Tecnología

El aparato eléctrico que no debería estar siempre conectado para ahorrar energía y evitar riesgos

Uno de estos dispositivos, presente en casi todas las viviendas, es especialmente problemático si permanece encendido las 24 horas del día.

Mary Nelly  Mora Escamilla

Mary Nelly Mora Escamilla

Periodista en Semana

12 de mayo de 2025, 2:06 p. m.
Este electrodoméstico dispara el consumo de energía y afecta la factura de la luz.
Este electrodoméstico dispara el consumo de energía y afecta la factura de la luz. | Foto: Getty Images

Los electrodomésticos han sido diseñados para facilitar las tareas del hogar y mejorar la calidad de vida en el día a día. Ya sea a través de equipos convencionales o mediante dispositivos modernos con funciones inteligentes, estos aparatos permiten ahorrar tiempo, disminuir el esfuerzo físico y hacer un uso más eficiente de la energía en actividades domésticas como cocinar, limpiar o conservar los alimentos.

Sin embargo, pocos desconocen que mantener ciertos electrodomésticos conectados permanentemente, podría implicar un gasto energético considerable y un riesgo potencial de seguridad. Uno de estos dispositivos, presente en casi todas las viviendas, es especialmente problemático si permanece encendido las 24 horas del día.

El microondas

En la mayoría de los hogares, el microondas se ha convertido en un electrodoméstico indispensable por su rapidez y comodidad. Sin embargo, pocos saben que este aparato continúa consumiendo electricidad incluso cuando no está en uso. Este fenómeno, conocido como “consumo fantasma”, puede representar entre el 5 y el 10 % del total de la factura de energía en algunos hogares, según datos de la Agencia Internacional de la Energía.

El microondas, aunque no esté calentando alimentos, mantiene activos su reloj digital, el panel de control y otros componentes internos que requieren energía constantemente. Si bien el consumo puede parecer bajo en términos individuales, la acumulación diaria de esta energía desaprovechada impacta tanto en el bolsillo como en el medioambiente.

Los microondas son útiles en la cocina.
Los microondas son útiles en la cocina. | Foto: Getty Images

Dejarlo enchufado únicamente para ver la hora puede representar un gasto innecesario de energía. Además, la mayoría de las funciones básicas del microondas, como calentar o descongelar, no dependen del reloj interno, por lo que desconectarlo no afecta su funcionamiento principal.

Además, los microondas antiguos o con problemas internos son especialmente vulnerables. Con el paso del tiempo, los cables pueden deteriorarse o el aislamiento interno puede fallar, lo cual genera un peligro latente si el dispositivo permanece conectado a la corriente.

Conexión eléctrica (Enchufe)
Hay electrodomésticos que no deberían conectarse al mismo enchufe porque se pueden sobrecargar. | Foto: Getty Images

Incluso los modelos más modernos, con funciones de bajo consumo, están expuestos a picos de tensión en la red eléctrica, que podrían dañar sus componentes o provocar una chispa, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre los riesgos del uso de este aparato.

Instituciones como la Asociación Nacional de Protección contra Incendios (NFPA, por sus siglas en inglés) advirtieron sobre el uso responsable de electrodomésticos, recomendando desconectarlos si no están en uso y, especialmente, si la vivienda quedará deshabitada por largos períodos. Este consejo es aún más relevante en épocas vacacionales o cuando las personas pasan la mayor parte del día fuera de casa.

Aunque el microondas encabeza la lista de los aparatos que deberían desconectarse, no es el único que consume energía sin estar en uso. Televisores, cargadores de celular, cafeteras, computadoras y consolas de videojuegos también figuran entre los dispositivos que generan consumo fantasma. Por ello, recomiendan usar regletas con interruptor para poder desconectar varios aparatos al mismo tiempo sin dificultad.

Adicionalmente, revisar periódicamente el estado de los enchufes y cables de los electrodomésticos, avisa cualquier signo de sobrecalentamiento, chispas, olor a quemado o deterioro visible para que pueda ser atendido de inmediato por un técnico especializado. Ignorar estas señales puede resultar costoso, no solo en términos de reparación, sino también de seguridad.