Estos son los adornos de Navidad que pueden provocar un incendio en la casa

La temporada navideña es sinónimo de alegría, decoraciones coloridas y reuniones familiares. Sin embargo, algunos adornos navideños, que parecen inofensivos, pueden representar riesgos de incendio si no se manejan adecuadamente. La combinación de luces, materiales inflamables y sobrecarga eléctrica puede convertir el hogar en un peligro latente.

En este contexto, SEMANA consultó con ChatGPT, el chatbot de inteligencia artificial, sobre los principales adornos que pueden causar accidentes, así como medidas preventivas para disfrutar de una Navidad segura.

¿Cuáles son los adornos de Navidad que pueden provocar un incendio?

Luces navideñas

Las luces navideñas son un elemento imprescindible en la decoración de esta época, pero también uno de los más peligrosos si no se utilizan correctamente. Los cortocircuitos y el sobrecalentamiento son causas comunes de incendios asociados con estos adornos. El uso de luces en mal estado o de baja calidad aumenta significativamente el riesgo. Según expertos en seguridad, las luces con cables dañados, enchufes flojos o bombillas rotas son particularmente peligrosas. Asimismo, conectar varias extensiones en un solo enchufe puede provocar una sobrecarga eléctrica, un error común durante la temporada.

Para evitar incidentes, se recomienda inspeccionar cuidadosamente las luces antes de instalarlas y utilizar solo productos con certificaciones de seguridad reconocidas. Además, es importante desconectar las luces al salir de casa o antes de dormir, ya que dejarlas encendidas durante largos periodos aumenta el riesgo de recalentamiento.

Árboles naturales y decoraciones inflamables

El árbol de Navidad, ya sea natural o artificial, también puede ser un potencial riesgo de incendio si no se toman las precauciones necesarias. En el caso de los árboles naturales, la falta de hidratación es un factor crítico. Cuando un árbol está seco, es mucho más susceptible a incendiarse con el calor generado por las luces o cualquier fuente de llama cercana, como velas.

Por su parte, los árboles artificiales fabricados con materiales inflamables, especialmente si son de baja calidad, pueden ser igualmente peligrosos. Los adornos decorativos, como guirnaldas, moños y figuras de papel, también incrementan el riesgo cuando se colocan cerca de fuentes de calor.

Es fundamental mantener los árboles alejados de estufas, chimeneas y radiadores. Si se opta por un árbol natural, se debe regar frecuentemente para mantener su frescura. En el caso de los artificiales, es preferible elegir aquellos etiquetados como resistentes al fuego.

Velas y aerosoles decorativos

El uso de velas es otra tradición navideña que, aunque crea un ambiente cálido y acogedor, puede convertirse rápidamente en un peligro. Colocar velas cerca de cortinas, muebles o decoraciones inflamables aumenta el riesgo de que se desate un incendio. Además, dejarlas encendidas sin supervisión es una práctica común que puede tener consecuencias catastróficas.

Los aerosoles decorativos, como la nieve artificial o los sprays de purpurina, también son elementos que deben manejarse con precaución. Estos productos suelen contener químicos altamente inflamables que, al entrar en contacto con chispas o llamas, pueden generar una combustión rápida.

Para minimizar el riesgo, se sugiere sustituir las velas tradicionales por velas LED, que ofrecen un efecto similar sin peligro. Asimismo, al utilizar aerosoles, se debe evitar aplicarlos cerca de luces o llamas, y siempre seguir las instrucciones de uso del fabricante.