Incendios
Bogotá concentra el 30 % de los incendios estructurales del país, el impacto es devastador
En lo corrido del 2025 se han atendido más de 400 emergencias, una tendencia que amenaza con igualar las cifras del año pasado; la prevención aparece como la principal herramienta para reducir riesgos.

En Bogotá, el fuego avanza de manera silenciosa y constante. Según el Cuerpo Oficial de Bomberos, en lo que va del 2025 se han registrado 402 incendios estructurales, una cifra que, de mantenerse, podría alcanzar los 900 casos reportados en 2024.
Esto equivale a más de dos emergencias diarias que afectan hogares, negocios y vidas en la ciudad.
Históricamente, el segundo semestre del año concentra el mayor número de incidentes, siendo diciembre el mes más crítico. Factores como el uso incentivo de luces navideñas, veladoras y cocinas encendidas durante largas jornadas incrementan los riesgos.
Las localidades más afectadas son Kennedy, Chapinero, Bosa, Candelaria y Engativá, donde hay una alta densidad poblacional e infraestructura vulnerable.
Pero las emergencias no solo golpean las viviendas: en 2024, 292 vehículos fueron consumidos por las llamas y este año ya van 141 casos, lo que también plantea retos para la movilidad y la seguridad.

A nivel nacional, el panorama no es menos alarmante, pues Colombia registra cerca de 10 incendios estructurales diarios y Bogotá concentra alrededor del 30 % de ellos.
Las causas son conocidas: fallas eléctricas (33 %), llamas abiertas (32 %), superficies calientes (7 %), incendios provocados (5 %). El 70 % ocurre en viviendas, muchas de ellas en zonas vulnerables. El 30 % restante, en edificaciones comerciales e industriales, donde el impacto puede ser aún más devastador.
Y aunque la mayoría de los incendios ocurre en viviendas, un 30 % tiene lugar en edificaciones comerciales e industriales, donde el impacto suele ser más complejo por la presencia de materiales inflamables y procesos productivos.
Según el Dane, aunque solo el 26 % del área construida corresponde a usos no residenciales, este segmento concentra una proporción significativa de emergencias.

Desde ANRACI (Asociación Nacional de Protección contra Incendios), hacen un llamado urgente, y es que Bogotá necesita una cultura de prevención. No basta con reaccionar.
Hay que anticiparse. Extintores, detectores de humo, sistemas automáticos de extinción deben ser parte del paisaje cotidiano, tanto como las ventanas o las puertas.
Este llamado será amplificado en la Fire Expo Latam 2025, que se realizará del 30 de septiembre al 2 de octubre en Medellín. Allí, expertos, autoridades y ciudadanos se reunirán para construir soluciones, compartir experiencias y, sobre todo, para encender una nueva llama: la de la conciencia.