Bogotá
Quién es el empresario que le pegó una bofetada a una viajera en Bogotá
Héctor Favio Santacruz Marulanda no se ha pronunciado; su esposa dio la cara y ofreció excusas en su nombre.

Gran polémica ha generado el hecho de que el empresario Héctor Favio Santacruz Marulanda agrediera con una bofetada a una mujer que no conocía, aparentemente porque se sentó en una silla en la que él estaba, en hechos ocurridos en el aeropuerto El Dorado, en Bogotá, el 27 de julio pasado.
Las imágenes rápidamente se viralizaron en redes sociales y fue su esposa, Karen de Santacruz, quien salió a dar la cara. Ella publicó un video dando cuenta de lo apenada que está por el proceder de su esposo, mientras que su compañía publicó un comunicado condenando los hechos.
Santacruz Marulanda, por su parte, permanece en silencio. Nació en Armenia y su actividad empresarial en el sector calzado y textil la ejerce en Bogotá y Cali. Es administrador de empresas de la Universidad del Valle (2006-2011) y tiene una maestría en finanzas cuantitativas en la Universidad Icesi (2015-2017), ambas en Cali.
Ha ejercido como gerente bancario y directivo en marketing de otras compañías. Ha sido “gerente de oficina”, “gerente costumer marketing”, entre otros cargos directivos que públicamente ha referenciado en plataformas digitales de empleo.
Este es el video de la agresión:
Acciones legales por agresión de un hombre a una mujer en una de las salas de espera del aeropuerto El Dorado en Bogotá pic.twitter.com/hvQwWYxB1M
— Luchovoltio (@luchovoltios) July 30, 2025
Karen de Santacruz, su esposa, afirmó: “Seguramente ya viste el video y sí, la persona que aparece agrediendo físicamente a una mujer es mi esposo. No saben cuánto me duele decir esto en voz alta. Y realmente me duele como mujer, como mamá, como fundadora de Khala, porque todo esto va en contra de lo que queremos, de lo que hemos venido trabajando durante muchos años. Y aunque no fue dentro de la empresa ni en actividades internas, hay un vínculo. Hay personas que lo han relacionado con nuestra marca y por eso estoy aquí”.
“Y sé que cuando pasan cosas así es fácil señalar, opinar y cancelar, pero también sé que muchos en algún momento de nuestra vida nos hemos equivocado. Pero, como dice ese viejo refrán, el que esté libre de pecado que tire la primera piedra. Esto no quiere decir que está bien, porque no lo está. No, no lo justifico, no lo apruebo y no me quedo callada”, agregó la esposa del agresor.
“Lo rechazo desde lo más profundo porque creo en la dignidad, en el límite y en el respeto. Él asumirá las consecuencias de lo que hizo porque toda acción tiene consecuencias, pero hoy yo también estoy aquí asumiendo lo que me toca como mujer, como esposa, como mamá y como dueña de esta marca”, acentuó, sin explicar cómo asumirá las consecuencias de la bofetada propinada a la mujer.
“Pero vamos a seguir aquí con errores, con aprendizajes, con las manos limpias y con el corazón de frente. Gracias por escucharnos, por exigirnos más y gracias por no ser indiferentes”, puntualizó.
La marca, a su vez, se pronunció. Y también lo hizo el Instituto Distrital de Turismo, en Bogotá. Aquí, ambos pronunciamientos íntegros:
Khala Colombia
Comunicado oficial
La coherencia también se demuestra en los momentos más difíciles.
En los últimos días, ha circulado en redes sociales un video que muestra un acto de violencia protagonizado por una persona cercana a una de las fundadoras de nuestra marca.
No vamos a ocultarlo. No vamos a esquivarlo. Sí, es un hecho real. Y como equipo, como mujeres, y como marca, nos duele profundamente.
Khala nació del trabajo, la sensibilidad y la fuerza de mujeres que creen en el respeto como principio innegociable. Por eso, frente a esta situación, queremos hablar con la misma claridad con la que trabajamos cada día:
Rechazamos categóricamente cualquier forma de violencia. Este hecho no representa nuestros valores ni la esencia con la que construimos cada paso de esta historia.
Sabemos que el hecho no ocurrió en un entorno empresarial, pero también reconocemos que existe un vínculo que ha llevado a asociar lo sucedido con nuestra marca. Y no vamos a guardar silencio ante eso. Callar no es una opción cuando se trata de integridad. Él va a asumir las consecuencias de sus actos. Y nosotras, desde nuestro lugar, asumimos también el deber de ser coherentes con lo que creemos y defendemos.
Como seres humanos, sabemos que los errores existen. Algunos duelen más que otros. Algunos incluso dejan huellas que tardan en sanar. Pero enfrentarlos con verdad y humildad también hace parte de la responsabilidad que tenemos cuando construimos una marca con propósito.
A quienes han expresado su opinión desde el respeto, gracias. Gracias por exigirnos más. Gracias por recordarnos que la empatía también se ejerce en los momentos incómodos.
Hoy reafirmamos nuestro compromiso: seguir construyendo una marca coherente, humana y profundamente conectada con los valores que la inspiraron desde el principio.
Oficina de Turismo de Bogotá
Desde la Oficina de Turismo de Bogotá rechazamos de manera tajante la agresión cometida por un turista contra una mujer en el Aeropuerto Internacional El Dorado. Este hecho de violencia física y simbólica no solo vulnera los derechos de una ciudadana, sino que atenta contra los principios fundamentales de nuestra ciudad: el respeto, la equidad y la garantía plena de los derechos de las mujeres.
Bogotá es una ciudad que avanza decidida hacia la erradicación de todas las formas de violencia basada en género. Este acto no representa los valores de quienes habitamos la ciudad, ni de quienes trabajamos día a día para que el turismo sea una fuerza transformadora, incluyente y respetuosa. En Bogotá, quien viene como turista debe respetar nuestras leyes y nuestra cultura ciudadana. Aquí, el machismo no tiene cabida y no se disfraza de malentendido.
Lo más grave es que este caso, además de la violencia en sí, ha evidenciado serias fallas en la atención a la víctima. Según ha denunciado su defensa, en el Aeropuerto no se activaron protocolos básicos como el contacto con la Línea Púrpura, lo que impidió garantizar la presencia de autoridades competentes, como la Secretaría de la Mujer, para brindar el acompañamiento psicosocial requerido. La víctima fue incluso trasladada en el mismo vehículo que el agresor, lo que constituye una revictimización inaceptable.
Lo ocurrido no es un caso aislado, es un síntoma de algo que debemos erradicar desde todos los sectores, incluido el turismo. Bogotá debe ser un lugar seguro para todas las mujeres, y no vamos a tolerar ni una agresión más”, afirmó Katherine Eslava, subdirectora de Desarrollo y Competitividad de la Oficina de Turismo Bogotá.
Como acción inmediata, desde la Oficina de Turismo de Bogotá solicitaremos una mesa de trabajo interinstitucional con la Secretaría de la Mujer, la Secretaría de Seguridad, la Policía de Turismo y el Aeropuerto El Dorado para revisar y fortalecer los protocolos de atención a mujeres víctimas de violencias en espacios turísticos. Además, impulsaremos una campaña pedagógica dirigida a visitantes, turistas y actores del sector para promover una cultura de respeto y de cero tolerancia frente a cualquier forma de violencia de género.
Este caso debe servir como un llamado urgente a todas las autoridades, operadores turísticos y ciudadanos para no repetir errores, para garantizar rutas efectivas de protección y para dejar claro que en Bogotá no hay espacio para la impunidad ni para la indiferencia.
Nos solidarizamos con la víctima, su familia y su defensa. Bogotá no permitirá que estos hechos pasen desapercibidos.
En Bogotá, quien agrede, responde. Y quien respeta, es bienvenido.