Bogotá

Tras intensas lluvias en Bogotá, así están los niveles de los embalses a corte de este lunes 10 de marzo

Las cifras siguen siendo alarmantes, lo que pone en duda la recuperación total de los sistemas hídricos que abastecen a la ciudad.

11 de marzo de 2025, 1:00 a. m.
Embalse de Chuza, del sistema Chingaza
Los niveles de los embalses siguen mostrando una tendencia a la baja. (Imagen de referencia). | Foto: Acueducto de Bogotá

Tras intensas lluvias registradas en Bogotá en los últimos días, las autoridades han proporcionado un informe detallado sobre los niveles de los embalses que abastecen a la capital colombiana y sus alrededores.

Sin embargo, a pesar de las precipitaciones recientes, la situación sigue siendo preocupante, ya que los niveles de los embalses continúan estando lejos de los niveles ideales para garantizar el abastecimiento de agua de manera constante y sin restricciones.

Desde hace casi un año, Bogotá y municipios aledaños se encuentran bajo un régimen de racionamiento de agua debido a la disminución crítica de los niveles en los embalses.

A pesar de las lluvias que han caído en la región en las últimas semanas, las cifras siguen siendo alarmantes, lo que pone en duda la recuperación total de los sistemas hídricos que abastecen a la ciudad.

Según el último reporte emitido por la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) este lunes 10 de marzo, los niveles de los embalses siguen mostrando una tendencia a la baja, lo que agrava aún más la situación.

El embalse del Sisga está a 45 por ciento de su capacidad.
Los sistemas de embalses de la sabana de Bogotá y la cuenca de la laguna de Fúquene siguen en monitoreo. (Imagen de referencia). | Foto: Nicolás Acevedo Ortiz

En particular, el sistema Chingaza, que es el mayor proveedor de agua para la capital, se encuentra apenas al 38,64 % de su capacidad total, con una tendencia a disminuir. Este sistema incluye el embalse de Chuza, que está en un 31,95 %, y el embalse de San Rafael, que alcanza un 60,40 % de su capacidad.

Por otro lado, el sistema de agregados Norte, que incluye los embalses de Neusa, Sisga y Tominé, tiene una capacidad total del 48,44 %, también con una tendencia descendente. En este sistema, el embalse de Neusa se encuentra en un 79,65 %, lo que es relativamente alto en comparación con los demás, pero los embalses de Sisga y Tominé se encuentran en niveles más bajos, con 59,32 % y 42,38 %, respectivamente.

El agregado Sur, que abastece principalmente a la localidad de Usme, presenta una situación algo más estable, con los embalses de El Hato al 85,14 % y el sistema de Usme al 87,45 %. Estos niveles son más altos que los de otras zonas de la ciudad, lo que representa una ligera mejora frente a la crítica situación de otras fuentes de agua.

La información revelada por la CAR resalta la fragilidad del sistema hídrico de la ciudad y la importancia de tomar medidas urgentes para evitar una crisis mayor. Aunque las lluvias recientes podrían haber ofrecido un alivio temporal, los niveles de los embalses siguen siendo bajos en comparación con las necesidades de la población bogotana y sus municipios aledaños.

El racionamiento de agua sigue siendo una medida necesaria para garantizar el suministro en los hogares, empresas y otros sectores de la ciudad. Las autoridades locales y regionales hacen un llamado a la ciudadanía a seguir con prácticas de ahorro y uso eficiente del agua, a fin de mitigar la presión sobre los embalses y contribuir a la conservación de este recurso vital.