El efectivo método para empacar una maleta pequeña para un viaje largo

Salir de vacaciones es uno de los mejores planes para muchas personas. Sin embargo, en el momento de empacar la maleta el tema puede complicarse, pues si no se hace de la manera adecuada, es posible que se genere sobrepeso o mayores costos en el momento de registrar el equipaje en el aeropuerto.

Hay personas que no tienen inconveniente en llevar maletas grandes debido a que les gusta que no falte nada en la misma, mientras que hay otras que prefieren llevar un equipaje pequeño, así se trate de un viaje largo. No les gusta complicarse y solo llevan lo necesario.

Así las cosas, en este aspecto de cómo empacar una maleta es clave intentar ser objetivo con la selección de ropa y objetos que se van a llevar, para ello se debe considerar el tiempo del viaje, el clima del lugar y el motivo del viaje.

Si el clima es frío, es muy probable que la selección de maleta sea de tamaño grande, debido a que la vestimenta tiene unas características especiales que deben tenerse en cuenta.

Cuando se trata de viajes largos, el proceso puede ser aún más complejo, pero hay formas de empacar lo necesario solo en un equipaje de mano. Uno de los primeros aspectos a tener en cuenta es darle prioridad a aquellos artículos que brindan diferentes usos. Por ejemplo, uno de esos accesorios es una bufanda que sirve para el frío, se puede utilizar como un abrigo en determinados momentos, e incluso como almohada si es necesario.

De igual forma, es muy importante llevar colores neutros y tonos oscuros como el negro, que combinan fácilmente entre sí, además de que sean en materiales como seda o lana, pues estas telas son más resistentes a las arrugas.

La seda es muy fácil de lavar y, además, se seca rápidamente, lo que facilita que la persona pueda utilizar esta prenda en varias oportunidades, además de ser muy liviana.

Otra idea a tener en cuenta es empacar ropa con estampados, pues ayudan a disimular las arrugas. Un truco más es que las prendas sean transpirables, las cuales son fáciles de lavar y secar.

Es clave llevar calzado cómodo. Los zapatos deben ser prácticos para realizar caminatas de varias horas. Es bueno que sean cómodos y si son impermeables, mejor, pues se ajustan a los diversos climas y particularmente a la lluvia.

En el caso de los artículos de tocador, estos deben ser de tamaños pequeños y saber que en los hoteles hay la mayoría de cosas, por lo que no es necesario llevar de todo. Lo otro es que si se viaja en grupo es posible compartir algunos productos o distribuírselos para evitar el sobrepeso.

Por último, elegir una maleta ligera, pero resistente es una de las mejores decisiones. Esto ayuda a controlar el peso y evitar el pago de más en el aeropuerto. Otro aspecto importante es que tenga varios compartimentos que facilitan la organización del equipaje.