Política

Precandidatos viajando en taxi y hasta con vehículos de protección varados: los riesgos de seguridad que no ha atendido la UNP

La entidad no ha respondido a tiempo sus solicitudes de acompañamiento en las regiones. Los políticos van al territorio sin la protección necesaria.

Juliana Gil Gutiérrez

Juliana Gil Gutiérrez

Periodista Semana

16 de junio de 2025, 10:41 a. m.
UNIDAD NACIONAL DE PROTECCIÓN
La Unidad Nacional de Protección entre ojos. | Foto: UNP

La falta de respuesta de la Unidad Nacional de Protección (UNP) a las solicitudes de acompañamiento que han presentado los precandidatos a la Presidencia tiene a los aspirantes a la Casa de Nariño andado en taxi, en vehículos prestados o hasta con los carros de sus esquemas de protección varados.

A Juan Manuel Galán, del Nuevo Liberalismo, la entidad no le aprobó la solicitud de acompañamiento que hizo para su viaje a Medellín del 29 y 30 de mayo, tampoco para su visita a Cali del día 23, ni para la que hizo a Pasto el 22 de este mes.

En Pasto, a uno de los integrantes del partido lo movilizó en su vehículo mientras una moto acompañaba el trayecto, pero para los candidatos tener un motorizado no es suficiente porque la verdadera protección está en hacer sus traslados en carros blindados.

Los esquemas de seguridad son asignados por la UNP según el nivel de riesgo que tiene cada personalidad política, de acuerdo a un análisis de riesgo que se actualiza cada semestre en el marco del Cenir, estudio a partir del cual se asignan esquemas, con uno o varios vehículos, y alrededor de cinco hombres de protección, entre policías y escoltas de la UNP.

Claudia López, por ejemplo, cuenta con el mismo esquema que le dejó la entidad tras dejar su cargo como alcaldesa de Bogotá, por lo que tiene una camioneta blindada para acompañar sus desplazamientos por la capital. El problema para la precandidata es que ese vehículo se ha varado en dos ocasiones este año, entonces, tuvo que dejarlo parqueado para utilizar otros medios de transporte particulares.

“Los esquemas no nos acompañan en región, solo nos mandan uno o dos policías para acompañarnos en el vehículo que nos movilicemos, que suele ser de un amigo o un taxi”, relató la senadora Paloma Valencia, quien aseguró que la UNP no le ha asignado acompañamiento para visitar ninguna región.

Juan Daniel Oviedo tuvo que coger taxi y pedir carros a través de una aplicación para movilizarse por Cartagena durante su visita al distrito para participar en el congreso de Asobancaria.

El exconcejal solicitó desde el pasado 11 de junio acompañamiento para sus viajes a Caquetá, Huila y Tolima programados para esta semana y, hasta el momento del cierre de este artículo, la entidad no le había respondido si le brindaría acompañamiento para su viaje de diez días, a pesar de que Oviedo ya tenía toda la agenda lista.

Miguel Uribe Turbay le envió 23 solicitudes a la UNP durante este año, pidiéndole protección para sus desplazamientos fuera de Bogotá. Días antes de ser víctima de un atentado, el senador también tuvo que tomar taxi en Cartagena porque por esas fechas había tantos protegidos de la UNP en la ciudad que la entidad no dio abasto.

A la senadora María Fernanda Cabal le han negado los viáticos y tiquetes para el traslado de su jefe de seguridad, también le han rechazado la solicitud de carro blindado porque le responden que no hay suficientes vehículos o que todos están copados por funcionarios del Gobierno.

Los esquemas de seguridad van más allá del lujo de una camioneta cuyo combustible es pagado por el Estado, pues esos vehículos tienen blindajes certificados que pueden proteger a las figuras públicas de disparos, ataques con armas contundentes y hasta facilitar la huida en un atentado.

Incluso, un escolta relató que cuando se trata de figuras con alta exposición mediática, es necesario contar con más de una camioneta blindada porque la seguridad de estas personas depende de que sus guardas también estén protegidos. En otros términos: de nada sirve que uno de los carros no esté blindado porque su esquema podía ser blanco de un disparo.

 El director de la Unidad Nacional de Protección, Augusto Rodríguez, le dijo a SEMANA que es un gran amigo del presidente y lo blinda de posibles hechos de corrupción a su alrededor. Lo conoce desde hace más de 20 años.
El director de la Unidad Nacional de Protección, Augusto Rodríguez. | Foto: juan carlos sierra-semana

Estas preocupaciones por la seguridad se acentuaron después del atentado del que fue víctima Uribe Turbay, quien fue atacado mientras esperaba que la entidad le reforzara su esquema, porque pasó de ser solo senador a asumir el rol de precandidato a la Presidencia.

SEMANA le preguntó a la UNP sobre las medidas de protección que se le están asignando a los precandidatos, pero hasta el cierre de esta edición la entidad no ha respondido el cuestionario enviado por la revista. Lo claro es que la entidad prometió reforzar la seguridad de los aspirantes a la Casa de Nariño tras el crimen contra Uribe Turbay.