Bogotá

Así está el nivel de los embalses tras el fin del racionamiento de agua en Bogotá

La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca dio a conocer el estado de los embalses que abastecen a Bogotá.

14 de abril de 2025, 2:55 a. m.
Embalse de Chuza, del sistema Chingaza
Embalse de Chuza, del sistema Chingaza. | Foto: Acueducto de Bogotá

La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) publicó el más reciente informe con corte al 13 de abril sobre el estado de los embalses que abastecen a Bogotá y la región, justo después del levantamiento del racionamiento de agua.

Según el reporte, el nivel total del sistema Chingaza, principal fuente de agua para la capital, se encuentra en 41,67%, con tendencia descendente. El embalse de Chuza presenta una leve recuperación, alcanzando el 37,54% con una tendencia ascendente (+0,670 millones de m³), mientras que San Rafael baja a 55,12%, con una caída de -0,690 millones de m³.

En la zona norte, el panorama también es preocupante. El embalse de Tominé se ubica en 40,71%, con tendencia descendente. El nivel agregado de los embalses del norte es de apenas 47,62%, lo que representa una disminución de -0,207 millones de m³ en las últimas horas.

Embalse de Chuza, del sistema Chingaza
Embalse de Chuza, del sistema Chingaza | Foto: Acueducto de Bogotá

Por otro lado, los embalses del sur muestran un mejor comportamiento. Regadera destaca con un nivel superior al 100%, marcando 117,25%, mientras que Chisacá se mantiene en 86,63%. El total agregado del sur está en 96,53% y se mantiene estable.

Finalmente, el embalse de El Hato, ubicado en otro sector, se encuentra al 91,19%, pero con tendencia descendente (-0,164 millones de m³).

La CAR recuerda que, aunque se haya levantado el racionamiento, es crucial continuar con el uso responsable del agua, ya que los niveles generales del sistema aún no alcanzan el punto de recuperación sostenible.

Frente a este escenario, la gerente del Acueducto de Bogotá, Natasha Avendaño, explicó en entrevista con SEMANA que ya se están aplicando soluciones estructurales para evitar futuros racionamientos.

“Aun cuando existen varios frentes de acción, las principales soluciones estructurales ya implementadas corresponden a la optimización de la planta Tibitoc y al aumento de caudales concesionados para Río Blanco en el Sistema Chingaza, así como el trámite de aumento de concesión en el río Bogotá que se adelanta ante la CAR Cundinamarca”, indicó Avendaño.

Además, agregó que se avanza en proyectos de reúso de agua y en una estrategia de disminución de pérdidas, uno de los principales retos de la Empresa de Acueducto de Bogotá desde el año pasado.