Esto es lo que siempre debe hacer antes de transferir dinero para evitar que delincuentes desocupen sus cuentas bancarias

En la era digital actual, las transferencias bancarias se han convertido en una herramienta esencial para muchas personas, eliminando la necesidad de hacer largas filas en las sucursales para enviar dinero a familiares o amigos. Hoy en día, basta con tener un teléfono móvil con acceso a internet para realizar una transferencia de manera rápida y sencilla.

Sin embargo, a pesar de los beneficios que ofrecen, las transferencias electrónicas también representan un desafío en términos de seguridad y privacidad. En los últimos años, se han convertido en un objetivo frecuente para los ciberdelincuentes, quienes emplean diversas tácticas para aprovecharse de la confianza y el desconocimiento de los usuarios. Gracias a esto, logran llevar a cabo estafas millonarias que pueden dejar a las víctimas en situaciones económicas devastadoras.

Los expertos en ciberseguridad de Kaspersky, en su página web, explican que “el fraude en las transferencias electrónicas ocurre cuando un tercero intercepta una transferencia después de hackear la cuenta de correo electrónico de una persona y descubrir o adivinar la respuesta a la pregunta de seguridad. Así, se apoderan del dinero, el cual nunca llega al destinatario original”.

Ante esta realidad, se ha alertado sobre el creciente riesgo de fraudes relacionados con las transferencias bancarias. En muchos casos, es casi imposible recuperar el dinero, dado que los ciberdelincuentes son muy hábiles en crear estrategias que manipulan las emociones de las víctimas, presionándolas para que tomen decisiones precipitadas sin tiempo para reflexionar, lo que facilita la consumación de la estafa.

¿Cómo realizar transferencias bancarias seguras y evitar ser estafado?

Existen varios aspectos clave que los usuarios deben tener en cuenta al realizar una transferencia digital. Uno de los más importantes es la verificación de la identidad del destinatario. Es esencial revisar cuidadosamente que los datos del beneficiario, como el nombre, número de cuenta y banco, estén correctos antes de proceder. Además, nunca se debe confiar en la información proporcionada por terceros. Si se recibe una solicitud para realizar una transferencia hacia una cuenta desconocida, es fundamental verificar la solicitud directamente con la persona o empresa, preferentemente a través de canales confiables y seguros (como llamadas telefónicas o correos electrónicos oficiales).

Asimismo, es vital asegurarse de que la transferencia se realice a través de una plataforma segura. Para ello, se debe utilizar la web oficial del banco o una aplicación confiable. Es importante comprobar que la URL de la página web comience con “https”, lo cual indica que la comunicación está cifrada y es segura. Si la transferencia se realiza mediante una aplicación, esta debe descargarse exclusivamente desde tiendas oficiales, como Google Play Store o Apple App Store, porque las aplicaciones de fuentes no oficiales pueden contener malware o ser imitaciones de las originales.

Los ciberdelincuentes son conscientes de los hábitos y movimientos de sus víctimas, por lo que suelen enviar correos electrónicos o mensajes de texto fraudulentos solicitando una transferencia urgente. Para aumentar su efectividad, a menudo suplantan la identidad de un amigo o familiar cercano, con el fin de engañar a la víctima. Sin embargo, el objetivo real de estos ataques es que, al hacer clic en un enlace infectado, los datos personales de la víctima sean robados.

Siguiendo estos consejos, se puede aumentar considerablemente la seguridad al realizar transferencias a través de aplicaciones de pago y plataformas bancarias. La clave está en mantener siempre la cautela y la verificación al realizar cualquier transacción, especialmente cuando involucra dinero y datos personales.