Ciencia

Crece la preocupación científica tras la caída de un objeto en llamas del cielo: “Este es el mundo en el que estamos empezando a vivir”

La caída de un objeto en llamas en Australia ha encendido alertas sobre el aumento de basura espacial.

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20 de octubre de 2025, 9:03 p. m.
El hallazgo de un fragmento carbonizado elevó el debate sobre la responsabilidad global frente a desechos orbitales.
Restos humeantes en el desierto australiano reactivaron preocupaciones por reentradas no controladas desde el espacio. | Foto: Composición de SEMANA con imágenes de Western Australia Police Force/A.P.I.

Un trozo de material carbonizado, aún con signos de haber ardido recientemente, fue hallado el pasado sábado, 18 de octubre de 2025, en una zona remota del desierto de Pilbara, en Australia Occidental.

El objeto fue encontrado a unos 30 kilómetros al este de Newman por trabajadores de la minera BHP, lo cual desató una investigación interinstitucional para determinar su origen.

El fragmento, que permanecía humeante en una carretera de acceso limitado, fue revisado por la Policía de Australia Occidental, la Agencia Espacial Australiana y el Departamento de Bomberos y Servicios de Emergencia.

“Hay miles y miles de satélites en órbita en el cielo”

De acuerdo con el diario The Guardian, los análisis preliminares sugieren que el objeto está compuesto de fibra de carbono, material utilizado en piezas estructurales o depósitos presurizados de cohetes espaciales; sin embargo, la Oficina Australiana de Seguridad en el Transporte descartó que se trate de restos de aeronaves civiles.

La arqueóloga espacial Alice Gorman, de la Universidad de Flinders, vinculó el hallazgo con la cuarta etapa de un cohete Jielong lanzado por China a finales de septiembre.

Según declaró a ABC Radio Perth y The Guardian, dicha etapa habría permanecido en órbita durante semanas antes de precipitarse a la Tierra en una reentrada no controlada.

“No había indicios de que fuera a reentrar en este momento, por lo que la gente no se lo esperaba. Cuando fui a buscar predicciones de reentrada, no encontré nada, lo que indica lo repentino del suceso”, aseguró Gorman.

Las autoridades, sin embargo, no han atribuido oficialmente la pieza a un país específico. El superintendente de la Policía de Australia Occidental, Les Andrews, enfatizó que el caso sigue bajo análisis.

“Hay miles y miles de satélites en órbita en el cielo… Desde luego, no es algo que estemos teniendo en cuenta en lo que respecta al país de origen, porque hay muchos. No es realmente relevante”, explicó según ABC News.

“Este es el mundo en el que estamos empezando a vivir”

En julio de 2023, otro fragmento espacial, presuntamente proveniente de un cohete indio, fue encontrado en Green Head, al norte de Perth. Para Gorman, estos episodios son señales de una realidad preocupante con el incremento de la basura espacial y el riesgo de reentradas no controladas.

“Este es el mundo en el que estamos empezando a vivir, en el que tenemos que mirar al cielo y ser conscientes de lo que hay sobre nosotros”, advirtió la especialista en entrevista con ABC News.

Gorman argumentó que todos los países con capacidad de lanzamiento deberían desarrollar planes de fin de vida útil para sus naves espaciales, redirigiéndolas de forma controlada hacia zonas seguras como el Punto Nemo, en el Pacífico Sur.

Gorman afirmó que tanto la estructura como la fecha del hallazgo apuntan a una posible reentrada de un cohete lanzado por China.
La arqueóloga espacial Alice Gorman advirtió que el diseño del objeto encontrado coincide con un cohete Jielong de China. | Foto: Western Australia Police Force/A.P.I.

En su diálogo con The Guardian, insistió en que las reentradas no controladas deberían diseñarse para que los materiales se desintegren completamente al atravesar la atmósfera.

Sin embargo, explicó que muchos de estos componentes están fabricados con aleaciones resistentes, como titanio o acero inoxidable, y recubiertos con fibra de carbono, materiales que pueden sobrevivir a altas temperaturas y llegar hasta la superficie terrestre.

Por ahora, las autoridades australianas aseguran que el objeto hallado no representa una amenaza para la seguridad pública.

La Agencia Espacial Australiana ha pedido a la población evitar el contacto con cualquier posible desecho espacial, advirtiendo que podría contener sustancias tóxicas o presurizadas, y recomienda informar inmediatamente a los servicios de emergencia para su gestión segura.

*Con información de DW.