Astronomía
Luna llena de agosto 2025: trucos infalibles para capturar las mejores fotografías con el celular sin ser un experto
La luna llena del 9 de agosto, conocida como Luna de Esturión, es uno de los eventos astronómicos más importantes del año.

El sábado 9 de agosto tendrá lugar uno de los fenómenos astronómicos más esperados del año: la luna llena, conocida también como la Luna de Esturión, un evento que se repite aproximadamente cada 29,5 días.
Aunque su punto máximo de plenitud se producirá en horas de la mañana, este no será visible a simple vista. Por tal motivo, los especialistas recomiendan observarla desde el atardecer del 8 de agosto o durante la noche del día siguiente, ya que la diferencia entre ambos momentos resulta prácticamente imperceptible para el ojo humano.
El término “Luna de Esturión” tiene raíces en las culturas originarias de Norteamérica, las cuales asignaban nombres a cada luna llena en función de los ciclos naturales y las actividades características de cada temporada. En este caso, la denominación alude al aumento en la presencia de esturiones en los Grandes Lagos durante el mes de agosto, lo que facilitaba su pesca. Según explica National Geographic, esta práctica formaba parte de un sistema simbólico que regulaba el calendario mediante la observación de fenómenos naturales recurrentes.

Para apreciar este fenómeno en todo su esplendor, los expertos sugieren alejarse de las zonas urbanas y buscar espacios con baja contaminación lumínica, como áreas rurales o naturales. Este tipo de entorno no solo mejora la observación, sino que resulta ideal para realizar capturas fotográficas. En ese sentido, se aconseja el uso de configuraciones con exposiciones prolongadas para obtener mejores resultados.
Lo más leído
Sin embargo, quienes intentan capturar la Luna con un teléfono móvil suelen encontrarse con resultados decepcionantes. En muchas ocasiones, la imagen muestra apenas un punto blanco brillante, sin detalles, textura ni el brillo que puede observarse directamente.
No obstante, con algunos conocimientos básicos y ajustes específicos, es posible mejorar considerablemente la calidad de las fotografías lunares tomadas con dispositivos móviles, incluso durante eventos destacados como la Luna llena.
Recomendaciones para fotografiar la Luna de Esturión
Según detalla la NASA en su sitio web, la planificación es el primer paso fundamental para lograr una buena fotografía lunar. No se trata solo de apuntar al cielo, sino de conocer con precisión la hora de salida y puesta de la Luna.
Las mejores condiciones para fotografiarla suelen darse justo después del atardecer o poco antes del amanecer, cuando el satélite natural aún se encuentra bajo en el horizonte. En esos momentos, la luz lunar atraviesa una mayor cantidad de atmósfera terrestre, lo que atenúa su brillo y permite capturar más detalles sin sobreexposición.
Uno de los errores más frecuentes al tomar fotos es centrarla por completo en el encuadre, dejando fuera cualquier elemento del paisaje. Para obtener una imagen más atractiva y cercana a la percepción visual humana, se recomienda incluir referencias como árboles, edificios o montañas.

La aplicación de la regla de los tercios también contribuye a lograr composiciones más equilibradas. Al ubicarla en uno de los puntos de intersección de una cuadrícula imaginaria, se obtiene una imagen con mayor dinamismo visual.
Por otra parte, muchos teléfonos de gama media y alta disponen de un “modo Pro” o manual que permite ajustar parámetros como la sensibilidad ISO, el tiempo de exposición y el enfoque. Utilizar estas herramientas puede marcar una diferencia significativa en el resultado final.
Además, el uso de un trípode o soporte es crucial para garantizar la estabilidad del dispositivo durante la captura. La falta de movimiento evita imágenes borrosas y mejora la nitidez. También existen pequeños teleobjetivos adaptables a móviles que permiten acercamientos sin sacrificar calidad.
Con las condiciones adecuadas y algunos recursos técnicos, es posible inmortalizar la Luna de Esturión de forma fiel y estética, acercando la experiencia visual a lo que realmente se observa en el cielo.