Judicial
Primicia | Joven acusado de asesinar al director de la cárcel La Modelo busca un preacuerdo con la Fiscalía
Juan David Beltrán fue señalado de ser el sicario que abordó al coronel en retiro Élmer Fernández Velasco.

En la tarde del 16 de mayo de 2024, cuando se dirigía a su casa en su carro particular, el director de la cárcel La Modelo, de Bogotá, coronel en retiro Élmer Fernández Velasco fue asesinado a sangre fría por un sicario.
El caso causó conmoción y todo tipo de preguntas por la poca protección con la que contaba el coronel Fernández. Funcionarios cercanos advirtieron en su momento que el director de la cárcel había recibido todo tipo de amenazas.
Tras nueve meses de pesquisas y revisión de pruebas, las autoridades capturaron en Barrancabermeja, Santander, a Juan David Beltrán Torres, un joven de 22 años que habría sido el encargado de accionar en varias oportunidades un arma de fuego en contra de la integridad del funcionario.
Beltrán fue trasladado a Bogotá con el fin de ser presentado ante un juez de control de garantías para su judicialización. La Fiscalía General le imputó los delitos de homicidio agravado y porte ilegal de armas.
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La fiscal del caso aseguró que el coronel habría sido asesinado por no avalar unos traslados de unos reclusos pertenecientes a peligrosas bandas criminales y delincuenciales.
Uno de estos integrantes habría buscado los “servicios” de una red de sicarios que delinquía en la capital de la República para que planearan y ejecutaran el atentado.
De esta forma, Anyelo Cárdenas Cuca, Diego Alejandro Murillo Rivera y Sharon Julieth Martínez Rosa empezaron a realizar los seguimientos para identificar las rutas del director del centro carcelario ubicado en el sur de Bogotá.
Después de recolectar la información suficiente, contactaron a Beltrán, quien ya tenía un considerable prontuario criminal, para que ejecutara el crimen.

Sin embargo, en medio de la audiencia quedó una gran pregunta en el aire: ¿quién ordenó el asesinato del coronel Fernández Velasco?
Por la gravedad de su conducta, Torres Beltrán fue enviado a la cárcel mientras se adelantaban las otras etapas procesales.
Cinco meses después de esta diligencia, SEMANA conoció que el sicario, por medio de su abogado, tocó las puertas de la Fiscalía General con el fin de negociar un preacuerdo.
En este, además de aceptar su responsabilidad en los delitos, entregaría información que permita aclarar la principal línea de investigación en este caso.

En la actualidad, se evalúa la información que entregue el sicario. Tras pasar varios filtros, informaron fuentes cercanas a la investigación, que se determinará si se le otorga el beneficio judicial.
Los integrantes de la banda La Inmaculada, comandada por el temido Andrés Felipe Marín, alias Pipe Tuluá, ha sido señalada en varias oportunidades de estar detrás de este atentado.
Pese a que lo negaron por medio de un extraño comunicado pocos días después del crimen, las autoridades cuentan con varios testimonios que ubican a los integrantes privados de su libertad en la cárcel de Cómbita, de Boyacá, de haber ordenado el asesinato después que no se aceptara una petición de traslado.
En los próximos días, la Fiscalía General definirá si llega a un acuerdo con el sicario y se firma un preacuerdo que deberá ser presentado ante un juez especializado de Bogotá.