POLÍTICA
El 2025 marca el inicio de la campaña. Los precandidatos que buscan reemplazar a Petro en el 2026 afrontarán un año decisivo
Este año se inicia la carrera por la Casa de Nariño. Habrá renuncias de ministros, coaliciones y estrategias en cada corriente política. Se vienen procesos internos en diferentes colectividades que buscarán definir las posibles consultas interpartidistas.
El 2025 marca en el calendario el punto de partida de lo que será la larga campaña por la presidencia en 2026. En marzo próximo se darán a conocer las reglas de juego para los comicios del siguiente año, en los que se elegirá, en primer lugar, al nuevo Congreso y luego al presidente de la república.
Después de que el próximo 25 de mayo comience la inscripción de cédulas de los colombianos que quieran ejercer el derecho al voto o modificar su lugar de residencia, también empezará la recolección de firmas de los candidatos presidenciales que quieran presentarse a nombre de un grupo representativo de ciudadanos. En ese momento, varios candidatos independientes destaparán sus aspiraciones.
Asimismo, comenzarán a organizarse las posibles consultas internas o las encuestas de los partidos para definir a sus candidatos únicos.
Por el lado del Centro Democrático, desde el año pasado se presentaron los precandidatos Miguel Uribe Turbay, Paloma Valencia, María Fernanda Cabal, Paola Holguín y Andrés Guerra. Ellos dieron inicio a una serie de actividades regionales llamadas Foros por el Futuro de Colombia, con la participación del expresidente Álvaro Uribe. El objetivo es recorrer los 32 departamentos, donde los precandidatos podrán exponer sus propuestas ante simpatizantes.
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El Pacto Histórico hace lo propio. La colectividad del presidente Gustavo Petro logró unir a los partidos Colombia Humana, Polo Democrático, Unión Patriótica y a una escisión del Mais para convertirse en un movimiento con una sola personería jurídica.
A diferencia del Centro Democrático, el petrismo reunió de forma irreversible al grueso de la izquierda en sus toldas, lo que evita la atomización de los votantes. Eso sí, personifica aún más el proyecto, cuyo dueño es el presidente Petro.
El nuevo Pacto, en el primer trimestre del año, realizará una asamblea en la que se acordará que los partidos se mantengan siendo tendencias a fin de respetar los matices de cada una de las fuerzas. Ahí establecerán una mesa directiva, órganos de decisión y control, que regirán en todo el movimiento. Y decidieron escoger al candidato presidencial mediante consultas abiertas en todo el país, así como el orden en el que se conformarán las listas al Congreso. Esperan que ese proceso se pueda llevar a cabo a finales de 2025.
Entre los posibles precandidatos están Gustavo Bolívar, María José Pizarro, Luis Gilberto Murillo, Susana Muhamad, Iván Cepeda y Carolina Corcho. Esto claramente significará una renuncia de funcionarios clave del Gobierno. Otros buscarán una curul en el Congreso. Luego vendrá la etapa del llamado Frente Amplio, con el que buscarán medirse con candidatos de otras fuerzas políticas en una consulta interpartidista. Ahí podrían ubicarse nombres como Roy Barreras, Juan Fernando Cristo, Carlos Caicedo y Daniel Quintero.
Los tradicionales, a la espera
Los partidos Liberal, Conservador y La U aguardan mientras el resto de las fuerzas se organizan. Existen propuestas sobre la mesa en torno a una alianza entre las tres colectividades de cara a 2026. Comienzan a sonar precandidatos como Alfredo Deluque y los liberales Mauricio Gómez Amín y Héctor Olimpo Espinosa, pero es más probable que escojan a una figura externa. En conjunto podrían elegir, por medio de mecanismos democráticos, a un candidato fuerte y con opciones a fin de que la centroderecha llegue unida a los comicios.
Por otro lado, Cambio Radical espera la decisión de Germán Vargas Lleras, quien parece estar listo para lanzarse en esta contienda. Se encuentra recorriendo el país, cada vez está más activo en redes sociales y es uno de los rivales políticos que el presidente Petro escogió en X para debatir.
La alternativa es David Luna, un senador respetado que también podría medirse, pero no marca en las encuestas, mientras que su jefe político sí registra en algunas de ellas.
¿Y el centro?
En el centro está el Nuevo Liberalismo, una parte de la Alianza Verde y Dignidad y Compromiso. Sergio Fajardo y Juan Manuel Galán han tenido hasta ahora un buen desempeño en las primeras encuestas de intención de voto.
Claudia López, quien no forma parte de la Alianza Verde, pretende desmarcarse de Petro, pero ha sido difícil. Cada vez que cuestiona al presidente, se le recuerda que votó por él de forma entusiasta e incluso dijo que volvería a hacerlo.
Por su parte, Alejandro Gaviria es otra rueda suelta que no tiene partido. Su relación con los demás líderes se quebró en las elecciones de 2022, cuando se unieron en la fracasada Coalición Centro Esperanza.
El reto del centro es unirse y no canibalizar sus propios votos, pero lo más seguro es que existan dificultades para lograrlo.
Así juegan los independientes
Existen varios posibles candidatos independientes que prometen patear el tablero. La principal es la periodista Vicky Dávila, a quien ya se le reconoce como la outsider en la contienda. Junto con Fajardo lidera varias encuestas y anunció recientemente que presentará a su equipo de asesores económicos. “Serán personas idóneas, alejadas de la politiquería y no son obedientes a los gremios”.
Otro precandidato es el general (r) Eduardo Enrique Zapateiro. Él lanzó un movimiento independiente que podría ser la plataforma de su aspiración.
En la lista también está Juan Daniel Oviedo, excandidato a la Alcaldía de Bogotá y concejal por haber obtenido el segundo puesto en la votación. Confirmó que aspirará y seguramente lo hará a través de la recolección de firmas, como lo hizo en la capital del país.
Los posibles candidatos tendrán todo el año para decidir si se inscriben o no, hasta febrero de 2026, cuando la Registraduría podría cerrar esta etapa del proceso. La propaganda electoral y en medios de comunicación empezará poco después.
Esto deja un amplio abanico de posibilidades en cada una de las fuerzas políticas e ideológicas, aunque ya existen algunos favoritos que en las encuestas comienzan a marcar diferencia.
La ciudadanía sabrá pronto si será una batalla entre mujeres, entre derecha e izquierda, entre derecha o centro o entre centro e izquierda. O tal vez si las personalidades y las propuestas concretas pesarán más que las ideologías.