Tecnología
Lo primero que debe hacer cuando hay un corte de energía inesperado para evitar que sus electrodomésticos se dañen
Los apagones eléctricos son eventos que, aunque muchas veces inesperados, forman parte de las contingencias a las que puede enfrentarse cualquier hogar.
La interrupción repentina del suministro eléctrico es una situación que muchas personas han experimentado en algún momento de su vida. Ya sea mientras se ve televisión, se trabaja o se realizan actividades cotidianas en casa, un corte de energía puede ocurrir de forma imprevista, afectando el ritmo normal de la jornada. Este fenómeno, conocido como apagón, corresponde a la suspensión temporal del servicio eléctrico en una zona determinada.
Los cortes de luz pueden tener múltiples causas: fallas técnicas, sobrecargas del sistema, condiciones climáticas adversas, labores de mantenimiento, accidentes e incluso actos de sabotaje. Aunque algunas interrupciones son programadas por las empresas proveedoras para ejecutar reparaciones o mejoras, en muchos casos suceden de manera inesperada, generando consecuencias relevantes tanto para los hogares como para instituciones y empresas.
Ante una situación de este tipo, especialistas recomiendan tomar medidas inmediatas para evitar daños. Según Enel Colombia, una de las primeras acciones consiste en bajar los tacos o desconectar los electrodomésticos. Esta práctica es fundamental, ya que tanto durante el corte como en el momento en que regresa la energía, pueden producirse variaciones en la tensión eléctrica. El restablecimiento del servicio no siempre ocurre de manera uniforme, lo que puede generar picos de voltaje capaces de dañar equipos electrónicos.
Durante un apagón, la red puede presentar inestabilidad. Cuando la electricidad regresa, no es raro que se produzcan sobretensiones, es decir, aumentos bruscos en el voltaje. Estos cambios repentinos pueden afectar los componentes internos de los electrodomésticos, provocando fallas funcionales o dejándolos inservibles. Aparatos como televisores, neveras, hornos microondas y computadores son particularmente vulnerables a estas alteraciones.
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Los expertos también recomiendan adoptar otras medidas de prevención. Preparar iluminación de emergencia —como linternas, lámparas recargables o velas en buen estado— es clave para garantizar una mínima operatividad y seguridad durante la contingencia.
Otra acción importante consiste en verificar si la interrupción afecta solo a una vivienda o si se trata de una falla generalizada. Consultar con los vecinos puede ayudar a determinar el alcance del apagón. En caso de que solo un inmueble esté sin servicio, es posible que exista un daño interno.
En estas situaciones se sugiere revisar el estado de los tacos, enchufes y cables visibles, prestando atención a señales de deterioro como chispas, humo, marcas de quemadura u olores inusuales, indicios que podrían advertir de una falla en la instalación eléctrica.
También resulta útil confirmar si la empresa prestadora del servicio ha programado trabajos de mantenimiento en la zona. Esta información suele estar disponible en los canales oficiales, como sitios web o aplicaciones móviles. La ausencia de notificaciones puede indicar que se trata de una falla no planificada, la cual debe ser reportada con prontitud.
Cuando el corte de energía afecta a todo el sector y no se cuenta con información oficial que lo explique, se recomienda contactar de inmediato a la empresa encargada del suministro a través de los canales de atención habilitados. Un reporte oportuno permite activar los protocolos necesarios para la pronta recuperación del servicio.
En todos los casos, conservar la calma, actuar con precaución y seguir las recomendaciones de los expertos es esencial para salvaguardar tanto los equipos del hogar como la seguridad de quienes lo habitan durante un apagón eléctrico.
