Turismo
El turismo en Santorini al borde del colapso: oleada de terremotos ha provocado una evacuación masiva de viajeros y locales
Hasta ahora, más de 11.000 personas decidieron abandonar la isla, que desde finales de enero ha registrado una actividad sísmica sin precedentes.
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Desde el pasado jueves, 6 de febrero, el gobierno de Grecia declaró estado de emergencia en Santorini, después de que cientos de terremotos submarinos sacudieran la isla turística durante casi una semana, el más fuerte de ellos de magnitud 5,2.
Esta oleada de temblores comenzó desde finales de enero y, hasta ahora, ha provocado que más de 11.000 personas evacuaran la isla, dejando un panorama desolador y preocupante, no solo para sus habitantes sino para los viajeros que se encontraban en esta joya de Grecia al momento de la actividad y otros tantos que han soñado con conocerla.
Por el momento, los expertos dicen que la actividad sísmica no está relacionada con la actividad volcánica en el mar Egeo, pero aún no pueden decir si los movimientos podrían conducir a un terremoto más poderoso.
“Aún no estamos en posición de decir que estamos viendo alguna evidencia que llevaría a que la secuencia comience a concluir lentamente”, dijo a los periodistas Vassilis K. Karastathis, sismólogo y director de investigación en el Observatorio Nacional de Atenas.
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“Todavía estamos en medio del camino, no hemos visto ninguna disminución, ningún signo de que esté encaminándose hacia una regresión”, afirmó.
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Esta crisis hace que el turismo en Santorini esté al borde del colapso, al menos durante la primavera y el verano, pues aunque la isla todavía se encuentra en temporada baja, desde la Confederación Española de Agencias de Viaje (CEAV) advierten que la situación podría afectar la demanda de viajes de cara a Semana Santa, la época con mayor afluencia de turistas.
Según explica la entidad, la incertidumbre generada por los más de 12.800 movimientos sísmicos que se registraron desde finales de enero hasta el pasado 8 de febrero, en la zona marítima entre Santorini y Amorgós, según el Laboratorio de Sismología de la Universidad de Atenas, podría frenar las reservas, especialmente para cruceros y paquetes turísticos que incluyen escalas en la isla.
Un preocupante panorama
En Santorini el turismo es su principal fuente de ingresos, por eso la reducción drástica de la actividad turística en esta temporada ha convertido a la isla en un escenario desolador.
Por ahora, cientos de bares, restaurantes y hoteles permanecen cerrados, transformando a este paraíso griego en una “isla fantasma”, según describen algunos habitantes y señala el periódico de España Artículo 14.
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Debido a esto, operadores turísticos, comerciantes y empresarios locales han expresado su preocupación, ya que su sustento depende del flujo constante de visitantes. La incertidumbre sobre la duración de la actividad sísmica aumenta la inquietud en el sector, poniendo en riesgo la estabilidad de sus negocios.
La posibilidad de un terremoto de mayor magnitud ha frenado las decisiones de viaje, lo que podría generar un impacto económico significativo en los próximos meses que perjudica notablemente a su población.
Vale mencionar que a pesar de los desafíos que enfrenta, Santorini sigue siendo un destino de ensueño para millones de personas de diferentes partes del mundo. Sin embargo, tanto sus habitantes como turistas continúan a la espera de un nuevo y, en lo posible, esperanzador reporte por parte de las autoridades para minimizar los efectos negativos que podría provocar la falta de turistas en la zona.
Con información de AP.