Funcionarios del Dagma practicaron la necropsia al animal. Foto: Dagma
Jhon Alexander Posso, subdirector de calidad ambiental del Dagma manifestó que es prematuro dar un informe de las causas del fallecimiento de la babilla, por lo que una vez realizada la necropsia y analizados los resultados, la Autoridad ambiental informará a toda la comunidad caleña, lo que arroje el informe. "En estos momentos nuestros veterinarios del hogar de paso trabajan en ello", concluyó.
Sin bien no hay resultados concluyentes de lo que pudo haber sucedido, lo que sí es claro es que según indicaron los especialistas, en el estómago del animal encontraron una bolsa negra con popó de perro. Lo que se presume es que el propietario de la mascota no dispuso bien las las heces o las arrojó al lago y terminó en el estómago de la babilla.
Según la información dada a conocer por los especialistas del Dagma, esto puede generar una compactación en la que el animal no vuelva a consumir alimento porque, al no ser digerible, su estómago no es capaz de hacer pasar ese material al intestino, lo que hace que el animal entre en un ayuno muy prolongado.
Sin embargo, aclararon que, por ahora, no hay una información concluyente de lo que pudo haber causado la muerte de la babilla dado que los análisis de laboratorio practicados al cuerpo del animal, así como los resultados de los estudios físico químicos del agua del humedal podrían tardar entre 15 días y un mes para conocerse.
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Según Juan Carlos Moreno, coordinador del Grupo de Fauna del Dagma, al parecer el animal, de 1,3 metros de largo, llevaba un promedio de tres días de haber fallecido, dada su condición de putrefacción. Los funcionarios del Dagma precisaron que al ejemplar le hacía falta la cola y los dedos de uno de sus miembros, además de presentar lesiones en un costado. Aún no se ha determinado si esta situación se presentó después de morir.
Según el Dagma, durante todo el año, el humedal de la babilla, ha sido intervenido por el grupo de conservación de ecosistemas del Dagma, con acciones de mantenimiento como retiro de hojarasca, limpieza de senderos, de jardines, del desarenador, recolección de residuos sólidos y ejercicios de educación ambiental, ya que constantemente las personas visitan el lugar y en muchas ocasiones dejan material sólido, además de aprovechar la presencia de las babillas para hacerse fotos, tocarlos y darles comida.