Ricardo Bonilla, exministro de Hacienda, a imputación de cargos por corrupción en la UNGRD

Este martes se conoció que el exministro de Hacienda Ricardo Bonilla fue citado a audiencia de imputación de cargos por su presunta responsabilidad en los hechos de corrupción que se presentaron en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).

Así lo anunció la fiscal novena delegada ante la Corte Suprema de Justicia al señalar que en los últimos meses se ha recaudado evidencia probatoria que indica que, en 2023, el entonces ministro de Hacienda participó en el desvío de tres contratos de obra avaluados en 90 mil millones de pesos.

Bonilla, según la estructura de investigación de la Fiscalía, participó en el cuarto suceso de la “macrocriminalidad” que saqueó a la UNGRD.

El exministro deberá responder por los delitos de “tráfico de influencias e interés indebido en la celebración de contratos”, precisó la fiscal delegada en una rueda de prensa.

La actividad delictiva del exministro quedó en evidencia tras las declaraciones que rindió su exasesora María Alejandra Benavides, quien en los próximos días se convertirá en testigo de cargo en este caso.

Incluso, en la imputación de cargos que se realizó el pasado 8 de mayo en contra de María Alejandra Benavides, apareció varias veces mencionado el exministro Bonilla.

En una reunión celebrada el 3 de diciembre de 2023 en la oficina del ministro, en el centro de Bogotá, se fijó la manera en la que se iban a desviar tres millonarios contratos que estaban en manos de la UNGRD.

En el encuentro, el cual contó con la participación activa de Olmedo López Martínez, entonces director de la UNGRD, se mencionó la necesidad urgente de entregarle los contratos que sumaban un valor de 90 mil millones de pesos a un grupo de congresistas que hacían parte de la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público.

“El ministro Bonilla le solicitó a Olmedo López tramitar en la UNGRD proyectos contractuales en los que los congresistas Wadith Alberto Manzur, Julián Peinado Ramírez, Karen Astrid Manrique Olarte, Juan Diego Muñoz Cabrera, Liliana Ester Vitar Castilla y Juan Pablo Gallo Maya se habían interesado ilícitamente”, explicó en esa oportunidad la fiscal del caso.

Posteriormente, se realizaron una serie de cruces de mensajes entre María Alejandra Benavides y Sneyder Pinilla, exsubdirector de la UNGRD, para concretar la forma en que se iban a desviar los contratos.

Esta actividad se hizo contrarreloj, puesto que era importante que los congresistas recibieran la confirmación antes de la votación definitiva.

En los próximos días se fijará la fecha y hora de la audiencia contra Ricardo Bonilla, que se realizará ante la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá.

Por el momento, no se ha definido si se solicitará medida de aseguramiento restrictiva de la libertad.

Los tres contratos que tienen en líos a Ricardo Bonilla

Las pruebas recolectadas señalaron que desde el despacho del ministro Bonilla se dieron las órdenes para realizar la desviación de los contratos:

• El de Cotorra, en Córdoba, tenía el objetivo de hacer obras de intervención correctiva para la recuperación del sistema integral del drenaje de aguas lluvias entre la conexión con la Ciénaga Grande del Bajó Sinú hasta el casco urbano. Todo esto por un costo de 50 mil millones de pesos.
• El contrato de El Salado, en Bolívar, buscaba la construcción de estructuras de contención y mitigación del fenómeno de socavación, erosión y transporte de sedimentos por lluvias en el corregimiento. El convenio tenía un costo de 12.356 millones de pesos.
• En Saravena, Arauca, el contrato de 30 mil millones de pesos tenía como objetivo la construcción de obras de protección para la reducción del riesgo y prevención de inundaciones sobre el río Bojaba.