Tenga lejos estos dos electrodomésticos de la nevera para reducir “hasta un 15% más de consumo”

Cuando se trata de ahorrar energía en casa, solemos pensar en desconectar aparatos, usar bombillas led o moderar el uso del aire acondicionado.

Sin embargo, pocos consideran que la manera en la que están distribuidos los electrodomésticos dentro de la cocina también influye en el consumo eléctrico.

Uno de los equipos que más trabaja durante todo el año es el refrigerador, cuyo rendimiento puede verse afectado significativamente dependiendo de los aparatos que tenga cerca.

El refrigerador: un consumidor constante que puede gastar aún más

Según especialistas en eficiencia energética, el refrigerador es uno de los electrodomésticos que más electricidad consume en el hogar, principalmente porque está encendido de forma ininterrumpida, los 365 días del año.

Esta constante actividad implica un gasto fijo que puede elevarse si no se tienen en cuenta ciertos factores externos. Uno de los más importantes es la presencia cercana de otros equipos que generan calor.

En este sentido, la empresa comercializadora de energía Holaluz advierte que existen dos electrodomésticos cuya proximidad puede elevar el consumo energético del refrigerador hasta en un 15 %.

Aunque muchas veces se pasan por alto, estos aparatos alteran el entorno térmico de la cocina, obligando al refrigerador a trabajar más para mantener una temperatura interna adecuada.

El calor y la mala ventilación: enemigos del ahorro

Holaluz explica que la ubicación de la nevera es crucial. “Si no le ofrecemos un sitio a su gusto, nos castigará con hasta un 15 % más de consumo”, señala la empresa.

La advertencia no es menor: tener cerca fuentes de calor como el horno, estufas e incluso ventanas por donde entra el sol directo, obliga al refrigerador a esforzarse más para contrarrestar el aumento de temperatura en su entorno inmediato.

Además del calor externo, otro detalle importante es el espacio alrededor del aparato. El motor y los tubos del refrigerador requieren una ventilación adecuada para disipar el calor que generan durante su funcionamiento.

“Necesita sentirse libre”, indica Holaluz, sugiriendo que se mantenga una separación prudente entre el electrodoméstico y la pared u otros objetos. Unos pocos centímetros pueden marcar la diferencia en términos de eficiencia.

Tener en cuenta estos detalles al reorganizar la cocina puede ayudar no solo a prolongar la vida útil del refrigerador, sino también a reducir el consumo eléctrico mensual. En tiempos donde cada peso cuenta, pequeñas decisiones como estas pueden tener un impacto significativo en el presupuesto familiar.