Nunca transfiera dinero desde su celular en estos lugares porque delincuentes podrían vaciar su cuenta bancaria fácilmente

En la era digital actual, uno de los hábitos más comunes entre los usuarios es la transferencia de dinero a través de dispositivos móviles, debido a que se trata de un proceso práctico, sencillo y que no requiere mayor esfuerzo. Basta con contar con una buena conexión a internet para que la operación sea exitosa.

No obstante, esta práctica no debe tomarse a la ligera, ya que representa un interés creciente para los ciberdelincuentes, quienes permanecen al acecho buscando maneras de desviar estos recursos hacia sus propias manos, afectando así a quienes realmente los necesitan.

Este tipo de delitos informáticos se ha vuelto cada vez más frecuente, no solo en Colombia, sino en diversas regiones del mundo. Los hackers continúan ampliando sus métodos de ataque, afectando a millones de personas sin distinción de nacionalidad, edad o género. Estas actividades maliciosas suelen llevarse a cabo mediante técnicas de ingeniería social o ataques de fuerza bruta.

Uno de los mecanismos más utilizados es el de las aplicaciones maliciosas, una problemática que se vuelve más común con el paso del tiempo. Estas apps pueden parecer legítimas, pero están diseñadas para robar credenciales bancarias, interceptar mensajes SMS de autenticación o incluso capturar pantallas durante la realización de operaciones financieras. A esto se suma el phishing, que no se limita únicamente al correo electrónico.

A través de SMS (smishing) o mensajes en redes sociales, los criminales engañan a las víctimas para que accedan a enlaces falsos que imitan portales bancarios. Al introducir sus datos, la víctima entrega sus credenciales directamente a los atacantes.

Otro método altamente riesgoso es el conocido como ataque Man-in-the-Middle (MitM), también denominado “el hombre en el medio”. Esta técnica permite que un tercero malintencionado intercepte e incluso altere la comunicación entre dos partes que creen estar interactuando de manera segura.

Según expertos en ciberseguridad de Kaspersky, estos ataques ocurren cuando un actor se posiciona de forma encubierta entre dos entidades —por ejemplo, un usuario y un sitio web— con el propósito de espiar, manipular o robar información sensible. Esto incluye contraseñas, números de tarjetas de crédito, mensajes privados, entre otros datos.

Una de las formas más populares de ejecutar estos ataques es mediante redes wifi públicas. El pirata informático crea una red falsa con un nombre similar al de una legítima —por ejemplo, CaféGratis— y, una vez que los usuarios se conectan, todo su tráfico pasa a través del atacante. De ahí la importancia de evitar, en la medida de lo posible, el uso de estas redes en lugares como cafeterías, aeropuertos, parques o centros comerciales.

“Una vez que te conectas a una red falsa, el hacker obtiene acceso instantáneo a tu dispositivo. Los hackers pueden crear fácilmente estos puntos de acceso wifi fraudulentos, los que les permiten acceder a información personal de todas las personas que intenten conectarse”, puntualizan desde su sitio web.

Los ataques MitM son particularmente peligrosos debido a que suelen ser indetectables para la víctima. El hacker puede mantener la comunicación entre ambas partes funcionando con normalidad, mientras copia toda la información que se transmite. Además, este tipo de ataque puede ser el punto de partida para métodos más sofisticados como el robo de identidad o el secuestro de cuentas.

Recomendaciones de seguridad para protegerse

Especialistas en ciberseguridad sugieren una serie de medidas para mitigar los riesgos asociados a este tipo de amenazas:

• Verificar la seguridad del sitio web: es fundamental asegurarse de que en la barra de direcciones aparezca el ícono de un candado y que la URL comience con https. La letra S indica que la conexión está cifrada.
• Utilizar firewall: un firewall proporciona una capa adicional de protección, especialmente en redes wifi públicas. Para reforzar la seguridad, se recomienda el uso de una red privada virtual (VPN), que cifra la información y dificulta su interceptación.
• Mantener actualizado el software de seguridad: contar con un antivirus y herramientas de protección actualizadas permite protegerse frente a nuevas amenazas y disfrutar de una navegación más segura.