Política
Las ausencias de Miguel Polo Polo a la Comisión Primera de la Cámara: “Lo raro es que vaya”
SEMANA documentó las inasistencias del congresista a la Comisión Primera de la Cámara, recinto al que pertenece y por el que se tramitan los proyectos de mayor relevancia constitucional del país.


El representante a la Cámara por la curul afrodescendiente, Miguel Polo Polo, ha brillado por su ausencia en la Comisión Primera de la Cámara de Representantes, la corporación que analiza los temas de mayor envergadura constitucional del país como el proyecto sobre el marco jurídico para la paz total y a la que él pertenece en representación de las minorías.
Sus inasistencias al recinto ya se cuentan por decenas en lo que va de este Congreso, y en varias ocasiones, aunque responde al llamado a lista, se abstiene de votar en debates clave para la agenda nacional, como ocurrió esta semana con la regularización del cannabis de uso adulto, donde su voto brilló por su ausencia.
Sin ir muy lejos, su asiento estuvo vacío en la fecha más importante de esta legislatura, el pasado 29 de junio, cuando se definió el nombre del presidente de esa corporación. Los postulados para ese rol eran Gabriel Becerra, del Pacto Histórico, y Carlos Ardila, un liberal alineado con el Gobierno que logró convencer a la oposición, pero que no quedó elegido por la falta del único congresista que no se presentó: Polo Polo.
Los datos que reposan en los archivos de la Cámara dan cuenta de que año a año el representante ha incrementado sus ausencias. En la primera legislatura, comprendida entre 2022 y 2023, presentó cuatro excusas para ausentarse de las citaciones en la Comisión Primera. Luego, entre 2023 y 2024, esa estadística llegó hasta 17 y durante la tercera legislatura se documentaron 15 más.

La Ley Quinta del Congreso establece que las únicas inasistencias que podrían dar pérdida de investidura son las que corresponden a faltas injustificadas a la plenaria. Sin embargo, no deja de causar interrogantes que las faltas a las comisiones sean el común denominador de congresistas como Polo Polo, quienes resultan adjuntando excusas médicas con periodicidad para argumentar por qué no fueron a trabajar.
El representante se defendió y le respondió a SEMANA que en varias ocasiones presentó “excusas médicas y para atender compromisos legales. Recuerden que me ha tocado defenderme de 14 demandas infundadas en el Consejo de Estado y en la Corte Suprema de Justicia, me ha tocado instaurar ante la Fiscalía 18 denuncias y hacer las respectivas ampliaciones por amenazas que pudieron coincidir con las sesiones”.
Apenas va un mes laboral de esta cuarta legislatura y el representante ya se ha ausentado en dos ocasiones de la Comisión, un dato relevante si se tiene en cuenta que esas células legislativas solo sesionan entre uno y dos días de la semana.
Sus compañeros relatan, fuera de micrófonos, que es frecuente que asista solo para el llamado a lista y se ausente instantes después, cuando los proyectos se debaten y se votan. El representante responde que esta dinámica no es un “capricho” suyo, sino que debe retirarse “para atender esas obligaciones, y no es un incumplimiento, es parte del ejercicio del cargo. Si no puedo estar en todas las votaciones, es porque estoy cumpliendo otras responsabilidades inherentes a mi rol como congresista”.

En la última semana de julio, Polo Polo aseguró que había sido hospitalizado por posibles problemas cardíacos. SEMANA pudo constatar por medio de un derecho de petición enviado a la Secretaría de la Comisión Primera que, a la fecha, él solo radicó excusas médicas para las dos inasistencias que coinciden, justamente, con la votación de la Mesa Directiva de la corporación en la que su asiento fue el único vacío.
Polo Polo señala que no quiere quedarse “pupitreando” proyectos en su escaño de la Comisión Primera y sostiene que sus criterios para elegir qué articulados votar y en cuáles no aparecer ni para la discusión, son políticos y programáticos.
“Cuando un proyecto no tiene futuro, que ya hay mayorías claras o que no representa los intereses de la gente que me eligió, priorizo mi tiempo en otros espacios. La Ley me da libertad para decidir cómo ejercer mi voto y mi presencia”. Lo cierto es que el ejercicio de la política le ha causado reiteradas ausencias, como cuando en diciembre de 2022 aseguró que los “disparates de la izquierda” le habían subido la presión arterial.