SANTANDER
Así fue la trágica muerte de Diego Expedito Moreno, hombre cuya tumba fue profanada por una mujer en Santander
Una mujer fue grabada mientras profanaba la tumba del joven en el municipio de Landázuri.
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En las últimas horas se viralizó en redes sociales un video en el que se aprecia a una mujer profanando una tumba del cementerio Sagrado Corazón del municipio de Landázuri, Santander.
En el video, que este medio se abstiene de publicar, se puede observar que la mujer destruyó una placa de cemento de la bóveda y luego sacó el ataúd. Posteriormente, puso una vela encima del féretro, mientras le decía al sepulturero, quien la sorprendió profanando dicha tumba, que iba a bañar y cambiar de ropa al hombre fallecido.
En cuanto a la identidad del hombre cuya tumba fue profanada, se estableció que se trata de Diego Expedito Moreno, joven que tenía 19 años al momento de su muerte tras haber sido atacado con un arma blanca, en hechos ocurridos el 24 de julio de 2025 en el parque principal del municipio de Cimitarra.
De acuerdo con información del medio regional Varguardia, ese 24 de julio, gravemente herido, al hombre lo alcanzaron a trasladar hasta un centro hospitalario pero, debido a la gravedad de la herida a la altura del tórax, falleció.
“Testigos señalaron que el presunto responsable sería un hombre conocido como ‘Jeferson’, de 24 años”, aseguraron desde el medio regional citado anteriormente.
“Yo quería verlo y así lo decidí”
La tumba de Diego Expedito Moreno fue profanada el pasado miércoles 22 de octubre en horas de la mañana. Ese día, el sepulturero llegó al lugar y, tras hallar la terrorífica escena, sacó su celular y empezó a grabar.
“Mamita, ¿usted por qué hizo eso?”, le empezó diciendo el sepulturero a la mujer, mientras ella le respondía: “A mí no me importa, así me cueste la vida. Yo quería verlo y así lo decidí”.

Transcurridos unos segundos, la mujer bastante alterada, le manifestó al sepulturero: “Ayúdeme a bañarlo. ¿Me puede ayudar?”.
Mientras tanto, el sepulturero le indicaba que ella no debió haber profanado esa tumba, recalcándole que eso era un delito.



