Uribe responde a Santos: “Ese es un asunto criminal que lo manejan en mi nombre mis abogados”.

Solo un par de palabras le dedicó esta mañana el ex presidente Álvaro Uribe a la extensa carta que el ex presidente Juan Manuel Santos le envió anoche proponiéndole poner fin a la confrontación que ellos dos sostienen desde hace más de una décadas.

Sus abogados, Jaime Granados y Jaime Lombana, precisamente expidieron esta mañana una declaración en la que calificaron a Santos de “cínico” y de “camaleón” y le pidieron que responda ante la justicia.

En su carta de ayer domingo, Santos le pidió a Uribe que si no pueden ser amigos, por lo menos den “ejemplo” de moderación.

Fue la respuesta a la acción penal que Uribe entabló en su contra la semana pasada por haber intrigado ante magistrados de la Corte Constitucional para que lo mantuvieran como imputado ante la justicia ordinaria por los presuntos delitos de manipulación de testigos y fraude procesal.

En una entrevista con Vicky Dávila, directora de Semana, el magistrado del tribunal constitucional reveló que pocos días antes de conocerse el fallo de la tutela en contra de Uribe, Santos había hablado con vario magistrados sobre el tema.

Uribe considera que Santos invadió la órbita de la justicia para intrigar en su contra.

El proceso contra Uribe sigue en la justicia ordinaria y ese hecho obligó a Uribe, como él mismo lo ha aceptado, a marginarse del debate electoral en marcha para no hacerles daño a los candidatos. O por lo menos a no estar al frente de todo el proceso, como lo hizo siempre.

Los últimos episodios en la relación Uirbe-Santos no vaticinan una pronta tregua. De hecho, la nueva acción penal contra Santos crisparon los ánimos de los dos mandatarios.

Uribe y Santos fueron aliados políticos. Santos fue su ministro de Defensa, pero Uribe cree que Santos lo traicionó, entre otra razones, por haber implementado el proceso de paz con las Farc, de la manera como lo hizo.

Uribe y Santos tienen miradas diametralmente opuestas sobre la acción de la guerrilla. Para Santos lo que había era un conflicto armado que ameritaba una solución negociada. Para Uribe temas como el narcotráfico no podían ser abordados como se hizo, entregándoles a las Farc la razón y permitiéndoles intervenir, supuestamente en su solución.

Uribe tampoco estuvo de acuerdo con que los cabecillas de las Farc pasaran del monte al Congreso sin pagar ninguna pena por los delitos que cometieron durante más de medio siglo.

Este ha sido uno de los temas que más han distanciado a los dos ex mandatarios.