Turismo
La población del Quindío con nombre de linda ciudad italiana; un destino cafetero que mezcla tradición y modernidad
Este municipio aún conserva su arquitectura tradicional y el estilo de vida de los pueblos cafeteros de antaño.
El departamento del Quindío es uno de los más pequeños del territorio nacional, pero con una gran riqueza en oferta turística, pues allí los viajeros pueden disfrutar de lindos paisajes, recorrer fincas y saborear una rica taza de café, además de conocer de las culturas y tradiciones de las comunidades de la región.
En este territorio, hay 12 municipios y uno de ellos es Génova, una linda población con nombre de origen italiano, que tiene mucho para ofrecerle a los turistas. Información del portal Rutas del Paisaje Cultural Cafetero indica que este es un orgulloso representante de los pueblos de la colonización antioqueña y aún conserva mucho de su arquitectura tradicional y del estilo de vida de los pueblos cafeteros de antaño.
Este municipio es considerado un lugar privilegiado para el turismo rural y para los amantes de los lugares poco explorados, aquellos que por lo general están por fuera de la guía turística. La mencionada fuente asegura que este es un sitio ideal para entrar en contacto con la cultura cafetera en su estado más puro.
En Génova, los viajeros que disfrutan del ecoturismo encuentran la Reserva Regional Páramo y Bosques Altoandinos y la cascada Las Brisas, lugares ideales para practicar el senderismo. Por su parte, la reserva natural El Mirador es un reconocido paraje para el avistamiento de aves.
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De igual forma, está la laguna de Juntas, que está inmersa entre un valle en la parte más alta del municipio y a varias horas de caminata. Allí, debido al clima frío, se encuentra una vegetación propia de páramo y la cristalina laguna. La visita a este lugar obliga a llevar ropa adecuada y contar con buen estado físico, precisa información de la Gobernación del Quindío.
En el casco urbano
En el casco urbano de esta población se encuentra el parque principal que refleja la vida laboriosa y tranquila del municipio. Una de sus características es que está adornado de jeeps willys y campesinos de poncho y sombrero, una imagen que contrasta con sus fincas con procesamiento industrial del café. Está dotado de bancas, espacios peatonales y rutas por donde los niños juegan. En un costado, y al frente de la iglesia, se erige la estatua del Libertador Simón Bolívar.
En una de las esquinas del parque, está la parroquia del municipio con su nave central y dos torres laterales. Quienes la visitan pueden apreciar las tallas en bronce de las puertas y ascender al mirador parroquial y la torre del reloj.
Un poco de historia
En sus orígenes este municipio perteneció al Valle del Cauca, departamento con el que limita, pero la gran mayoría de sus habitantes desciende de la raza antioqueña que propició la colonización regional, según el portal Turismo Quindío. Con el paso de los años, fueron llegando pobladores de otras partes del país como Tolima y Boyacá, haciendo del componente humano un factor multicultural tan interesante como la historia de la formación del pueblo.
Se dice que es un ejemplo de tradición cafetera y una muestra del talante pujante y moderno de la industria colombiana. En algunas de sus lomas aún se cultiva café en sombrío, igual que hace 100 años; incluso la marca café Génova tiene su propia planta de tratamiento del grano, en donde muelen, trillan, tuestan y empacan los bultos que llegan de las fincas cafeteras.
