Tecnología
Cómo solucionar el problema de brillo cuando se usan dos monitores y uno se ve más oscuro
Un brillo desigual entre monitores puede ser incómodo, pero existen métodos para ajustarlo de forma manual o con software.


Para quienes trabajan con dos monitores, ya sea en tareas de edición, diseño o videoconferencias, lograr un brillo uniforme puede convertirse en un desafío.
En muchos casos, al modificar la iluminación desde el sistema operativo, solo se ajusta la pantalla principal, mientras que la secundaria conserva su configuración original, lo que puede generar fatiga visual y afectar la productividad.
Este problema es frecuente al conectar un monitor externo a una computadora portátil, ya que los sistemas operativos suelen permitir ajustes en las pantallas internas, pero las externas operan de manera independiente.
Por qué el brillo no se ajusta en ambas pantallas
Tener un nivel de brillo más alto en una pantalla puede resultar incómodo, ya que una iluminación excesiva puede provocar fatiga visual y dificultar la concentración.
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Sin embargo, en ciertos entornos, como exteriores o habitaciones con mucha luz natural, puede ser necesario aumentar la luminosidad en una pantalla para mejorar la visibilidad.
Ajustar cada monitor según las condiciones de iluminación del espacio es clave para garantizar una experiencia visual cómoda y evitar molestias en la vista.

Los monitores integrados en computadoras portátiles pueden controlarse mediante software, mientras que los externos generalmente dependen de sus propios controles físicos.
Esto significa que al cambiar la iluminación en Windows, la configuración solo afecta la pantalla del portátil, dejando el monitor adicional sin modificaciones.
Además, algunos sistemas operativos no ofrecen compatibilidad total para el ajuste de brillo en monitores externos, lo que obliga a realizar el cambio de manera manual. En estos casos, la mejor alternativa es utilizar los controles del propio monitor.
Cómo ajustar el brillo manualmente en monitores externos
Para corregir la diferencia de iluminación entre pantallas, se recomienda modificar el brillo directamente desde el monitor externo.
La mayoría de estos dispositivos cuentan con un menú de configuración accesible mediante botones físicos ubicados en la parte inferior o lateral.
Para ajustarlo, se deben seguir los siguientes pasos:
- Ubicar los botones de control en el monitor.
- Acceder al menú de configuración de imagen.
- Localizar la opción de brillo o luminancia.
- Utilizar los botones de navegación (+ y -) para aumentar o reducir la intensidad según las necesidades.
Realizando este ajuste manual, es posible equilibrar la iluminación de ambas pantallas, reduciendo molestias visuales y mejorando la experiencia de trabajo.

Para quienes buscan una solución más avanzada, existen herramientas de terceros que permiten sincronizar el brillo entre monitores, aunque su compatibilidad varía según el modelo, el sistema operativo y, en algunos casos, es recomendable revisar que no se trate de aplicaciones que puedan representar riesgos.
Contar con una configuración de pantalla adecuada es clave para evitar fatiga ocular y mejorar la eficiencia al trabajar con múltiples monitores. Siguiendo estas recomendaciones, es posible optimizar la experiencia visual y reducir las diferencias de iluminación entre dispositivos.