Tecnología
Si sus paneles solares en casa no rinden igual, haga esto pronto para recuperar su eficiencia y prolongar su vida útil
Estas acciones no solo garantizan una mayor eficiencia en la generación de electricidad, sino que también prolongan la vida útil de los equipos, que podrían superar las tres décadas si se cuidan adecuadamente.


La transición hacia energías limpias ha hecho que los paneles solares se integren cada vez más en viviendas, empresas y complejos residenciales, convirtiendo techos y fachadas en auténticas centrales de producción energética.
Para asegurar un rendimiento óptimo, resulta indispensable llevar a cabo tareas de limpieza y mantenimiento que eviten la acumulación de polvo, hojas u otros residuos que disminuyan la captación de la luz solar.
Estas acciones no solo garantizan una mayor eficiencia en la generación de electricidad, sino que también prolongan la vida útil de los equipos, que podrían superar las tres décadas si se cuidan adecuadamente.
Aunque su instalación inicial represente una inversión significativa, los beneficios a largo plazo, reflejados en un ahorro de hasta el 70 % en la factura eléctrica, justifican ampliamente la apuesta por esta tecnología sostenible, según el sitio web especializado en la comercialización de estos aparatos, Solarplak.es.
Cuando no se lleva a cabo un mantenimiento adecuado, los paneles solares pueden experimentar una disminución de su rendimiento energético cercana al 8 %, una cifra considerable si se tiene en cuenta que de por sí ya presentan pérdidas naturales en el proceso de conversión.

Este porcentaje acumulado se traduce en una menor eficiencia y, en consecuencia, en un impacto directo en el ahorro esperado en la factura de electricidad. Por ello, la limpieza y el cuidado periódico de las placas fotovoltaicas se consideran fundamentales para optimizar su funcionamiento y proteger la inversión realizada en esta tecnología.
¿Cómo hacer mantenimiento a los paneles solares?
De acuerdo con la página oficial de la compañía multinacional de energía Repsol.com, para garantizar el buen estado de los paneles solares, recomiendan establecer un plan de limpieza periódico. Lo ideal es realizarlos al menos dos veces al año: una al finalizar la primavera, cuando el polen suele acumularse en mayor cantidad, y otra al iniciar el invierno, después de la temporada de calor y polvo –de febrero a principios de junio–.

Sin embargo, en zonas con altos niveles de contaminación, arena o residuos ambientales, conviene incrementar la frecuencia a cada tres meses, evitando así una disminución significativa en la producción energética y reduciendo gastos futuros en reparaciones.
Otro aspecto clave es seleccionar el momento adecuado para la limpieza. Se aconseja realizarla en las primeras horas del día, cuando los paneles aún se encuentran frescos y la radiación solar es baja. Si se lavan cuando están calientes, el choque térmico entre el agua fría y la superficie caliente puede provocar fisuras o deterioro en los módulos. Además, conviene evitar jornadas con viento fuerte, lluvias intensas o nevadas, ya que estas condiciones dificultan el proceso y aumentan el riesgo de accidentes.
El procedimiento de limpieza debe llevarse a cabo con suavidad para no dañar la superficie del cristal. Los expertos recomiendan iniciar con una revisión visual, con el fin de detectar posibles grietas, conexiones flojas o daños que deban ser atendidos por un profesional.
Posteriormente, se pueden eliminar los restos de polvo o suciedad con agua y utensilios adecuados, secando al final con paños suaves o dejando que se evapore de manera natural. Finalmente, especialistas recomiendan registrar cada mantenimiento realizado, de modo que se pueda llevar un control organizado y asegurar un rendimiento constante de la instalación solar.