Científicos predicen que un volcán submarino tendría una alta probabilidad de erupción en 2025

Uno de los mayores desafíos para los científicos es la de prever actividades volcánicas, debido a la naturaleza impredecible de estos fenómenos, especialmente los ubicados bajo el mar. Sin embargo, un equipo de investigadores de la Universidad Estatal de Oregón, Estados Unidos, dieron a conocer un avance importante al predecir la erupción de un volcán submarino en el océano Pacífico en algún momento de 2025 o del próximo año.

Este fenómeno, además de ser un desafío para la ciencia, podría transformar la manera en que los científicos monitorean y analizan estos eventos. También tendría implicaciones importantes en el clima global, los ecosistemas marinos y las comunidades costeras cercanas, lo que motiva un seguimiento exhaustivo por parte de equipos de geólogos y vulcanólogos alrededor del mundo.

¿Cuál es el volcán submarino que podría erupcionar?

El volcán Axial Seamount, ubicado a más de un kilómetro de profundidad y a 470 kilómetros de la costa de Oregón, ha sido objeto, en más de diez años, de exhaustivas investigaciones. Ahora, el equipo de científicos, liderado por el geofísico William Chadwick, detectó algunas señales preocupantes que sugieren que el volcán podría entrar en erupción en algún momento de 2025.

Los datos obtenidos por los científicos muestran que la superficie de Axial Seamount está experimentando una hinchazón similar a la que precedió su última erupción en 2015, lo que indica que el magma se está acumulando en su interior. Este fenómeno podría ser una señal de que una nueva actividad volcánica está a punto de desencadenarse, lo que aumenta la necesidad de un monitoreo constante y detallado en la zona.

La innovadora red de sensores, instalados a más de mil metros de profundidad en el océano, han sido claves del éxito en la monitorización del volcán Axial Seamount. Estos dispositivos están diseñados para detectar incluso los movimientos más sutiles del volcán, proporcionando datos en tiempo real. Además, el volcán vigilado cuenta con un sistema que transmite constantemente información a través de un cable submarino, lo que permite una vigilancia continua.

Esta innovadora tecnología permitió identificar los primeros signos de actividad volcánica, dando a los científicos una ventaja única para predecir su posible erupción con mayor precisión. Y es que la monitorización constante de los volcanes submarinos es crucial no solo para comprender mejor su comportamiento, sino también porque ayuda a proteger a las comunidades cercanas.

La erupción del volcán Hunga Tonga en 2022 es un ejemplo claro de los devastadores efectos que estos fenómenos naturales pueden tener. Este evento provocó un tsunami que afectó a varios países y dejó pérdidas económicas millonarias. Los expertos resaltan que, gracias a los avances tecnológicos, las predicciones más precisas podrían evitar desastres similares, minimizando los riesgos y ayudando a tomar decisiones más informadas en cuanto a evacuaciones y medidas de seguridad.