JUSTICIA

Gustavo Petro sí sabía: SEMANA revela la declaración de Luis Carlos Reyes sobre cómo alertó al presidente de la compra de congresistas

SEMANA revela la declaración de Luis Carlos Reyes, exministro y exdirector de la Dian, ante la Corte Suprema y la Fiscalía. Meses antes de que estallara el escándalo por el saqueo a la UNGRD, le contó al presidente Gustavo Petro que el entonces ministro Ricardo Bonilla estaba repartiendo cupos indicativos para torcer a los congresistas.

29 de marzo de 2025, 6:10 a. m.
ED 2229
Luis Carlos Reyes, Gustavo Petro y Ricardo Bonilla. | Foto: SEMANA

Esta semana, Luis Carlos Reyes, exdirector de la Dian y exministro de Comercio, declaró en versión libre ante la Corte Suprema de Justicia y la Fiscalía sobre el escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Las declaraciones de Reyes han puesto contra las cuerdas a congresistas, políticos, funcionarios del Gobierno y, ahora, a su exjefe: el presidente Gustavo Petro.

El pasado martes 25 de marzo, Reyes estuvo en el Palacio de Justicia rindiendo versión ante el despacho del magistrado Misael Rodríguez, encargado de investigar a los congresistas de la Comisión de Crédito Público que se habrían beneficiado con contratos de la UNGRD por más de 92.000 millones de pesos a cambio de aprobar los empréstitos con la banca internacional que el entonces ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, estaba buscando para financiar las necesidades del Estado. Al día siguiente, Reyes hizo lo propio en la Fiscalía, donde declaró en los procesos contra los funcionarios involucrados que no tienen fuero. Allí soltó la bomba.

En su relato, Reyes se centró en un hecho grave: el presidente Petro sabía que, desde el Ministerio de Hacienda, liderado por Bonilla, se habría estado utilizando la conocida mermelada para comprar congresistas a cambio de sus votos a fin de aprobar las reformas e iniciativas del Gobierno en el Congreso.

Todo comenzó cuando, según Reyes, el presidente Petro lo designó como director de la Dian. Desde ese momento, empezaron los mensajes de políticos, congresistas y funcionarios recomendándole hojas de vida para puestos clave en la entidad. Él se negó a esas pretensiones burocráticas.

Luis Carlos Reyes confirmó en la Corte y en la Fiscalía que, desde 2023, Petro sabía de las denuncias sobre cupos indicativos en el Ministerio de Hacienda.
Luis Carlos Reyes confirmó en la Corte y en la Fiscalía que, desde 2023, Petro sabía de las denuncias sobre cupos indicativos en el Ministerio de Hacienda. | Foto: guillermo torres-semana

Reyes le contó a la Corte y a la Fiscalía que el 18 de diciembre de 2023, ya con el Gobierno en marcha, Petro convocó a una sesión de planeación estratégica con todos sus ministros y directores de departamentos administrativos en la Escuela de Ingenieros Militares, en Bogotá. Por esa época estaba en furor el escándalo del exsenador Mario Castaño, relacionado con su red corrupta de contratación en diferentes entidades, y habían capturado al congresista Ciro Ramírez por concierto para delinquir, cohecho e interés indebido en la celebración de contratos.

En esa sesión, según el testimonio de Reyes, conocido por SEMANA, Petro les advirtió que en su Gobierno no se iban a permitir los famosos cupos indicativos para comprar la conciencia de los congresistas. Reyes, con la misma contundencia con la que está delatando a sus excompañeros de gabinete y congresistas ante la Justicia, advirtió lo que hoy es un escándalo y del cual Petro ha pretendido marginarse.

“Presidente, en el Ministerio de Hacienda se siguen haciendo las cosas como en Gobiernos anteriores. Lo siguen haciendo las mismas personas como Andrea Ramírez, ella sigue repartiendo esos cupos”, contó Reyes en la Corte y la Fiscalía acerca de lo que le dijo al presidente ese día delante del gabinete.

| Foto: Suministrada a Semana A.P.I.

Andrea Ramírez era la asesora y mano derecha del entonces ministro Bonilla. Ramírez, en medio del escándalo, salió de licencia de maternidad dejando la responsabilidad de la repartición de contratos o cupos indicativos a María Alejandra Benavides, testigo clave en este escándalo.

La denuncia de Reyes en plena sesión de ministros desató la reacción de la entonces consejera presidencial para las regiones, Sandra Ortiz, detenida por el escándalo de la UNGRD. De esa entidad habrían salido 4.000 millones de pesos con los que, supuestamente, torcieron al entonces presidente del Senado, Iván Name (le habrían dado 3.000 millones de pesos) y al presidente de la Cámara en ese momento, Andrés Calle (habría recibido 1.000 millones de pesos).

Serían tan evidentes las nulas decisiones que tomó Petro frente a esa grave situación que hasta diciembre de 2024, es decir, un año después de que conoció la denuncia de Reyes, le pidió a Bonilla que dejara su cargo. Y aclaró: “No porque crea que es culpable, sino porque lo quieren despedazar por ser leal al programa de gobierno”.

Petro se indignó cuando escuchó la denuncia de Reyes en diciembre de 2023 durante una sesión del consejo de ministros.
Petro se indignó cuando escuchó la denuncia de Reyes en diciembre de 2023 durante una sesión del consejo de ministros. | Foto: Presidencia

Sin embargo, su posición fue completamente diferente con la salida de Reyes, pues el denunciante terminó relegado del Gobierno y hasta cuestionado por el propio Petro. “Tengo dudas”, dijo en su cuenta de X cuando salió a aclarar que fue él quien le pidió la renuncia como director de la Dian. Sebastián Erazo, abogado de Reyes, aseguró que el mandatario “pretende minimizar” las denuncias que conoció desde finales de 2023.

Pero para las verdades están los hechos. En las dos declaraciones, Reyes contó de movimientos presupuestales gigantescos que explican no solo el saqueo a la UNGRD, motivo por el que fue citado en la investigación contra los congresistas en la Corte, sino que ratificarían que el exministro Bonilla, aunque lo niegue, sí dio la venia para asignar recursos y comprar respaldos en el Congreso.

En el proyecto de adición presupuestal que se discutió en junio de 2023, varios congresistas radicaron una proposición que terminó con el traslado de 200.000 millones de pesos de la Dian a la UNGRD, la misma entidad que fue saqueada durante la administración de Olmedo López y Sneyder Pinilla. En ese documento aparecen las firmas de varios congresistas salpicados en los recomendados de la Dian, como el presidente del Senado, Efraín Cepeda, Juan Carlos Garcés, Liliana Bitar y Jairo Castellanos, entre otros.

Ricardo Bonilla guardó silencio cuando el presidente le pidió explicaciones a partir de las denuncias de Reyes.
Ricardo Bonilla guardó silencio cuando el presidente le pidió explicaciones a partir de las denuncias de Reyes. | Foto: juan carlos sierra-semana

Sobre ese último congresista, el exdirector Reyes ha denunciado que a sus enlaces en el Congreso los habría intimidado con una frase contundente: “Se les cayeron 200.000 millones de pesos de la cartera”. Reyes sintió que el traslado de ese dinero habría sido una retaliación por no nombrar a los recomendados. Por eso, lo que se debía invertir en fortalecer la administración tributaria, un compromiso de Colombia ante la Ocde, terminó en corrupción.

El testimonio de Reyes en la Corte Suprema y en la Fiscalía es demoledor y derrumbaría los intentos del presidente Petro por marginarse de estos escándalos. Por el contrario, surgen dudas sobre qué medidas tomó para impedir el robo del erario.

Lo que prueba el testimonio de Reyes es que Petro, tan crítico de los cupos indicativos en los Gobiernos pasados, recibió una alerta de lo que estaba ocurriendo en su administración. Incluso, todo se dio meses antes de que estallara el escándalo de corrupción de la UNGRD gracias a las denuncias de los medios de comunicación. ¿Qué hizo Petro luego de oír el reporte detallado de Reyes, en ese momento director de la Dian?

Los cupos indicativos también habrían permeado al Invías, según María Alejandra Benavides, la exasesora del minhacienda, quien reemplazó a Andrea Ramírez durante su licencia de maternidad. Hoy en día, por lo menos 28 congresistas están implicados en otro entramado de corrupción con la contratación de esa entidad.

Y no solo se trata de una posible compra de votos, sino de las tajadas que habrían obtenido los congresistas al recibir, a nombre propio, cada uno de sus contratos.