El jefe de las disidencias de las Farc, Calarcá Córdoba, habló con SEMANA; negó que sus hombres hayan dado de baja a Iván Mordisco

Calarcá Córdoba, el jefe de una de las disidencias de las Farc, habló con SEMANA este domingo 1 de junio y negó el comunicado de prensa que circuló en redes sociales en el cual, supuestamente, su grupo armado informaba que había dado de baja a Iván Mordisco, con quien él libra una fuerte disputa territorial e ideológica.

Córdoba le dijo a este medio que no entiende de dónde salió la información y no sabe quién produjo esa noticia y con qué intención. “Desmentimos esa versión. Es falso”, manifestó tajantemente.

“Los revolucionarios jamás nos alegramos por la muerte de otra persona, independientemente de las contradicciones ideológicas. El comunicado que firman a nuestro nombre (Estado Mayor Bloque Comandante Jorge Suárez Briseño) no puede ser más falso”, informó.

“Solo al leer el comunicado se notan las intenciones ocultas que hay en él, puesto que no es nuestra costumbre ni cultura estar vanagloriándonos ni hacer protagonismo con cosas que no son coherentes con nuestro ser revolucionario”, añadió.

Antes de que Calarcá Córdoba negara la versión sobre Iván Mordisco, los propios negociadores de paz de Gustavo Petro confirmaron que se trataba de un documento falso y que no se había logrado establecer, como lo dice el documento, que Mordisco estuviera muerto.

Camilo González Posso, jefe negociador del Gobierno con las disidencias de Calarcá, aseguró que lo descrito en ese supuesto comunicado era falso y que los mismos integrantes de las disidencias de las Farc precisaron que se trata de una información manipulada y con membrete de la organización.

La información falsa surgió, entre otras cosas, porque no son secretas las diferencias ideológicas que existen entre Calarcá Córdoba e Iván Mordisco.

A los dos los unió el rechazo a los acuerdos de paz de Juan Manuel Santos y las Farc en La Habana y, por eso, regresaron a las armas tras la firma de las negociaciones.

También estuvieron bajo la sombrilla o el mando de Gentil Duarte, pero, tras su muerte en límites entre Colombia y Venezuela en mayo de 2022, las cosas cambiaron.

Ambos hicieron parte de las negociaciones de paz con el Gobierno de Gustavo Petro, pero Mordisco, sorpresivamente, se distanció de sus compañeros, los declaró enemigos, se escondió en las profundidades del Cauca y emprendió una guerra frontal contra el Estado.

Hoy, Calarcá y Mordisco van por distinto camino.

“Lo de Iván Mordisco, por la forma como él nos la puso, no se define en medio del diálogo con él. Dejó claro, a través de unos documentos, que éramos sus enemigos. El daño que nos ha hecho Iván, políticamente, es muy grande; el daño que les ha hecho a esas familias, líderes y campesinos que ha matado es inmenso. No voy a decir que Iván es paramilitar, dice ser guerrillero, respetable, pero un guerrillero con un pasado muy negro. Ha causado un daño muy grande a esas familias, porque ha hecho matar a muchos guerrilleros enfrentándose con nosotros. De todos esos grupos que enfrentamos, alguno tiene que desaparecer. Vamos a ver quién es”, le dijo Calarcá a SEMANA hace un par de semanas desde las profundidades del Guaviare.