

Diríjase al terminal de transporte de Bucaramanga o a algún punto donde salgan buses hacia Piedecuesta.

Desde Piedecuesta, tome un bus o un colectivo hacia la Mesa de los Santos. Varios servicios locales ofrecen rutas directas hacia la meseta.

Con tours organizados:

Muchas agencias en Bucaramanga y San Gil ofrecen tours que incluyen transporte hacia la Mesa de los Santos.