Tecnología

Si quiere evitar daños irreparables al limpiar la freidora de aire, siga estos pasos para hacerlo correctamente y evitar riesgos

Una correcta higiene evita acumulaciones de grasa, restos de comida y olores desagradables que pueden alterar los resultados de las recetas.

Mary Nelly  Mora Escamilla

Mary Nelly Mora Escamilla

Periodista en Semana

27 de agosto de 2025, 10:09 p. m.
Lo que nunca debe hacer al limpiar su freidora de aire para evitar daños irreparables.
Lo que nunca debe hacer al limpiar su freidora de aire para evitar daños irreparables. | Foto: Getty Images

Las freidoras de aire se han posicionado como un aliado indispensable en la cocina moderna, ya que permiten disfrutar de alimentos crujientes con menos grasa. No obstante, para que este electrodoméstico mantenga su eficacia y conserve la calidad de las preparaciones, es indispensable realizar una limpieza adecuada con frecuencia.

Mantenerla en buen estado no solo prolonga su vida útil, sino que también garantiza que cada platillo conserve su sabor auténtico, sin residuos de preparaciones anteriores. Además, una correcta higiene evita acumulaciones de grasa, restos de comida y olores desagradables que pueden alterar los resultados de las recetas.

Con unos simples pasos de cuidado, este electrodoméstico puede seguir ofreciendo comidas deliciosas y saludables por mucho más tiempo, sin perder su rendimiento ni su practicidad en el día a día.

La freidora de aire es un electrodoméstico popular en los hogares.
La freidora de aire es un electrodoméstico popular en los hogares. | Foto: Getty Images

De acuerdo con el blog de la compañía de electrónica y electrodomésticos Kalley, para mantener en perfecto estado una freidora de aire no se requiere de implementos costosos ni especializados, basta con disponer de algunos elementos comunes del hogar.

Un ejemplo de ello son un paño de tela suave o una esponja que no raye, junto con agua tibia y un poco de jabón líquido neutro, resultan suficientes para retirar la grasa y los restos de comida. Además, un cepillo pequeño —incluso uno de dientes en desuso— es ideal para acceder a los rincones más estrechos y eliminar la suciedad acumulada.

¿Cómo limpiar la freidora de aire?

Para realizar una limpieza completa y segura de la freidora de aire, es fundamental seguir un orden adecuado, según lo reseñado en el sitio web de la compañía Instant Pot.

El primer paso consiste en desenchufar el aparato y esperar a que se enfríe por completo, lo que reduce el riesgo de accidentes eléctricos o quemaduras. Después, retirar la cesta, la bandeja y los accesorios extraíbles, ya que son las piezas que más contacto tienen con los alimentos y, por lo tanto, acumulan mayor cantidad de grasa y residuos.

Una vez desmontadas las partes móviles, los expertos recomiendan colocarlas en remojo en agua tibia con jabón durante unos 10 a 15 minutos, lo que facilitará la eliminación de restos pegados. Posteriormente, con la ayuda de un paño suave o una esponja no abrasiva, limpiar tanto la cesta como la bandeja, cuidando de no dañar el recubrimiento antiadherente.

El enjuague es otro paso clave, ya que garantiza que no queden rastros de jabón.
El enjuague es otro paso clave, ya que garantiza que no queden rastros de jabón. | Foto: Getty Images

En los casos en los que los residuos estén muy adheridos, una pasta casera de bicarbonato de sodio con agua puede ser de gran ayuda para desincrustarlos sin dañar la superficie.

El enjuague es otro paso clave, ya que garantiza que no queden rastros de jabón. Después de lavarlas, lo ideal es secar las piezas con una toalla limpia o dejarlas escurrir al aire para evitar la humedad acumulada.

El interior del aparato también merece atención: un paño húmedo es suficiente para retirar restos de grasa, siempre con cuidado en la zona del elemento calefactor, que no debe mojarse en exceso. Si la grasa acumulada es más resistente, una mezcla de agua con vinagre en partes iguales resulta eficaz para descomponerla sin necesidad de químicos agresivos.

Finalmente, el exterior de la freidora debe limpiarse con un paño ligeramente humedecido, prestando atención al panel de control y al asa, zonas que suelen ensuciarse con facilidad por el uso constante.

Una vez que todo esté completamente seco, llega el momento de reensamblar las piezas y almacenar el electrodoméstico en un lugar fresco y limpio. Este proceso no solo mantiene la freidora lista para la próxima preparación, sino que también alarga su vida útil y asegura un funcionamiento eficiente en cada uso.

Noticias relacionadas