Tecnología
Nunca enchufe este electrodoméstico a una extensión porque podría provocar un grave accidente en casa
Conectar este aparato a una regleta podría ocasionar un sobrecalentamiento del cable, generar fallas en el suministro y, en el peor de los casos, provocar un incendio doméstico.

En muchos hogares, el uso de extensiones eléctricas se ha convertido en una solución rápida para conectar múltiples dispositivos en un mismo punto. Sin embargo, expertos advierten que no todos los aparatos están diseñados para funcionar a través de este tipo de conexiones.
De acuerdo con un análisis arrojado por el chatbot de la inteligencia artificial, ChatGPT, entre los más peligrosos se encuentra un electrodoméstico presente en la mayoría de las cocinas: la nevera o refrigerador.

La advertencia no es un simple consejo preventivo, sino una medida respaldada por especialistas en ingeniería eléctrica y organismos de prevención de incendios. Conectar una nevera a una extensión podría ocasionar un sobrecalentamiento del cable, generar fallas en el suministro y, en el peor de los casos, provocar un incendio doméstico.
¿Por qué la nevera no debe ir conectada a una extensión?
La nevera es un electrodoméstico de alto consumo energético que requiere un flujo eléctrico estable y continuo. Según técnicos en mantenimiento, este aparato demanda una corriente considerable al momento de arrancar el motor del compresor, lo que produce picos de energía que las extensiones comunes no están diseñadas para soportar.
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En condiciones normales, las neveras están fabricadas para conectarse directamente a un tomacorriente con toma a tierra, que puede manejar la carga de manera segura. Las extensiones, en cambio, suelen tener cables más delgados y una capacidad de amperaje limitada. Esto significa que el cable puede calentarse rápidamente si se somete a un consumo constante y elevado, aumentando el riesgo de que el material aislante se derrita y se genere un cortocircuito.
Además del riesgo de incendio, conectar una nevera a una extensión puede acortar la vida útil del electrodoméstico. Al no recibir la energía de forma constante, el motor puede trabajar a mayor esfuerzo, generando desgaste prematuro y posibles fallas irreparables.

En climas cálidos o durante el verano, cuando la nevera trabaja con mayor intensidad para mantener la temperatura interna, este problema se agrava. La sobrecarga en la extensión no solo aumenta el riesgo de que el cable se queme, sino que también puede provocar fluctuaciones de voltaje que dañen otros aparatos conectados en el mismo circuito.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.